Durante junio, la protesta de los jubilados ocupó la primera plana de los medios informativos; aunque divididos en grupos, que incluso actuaron en distintos lugares de la ciudad, finalmente la protesta de mayor repercusión fue la realizada frente a los Tribunales, en Plaza Lavalle. Desde el gobierno se dijo que junto con los jubilados actuaban infiltrados y activistas, cuya filiación va desde el MAS hasta los “carapintada”. La protesta se transformó en un asentamiento permanente, con carpas, elementos de cocina, útiles de labranza para cultivar hortalizas en la plaza, e incluso una vaca. El miércoles 5 los jubilados organizaron una violenta protesta frente al Congreso; voltearon vallas de seguridad y se encontraron en la calle con el ministro Cavallo; éste dialogó con ellos y llegó a emocionarse hasta las lágrimas frente al problema. La posición de las autoridades se fundamentó en la falta de fondos para paliar la situación; presionado por las circunstancias, el gobierno dispuso finalmente un aumento de 300.000 australes. El día 7 los jubilados fueron desalojados de la plaza y se mantuvo una custodia policial para evitar su retorno. El presidente Menem declaró que “no dudaría en repetir el desalojo”. Agregó que “los jubilados pueden estar en la plaza y protestar, pero no acampar y convertirla en un verdadero grotesco”; afirmó también que “la decisión política fue exclusivamente mía, así que no hay que cargar las tintas ni echar culpas a nadie”. Quedó la sensación de que el problema de los jubilados, que comenzó como una cuestión aparentemente menor, creció hasta transformarse en un escándalo de proporciones, que ocupó prácticamente toda la escena nacional. El diputado “Chacho” Alvarez, analizando la cuestión, declaró qu los jubilados fueron protagonistas de la protesta contra el programa económico del gobierno, mientras otros sectores, de los que se esperaba ese comportamiento, quedaron al margen. Otra nota saliente de junio fue una secuencia de atentados y alteraciones del orden que, a su vez, generó acusaciones entrecruzadas entre sectores. El día 3 la jueza María Servini de Cubría negó autorización para el uso de la esvástica y el adjetivo “socialista” a la agrupación neonazi liderada por Alejandro Biondini. Ese mismo día hubo un atentado, el cuarto, contra las Madres de Plaza de Mayo y, también ese día, el ministro del Interior, Julio Mera Figueroa, dijo que no podía investigar el atentado del que fue víctima el cineasta Pino Solanas, porque no disponía de la ley de seguridad, todavía no aprobada. La secuencia se inició el mes anterior, con la profanación de tumbas judías, y se prolongó con amenazas de muerte contra jueces (uno de ellos llegó a anunciar que abandonaba el país y sólo desistió de hacerlo luego de una entrevista en la que el propio Presidente
le ofreció garantías de seguridad). Hubo secuestros, bombas y otros episodios; no faltaron quienes los asociaran con servicios de inteligencia y con la tantas veces mencionada “mano de obra desocupada”, mientras el ministro Mera Figueroa sostuvo que estos hechos son recurrentes en el país en épocas preelectorales. No obstante, el día 7 se informó que el gobierno no aplicará el estado de sitio, a pesar del clima enrarecido que se vive. A ese clima se agregó la anunciada marcha de los adherentes a la versión local del nazismo, cuyos dirigentes reivindican a Hitler y utilizan la esvástica como enseña. Periodistas y reporteros gráficos y de TV de todo el mundo se dieron cita en Buenos Aires para seguir de cerca este rebrote público del nazismo. El día 19, Biondini fue detenido por sus declaraciones insistiendo en realizar la marcha, a pesar de que ésta había sido prohibida.
El índice de precios al consumidor de mayo, conocido el día 4, fue de 2,8%, lo que significa un acumulado anual de 39,3%, o sea un nivel que sigue siendo elevado para las expectativas del equipo económico. En junio mejoró la recaudación fiscal, se lograron algunos acuerdos para rebajar precios o mantenerlos sin variantes por lapsos determinados y se avanzó en el camino de las privatizaciones. Pero el ministro Cavallo advirtió, el 10, a quienes promueven aumentos de precios, que “no esperen que los convalidemos con devaluaciones o emisión”; agregó que “si optan por ese camino, en vez de aumentar la producción, van a enfrentar una recesión”; finalmente señaló que el
gobierno tampoco convalidará “los elevados márgenes de la cadena de comercialización”. Esta insatisfacción del ministro con el comportamiento de los precios no fue, sin embargo, su principal motivo de preocupación. Por lo menos hubo otros dos grandes temas del área económica que estuvieron en el centro de la escena: las dificultades para llegar a un acuerdo con el Fondo
Monetario y la finalmente rechazada iniciativa del ministro de pagar en forma escalonada el medio aguinaldo de junio. A comienzos del mes, el día 8, Cavallo declaró que “la indexación termina por perjudicar a los trabajadores” y, como síntesis, enfatizó que “el equipo económico ha quemado las naves; o estabilizamos o vamos a sufrir problemas de recesión muy graves”. Los mercados se retrajeron en junio, claramente porque subsistió la desconfianza de los inversores y la plaza es muy sensible a versiones y rumores, sobre todo cuando se vinculan con turbulencias que pueden afectar la marcha del plan de convertibilidad.
El ministro Cavallo enfrentó en junio a un Parlamento difícil, tanto dentro del propio partido gobernante como en la oposición; el pago escalonado del aguinaldo es un ejemplo del gran desgaste del ministro en negociaciones dentro del Congreso y con la oposición; el clímax se alcanzó el 18, cuando el ministro se reunió con el ex presidente Raúl Alfonsín durante una hora; el
radicalismo impuso condiciones para dar quórum a los efectos de que se tratara el proyecto de ley, ya aprobado por el Senado. Sin embargo, no se logró un acuerdo y finalmente, el 19, el gobierno anunció que el aguinaldo será pagado, como de ordinario, a fin de junio. Un conjunto de iniciativas del Ejecutivo, que tienen relación con el programa económico, se estancaron en el Congreso, como sucede con la ley de flexibilización laboral, las reformas a la ley de accidentes de trabajo y el proyectado tope indemnizatorio. Resulta claro que el ministro quería apresurar algunos trámites legislativos antes de las elecciones y la renovación del Parlamento, en previsión de que la futura composición le resultara más adversa aún que la actual.
Analistas económicos como Miguel Angel Broda opinaron en junio que el rumbo económico que se está siguiendo es el resultado de un cambio profundo en la sociedad argentina y, por lo tanto, no va a modificarse aunque cambien los funcionarios; es decir que, según esa interpretación, se estaría frente a una situación inédita y sin retroceso para el camino elegido. Sin embargo, para el
FMI los números siguen sin cerrar y la negociación se complica; ya en la primera semana de junio el Fondo insistió en que hay que aumentar tarifas y naftas; los subsecretarios Bouer y Tacchi y el titular del Banco Central, Roque Fernández, viajaron a Washington sin alcanzar una solución. El 18, el propio Menem reconoció que “está trabada la negociación con el Fondo”.
En el campo sindical, junio fue un mes con novedades: la alineación de Barrionuevo, Ubaldini y Miguel dio lugar a la formación del así llamado BUM, una entente que incluye a Lazcano, Ibáñez y Zanola, entre otros dirigentes. El acercamiento de Ubaldini a Miguel condujo a Mary Sánchez a separarse de la CGT Azopardo y mostró que, en las actuales circunstancias, el movimiento
sindical está viviendo casi a diario episodios de escisión y realineación, cuyo tema de fondo es la redefinición del sindicalismo de raíz justicialista frente al gobierno del doctor Menem. En el terreno político creció durante el mes la impresión de que el oficialismo deberá trazar su estrategia futura a partir de la hipótesis de resultar perdedor en distritos importantes, como podría ser el caso de la Capital Federal, Santa Fe y Córdoba. Al mismo tiempo, persisten los interrogantes acerca de la provincia de Buenos Aires, donde las chances del vicepresidente Duhalde aparecen como más firmes.
El gobierno procura que, en las provincias clave, los comicios se realicen en forma simultánea, a los efectos de evitar el arrastre negativo que se produciría si las elecciones en Buenos Aires fuesen posteriores a las de otros distritos donde el justicialismo resultara perdedor. En la interna del radicalismo en Santa Fe, Usandizaga obtuvo un amplio triunfo, que le acuerda la mayoría y la
minoría; días más tarde (el 10), declaró que “terminó la hegemonía de Alfonsín”.
A lo largo de todo el mes, algunos temas aparecen en forma recurrente: uno de ellos es la venta de trigo subsidiado de Estados Unidos a Brasil; a pesar de que el gobierno brasileño aplica un arancel de importación al cereal, los molineros lo siguen importando porque aun así les resulta más barato que el trigo argentino. Hubo protestas formales de las autoridades argentinas, explicaciones en Estados Unidos de que las operaciones las realizan empresas privadas y no el gobierno e incluso, altos funcionarios de Washington, como David Mulford, que formulan críticas a esas operaciones.
El ministro Cavallo anunció que en 1992 se pondrá en circulación el nuevo peso, equivalente a 10.000 australes y con una paridad de uno a uno respecto del dólar. Al día siguiente, el 23, se conoció la intención de Cavallo de crear un impuesto inmobiliario adicional en la Capital Federal. La iniciativa desató una fuerte oposición y el ministro declaró que se la puede dejar sin efecto si alguien propone una idea mejor (martes 25). En tanto, en Washington, el canciller Di Tella expresaba que la negociación con el FMI marcha bien y que el directorio de la institución aprobará el acuerdo en julio.
Debemos hacer honesto al mundo antes de poder decir honestamente a nuestros hijos que la honestidad es la mejor política. (George Bernard Shaw)
El poder corrompe a los menos; la debilidad corrompe a los más. (Eric Hoffer)
Un monopolio es una empresa que ha llegado al final de su camino. (Henry Demares Lloyd)
Corporación: un ingenioso mecanismo que permite el beneficio individual sin responsabilidad individual. (Ambrose Bierce)
Es extraño que los hombres recurran al crimen cuando hay tantas maneras legales de ser deshonesto. (Revista “Sunshine”).

