LAS ESENCIAS QUE VENDRAN.
Hay una vasta literatura sobre el distinto comportamiento que producen diferentes olores en los seres humanos. Lo que se está preparando ahora es la explotación comercial de esta actividad. En distintas actividades que requieren de la presencia de muchos clientes -además de los empleados- durante largas horas del día, se estudian sistemas de distribución de esencias, a través del sistema de aire acondicionado para todo un edificio. Así se comienza a esparcir gratos olores en forma sistemática en bancos, hoteles, cadenas de tiendas. Para los japoneses, el principal uso de esta novedad es hacer más gratas las horas que los empleados pasan en los edificios de oficinas.
Sostienen que esta práctica aumenta la productividad y motiva al personal. Se ha estimado que el consumo de las oficinas japonesas puede conformar un mercado anual de US$ 90 millones para el año 2000.
LA INDUSTRIA DEL ENTRETENIMIENTO.
Hoy hay en todo el mundo alrededor de 200 millones de videocaseteras. Los libros se compran en el formato tradicional, pero también en audiocasetes, en discos, o en CD/ROMs. La programación televisiva ha explotado en centenares de alternativas gracias a la recepción satelital y, en el futuro cercano, a la compresión digital, que multiplicará las posibilidades del cable.
La televisión interactiva está funcionando en forma experimental. Los grandes del sector podrán incursionar y competir en algunos segmentos del mercado con los gigantes que dominan -hoy- el sector de telecomunicaciones.
Junto con la formidable revolución tecnológica que está transformando en forma inédita a la actividad cultural, también se está produciendo una gigantesca revolución que afecta a los grandes nombres de la industria del entretenimiento. La transnacionalización y la colocación de productos sin fronteras son la tónica de la década. La única sombra está en la eventual reacción proteccionista que puede surgir de los nuevos bloques comerciales.
GRANDES DESCUENTOS.
Primero fue en Estados Unidos (algunas de las iniciativas de Wal Mart son un excelente ejemplo).
Ahora el concepto se populariza en Europa occidental. Especialmente en Gran Bretaña, todavía sumida en una prolongada recesión. Lo cierto es que los “negocios de descuento” pueden representar una nueva tendencia que cambie profundamente los hábitos de compra del consumidor británico.
Dentro del comercio minorista, es el sector de mayor y más veloz crecimiento. Según los expertos, lo que se avecina en los próximos meses es una confrontación sin cuartel entre los minoristas de alto margen, exitosos durante la década pasada, y los recién llegados. Los negocios de descuento sumaban poco más de un millar a finales de 1992, con ventas por US$ 6.200 millones. A finales de 1997 se estima que serán 2.000 y que facturarán US$ 15.200 millones.
EL FAX CRECE.
El humilde fax ha tenido un extraordinario desarrollo que ninguno de los analistas de la industria fue capaz de prever. Las cifras de ventas anuales de equipos ya no tienen el mismo índice de creda.
Lo que se está multiplicando ahora en progresión geométrica es el uso que se les da, el volumen de información que se transmite y los costos que representan. Tanto, que las empresas proveedoras de papel térmico recomiendan la adopción de una política estricta para el uso del aparato, a fin de contener la expansión de los gastos de la oficina.
En Europa occidental, el mercado de máquinas fax del año pasado ascendió a 1,7 millón de unidades. Alemania absorbió 24% del total; Italia, 15%; Gran Bretaña, 13%; Francia, 13%; España, 9%; Holanda, 4%; y Suecia, 3%. Los nombres de los equipos más vendidos son: Matsushita, 19%; Canon, 17%; Ricoh, 8%; y Toshiba, 6%.
En Gran Bretaña, una reciente encuesta entre 1.000 empresas de primera línea reveló que el promedio de envíos por fax de este año duplica al del año anterior.