Por Mario Lia
Es simple: hay que tener la información adecuada para tomar las decisiones; el conocimiento para diseñar procesos eficientes y económicamente viables que permitan alcanzar las metas del negocio y la tecnología para que todo se base en elementos confiables.
Esa información empresarial “adecuada,” antes limitada al registro de las operaciones y resultados, ha dejado de ser una prolija combinación de columnas. Y es así incluso en aquellas organizaciones en las que se sofisticó el manejo de los datos con la creación de indicadores claves, generación automática de reportes y otros recursos de BI (Business Intelligence). El universo exterior, que es el verdadero campo de batalla, está poblado de datos que surgen desde las economías, los consumidores, los mayoristas, minoristas, distribuidores y muchos otros jugadores. Todos pueden ser claves.
A las empresas, grandes consumidoras de servicios de información como investigaciones de mercado, indicadores económicos y otros, les resulta muy incómodo y lento consolidar diferentes fuentes internas y externas para decidir acciones ¿Qué está ocurriendo?
Lo que ocurre es que ya no hay datos cualitativos por un lado y cuantitativos por el otro. Se acabó la prolijidad. Comportamientos, percepciones, capacidades y hasta creencias, se encierran secretamente en un mismo resultado.
El mundo está poblado de datos estructurados y no estructurados que tienen o pueden tener impacto en el negocio. Quienes dirigen se van enterando rápidamente de la importancia que tiene esa marea de datos y se preguntan cómo hacer para dominarla. Y llaman a sus especialistas en TI (Tecnología de Información) para que les den una solución. Saben qué quieren, pero no cómo tenerlo.
Y aquí, como decían nuestras abuelas, no hay cuerpo que aguante. Ya no hay departamento de TI que pueda bancar toda la investigación, prueba e implementación de una variedad tan grande de soluciones. Imaginen decidir y poner en marcha todo lo necesario para ejecutar confiablemente una multitud de variantes tecnológicas que requieren de alta especialización. No todos pueden tener un montón de científicos de datos, investigadores en inteligencia artificial, herramientas de orquestación con diferentes niveles y sistemas operativos, políticas de seguridad y un montón de cosas más.
La eficiencia comienza por casa
Nadie puede elegir un camino si no sabe hacia dónde se dirige. Y no es ninguna novedad que los objetivos de los recursos deben responder a las metas de la conducción. Es por esa razón que la conducción debe (con la ayuda de los profesionales indicados) establecer claramente qué necesita en términos de diseño y ejecución de los procesos del negocio. También definirá qué información necesita para tomar sus decisiones.
No sería una mala idea, para comenzar el aprovechamiento de las nuevas tecnologías, aplicar esfuerzos o proyectos de TI a los procesos existentes y básicos del negocio. Aquí es donde comienza a jugar un papel concreto la inteligencia artificial y lo hace en la forma de lo que ha sido denominado como RPA (Robotic Process Automation). Se trata de robots de software que interactúan con las personas resolviendo pasos de los procesos que son previsibles y sistematizables, ahorrando tiempo y esfuerzo a los humanos. De alguna manera, esta aplicación de IA tiene parentesco con los recursos de Workflow. De hecho, perfecciona el concepto.
Otra interesante aplicación de la inteligencia artificial está en el campo del manejo de la calidad de los datos. Una vez resuelta la etapa del modelado de los mismos y abarcando el mayor alcance posible, existen herramientas de IA que ayudarán a lograr que esos datos tengan la calidad necesaria para la construcción de indicadores válidos.
Como comentario adicional, podemos decir que además de los proveedores independientes de esta clase de solución, existen importantes avances en el mundo Open Source.
Computación en todos lados y desde todos lados
Poco o mucho, en casi todas las actividades ha impactado el efecto pandemia con sus consecuencias transformadoras. Una de las principales preocupaciones, además de la de tener la capacidad de desempeñarse en este escenario, es la de la seguridad de la información. Y en este punto, sin entrar en detalles, sabemos que es una historia sin final. La seguridad de los datos es un continuo y las estrategias varían según se trate de la periferia de la red (End Points), de IoT (Internet of Things), el uso de nubes o el control de aplicaciones no permitidas, entre otros muchos. Los problemas de seguridad aumentan con el uso de nubes y aparecen temas como el cuidado de la integridad de los datos, evitar la piratería y la protección de la privacidad.
Los proveedores de servicios de nube han sido importantes en el espacio del trabajo descentralizado. Han logrado que las actividades de los empleados de las empresas, los maestros, profesores y muchas otras profesiones puedan seguir cumpliendo con sus funciones. Ellos han resuelto muchos problemas que habrían sido muy complejos para los recursos propios de TI en las organizaciones.
Tanto el mantenimiento como el crecimiento de la actividad ultra distribuida requerirán de la combinación de esfuerzos multifuncionales. Y esto también será complicado y costoso para los departamentos de TI de las compañías.
¿Acaso hay que recurrir al outsourcing para todo? Hace dos años mi respuesta habría sido que no. Hoy, no tengo una respuesta. Posiblemente las empresas deban tener un cuerpo de expertos en TI muy especializados en el negocio y que tengan como principal valor el de adoptar los recursos correctos y que mejor se ajusten a las necesidades de conducción.
Estamos ante lo que hace unos años, cuando mirábamos al futuro, definíamos como el modelo “utility” de entrega de la computación. En realidad, ante algo parecido como visión. La gran diferencia está en la tremenda irrupción de tecnologías que intervienen en el trabajo distribuido. No es solamente computación. Es una mezcla de niveles, fuentes, herramientas y plataformas.
Los recursos humanos especializados ya no están cerca de nuestros escritorios. La concentración creada por la nube en algunas disciplinas profesionales nos muestra que los recursos humanos especializados tenderán a concentrarse en esos prestadores o usinas proveedoras de computación, redes y servicios. Y las empresas usuarias, en lugar de persistir en la limitación que necesariamente crea el tener su propio staff, comenzarán a aprovechar esa concentración como una ventaja de escala más en su mosaico de costos operativos.
¿Muchos Datos = Muchos Resultados?
Estos cinco últimos años se habló mucho de Big Data e inteligencia artificial. El entusiasmo con estas variantes fue creciendo con bastante velocidad en algunos rubros de negocio. Algunos de esos rubros implementaron Big Data en la forma de entornos de almacenamiento alimentados con herramientas de extracción más ágiles que las que suelen usarse en las aplicaciones de Businness Intelligence. En algunos sectores, como el de la telefonía celular, se tiraron de cabeza a una utilización que utópicamente tendía a capitalizar en tiempo cuasi real las bondades de Big Data. El resultado fue que una multitud de operadores comenzó a llamar a los usuarios de la competencia, a gente que alguna vez los había contactado a ellos u otro proveedor, a personas que cruzaban llamadas con un mismo cliente y así. Siempre siguiendo los mágicos patrones de las herramientas basadas en Big Data.
Los resultados no fueron los esperados, hablando en general. Hace un par de años se realizaron varias investigaciones sobre el tema. Resumiendo, la mayoría de las fuentes coincidieron en que en un 70%de las empresas que habían adoptado Big Data e inteligencia artificial sentían que estaban frente a un verdadero desafío. Las causas principales: dificultad para ponderar el valor de los datos y en consecuencia el de los resultados ofrecidos por las herramientas de análisis e IA.
Según una predicción de la firma de investigación Gartner, para el año 2022, solamente un 20%de las extracciones analíticas de Big Data se traducirá en resultados utilizables en el negocio. Lo que podemos concluir de estas breves observaciones es que la participación inductiva de los humanos sigue siendo necesaria. Se complementa y sigue haciendo falta el instinto u olfato de quienes saben del negocio.
Volviendo a la perspectiva de Tecnología de Información ¿Conviene más ir haciendo la experiencia prueba/error con nuestros recursos estables de costo continuo o ir realizando pruebas periódicas con un proveedor especializado? ¿No es más simple pedir lo que necesitamos a ese proveedor y una vez que logre hacerlo explorar la forma que más nos conviene? El costo de los científicos de datos es muy elevado y generalmente las empresas no tienen experiencia en su conducción como recurso humano. Motivar y orientar a alguien que hace algo que no sabemos bien cómo es no resulta fácil.
Hay campos en los que la abundancia de datos puede ser fructífera. Tal es el caso de Internet of Things, donde existen millones de sensores que detectan condiciones perfectamente acotadas. Allí los registros históricos y las tendencias son muy útiles y aprovechan muy bien el empleo de herramientas de análisis predictivo.
Hacia un escenario Multi-Cloud
Quienes dirigen empresas y otras organizaciones saben que pueden acceder a soluciones y recursos que antes no estaban a su alcance. También están dejando de ver a la tecnología de información con los ojos de la gente de TI. El enfoque de la innovación en el uso de TI está pasando cada vez más a manos de la gente que maneja el negocio. Y la visión desde el negocio es siempre, necesariamente, más amplia y ambiciosa. La velocidad de acción que se necesita para mantenerse competitivo no puede subordinarse a limitaciones departamentales. Es por esa razón que en las organizaciones se deberá recurrir a proveedores de nube con diferentes especialidades.
Por otra parte, todas las tendencias indican que nos dirigimos hacia un escenario en el que los recursos humanos especializados serán escasos. De hecho, ya lo son en inteligencia artificial, en seguridad, en manejo de la integración de nubes, en Big Data, en modelado y management de datos y en muchas otras especialidades relacionadas.
Es sumamente difícil crear un planeamiento de carrera y formación profesional dentro de la empresa. Retener y motivar es complicado cuando se trata de perfiles técnicos que comparten pocos intereses profesionales con sus pares cercanos. Además, existe una marcada tendencia a la rotación y al trabajo independiente. Los proveedores de nube y servicios profesionales de alta especialización podrán contener a estos perfiles y además pagar su valor. Y lo harán porque se generarán economías de escala mediante la concentración. En lo que hace a la investigación y desarrollo, las organizaciones podrán crear mayores curvas de experiencia que se traducirán en valor agregado para los clientes usuarios.
Muchas de las compañías proveedoras que hoy lideran el mercado serán puestas a prueba. Algunas se atan al viejo modelo y otras se han dispuesto a sacrificar su modelo tradicional para jugar todas las fichas al nuevo escenario, como parece (enfatizo parece) ser el caso de una compañía emblemática como Sap, a la que doy como ejemplo porque otras, como Microsoft e incluso IBM, ya comenzaron a jugar fuerte.
Mencionamos a estos pocos elefantes porque analizar el sector en su totalidad amerita un artículo especial y muy largo. De hecho, el cambio en los escenarios durante estos dos últimos años ha llevado a que cientos de importantes empresas de TI redefinan sus estrategias. Las firmas que desarrollan servicios y consultoría no son la excepción y para no quedar atrás, adquieren conocimiento mediante la compra de start–ups, No hay tiempo para la formación de profesionales y ese es el nodo del problema. Compañías de software pasando a la nube son otra amenaza competitiva para algunas firmas consultoras.
Logicalis
La transformación es continua
“La Argentina está dentro de los parámetros de la región en la adopción de tecnologías y procesos de transformación digital. Sin embargo, existen algunas barreras, como la infraestructura en conectividad”, considera Juan Ignacio Fernandes, gerente Senior de Tecnología de la firma.
Por Carina Martínez
Esto se debe a lo amplio de nuestro territorio y la dificultad para llegar a lugares aislados –explica Juan Ignacio Fernandes–. Esta situación genera que soluciones como Internet de las cosas, en sectores que son claves para el desarrollo de la economía del país, como gas y petróleo, minería o el agro, no puedan aprovechar todas las oportunidades que brinda la tecnología –indica Juan Ignacio Fernandes–. Como respuesta a este problema trabajamos para impulsar la conectividad con soluciones disponibles en el mercado, como LoraWAN, a la espera de la llegada de 5G privado, que sin dudas nos va a dar más opciones.
–¿Cuáles identifica como las tecnologías más disruptivas de los últimos años y cuál es su impacto en las organizaciones?
–En estos años hay varias tecnologías disruptivas que venimos impulsando. Algunas se han consolidado y otras están en camino a hacerlo.
Cloud computing se convirtió en una de las ganadoras. Los balances del último trimestre de 2020 de las grandes compañías que brindan soluciones de este tipo (desde Microsoft, Google, Amazon, hasta Alibaba) son una prueba de esto. Asimismo, como resultado del aumento en el trabajo remoto en el último año, la demanda de servicios de cloud computing se ha disparado y las organizaciones están probando realmente la escalabilidad, flexibilidad y eficiencia que ofrece una infraestructura basada en la nube. Distintas firmas de análisis de mercado coinciden en esta tendencia ascendente. Boston Consulting Group estima que el mercado de los servicios cloud crecerá al menos 2,5 veces durante los próximos tres años. En el caso de América Latina, se muestra un potencial de crecimiento significativo, con una expansión continua en todos los segmentos. Por su lado, IDC afirma que la infraestructura en la nube crecerá 26,7% en la región para 2021.
Entre las tecnologías que están en camino a consolidarse en nuestras latitudes aparece 5G y con ella Internet de las Cosas (IoT, por sus siglas en inglés). Actualmente, existen casi 21 billones de dispositivos conectados en todo el mundo, desde autos y dispositivos hogareños, hasta industrias y ciudades. IoT, junto a Business and Data Analytics, permitirán a las empresas y gobiernos tener información precisa y relevante para mejorar la relación, los productos y servicios que ofrecen a sus usuarios. En cuanto a 5G, más allá de la mejora de la velocidad, se espera que pueda satisfacer las necesidades de comunicación de miles de millones de dispositivos conectados, con las compensaciones correctas entre velocidad, latencia y costo. Lo interesante cuando hablamos de 5G, por ejemplo, es que lo hacemos de muchas otras tecnologías que la hacen posible, como automatización y “programabilidad”, fundamentales por lo que aportan en términos tecnológicos y operativos.
–La irrupción y consolidación de estas tecnologías y las necesidades emergentes de los clientes ¿de qué manera impactaron en la compañía?
–En el caso particular de Logicalis nos vamos transformando continuamente. Está en nuestra esencia por lo que hacemos. Siempre queremos estar listos para llevar nuevas tecnologías y servicios al mercado, por eso adaptamos nuestro negocio a las nuevas formas de consumir tecnologías y servicios para acompañar a nuestros clientes.
La importancia en esta transformación está fundamentalmente en nuestra gente desarrollando nuevos conocimientos y capacidades, adaptando nuestros perfiles pero, sobre todo, enfocándonos en el cliente para desarrollarnos en conjunto.
También incorporamos la agilidad desde hace tres años en nuestras áreas de generación y de implementación. Esa es otra muestra de que los cambios no son solo de conocimiento, sino culturales. Asimismo, esta transformación nos permitió firmar alianzas globales con las empresas más importantes en cada oferta tecnológica.
–¿Cuáles son las nuevas tecnologías que se perfilan en el futuro cercano?
–Queda mucho camino aún con las tecnologías que mencionamos antes, porque algunas todavía no llegaron a implementarse en nuestro mercado. Por ejemplo, hoy en día, seguimos desarrollando nuevos servicios con nuestros clientes para administrar sus nubes híbridas y automatizar sus operaciones. También considero que solo estamos tocando la superficie en cuanto a lo que podemos hacer con Data Science, Analytics y Business Intelligence.
Everis
Demandas que impulsarán más cambios
“Estamos presenciando la aceleración del uso de tecnologías que eran disruptivas hasta hace algunos años y ahora han aumentado su valor en la sociedad y su demanda: el movimiento a cloud, los asistentes virtuales, la inteligencia artificial, la automatización de procesos, el low code y el análisis de datos son algunos ejemplos”, reflexiona Pablo Pereira, CEO de la compañía.
Por Carina Martínez
“Sin embargo, no se observa un drástico antes y después. Por el contrario, los cambios en las organizaciones se dan como procesos y sin violentas discontinuidades, ya que necesitan madurez, reducción del riesgo, economías de escala y oferta de conocimiento, lo cual lleva un tiempo prudencial. La singularidad, en este caso, es que los ‘ciclos de aprendizaje’ toman cada vez menos tiempo, es decir, que se adoptan más rápidamente las tecnologías en el mercado”, indica Pablo Pereira, CEO de Everis.
–Los nuevos desarrollos y las nuevas tendencias y demandas de los clientes, ¿llevaron a un cambio del modelo de negocios?
–En el caso de Everis, el modelo de negocios tiene súper internalizado que somos pioneros en la adopción y formación de grupos de conocimiento que se especializan en nuevas tecnologías, aquellas que tienen alto potencial de agregar valor a nuestros clientes. Luego vamos trabajando en la aplicación de estas tecnologías para cada proyecto. Por definición, nuestra industria está en constante cambio de modelo de negocios, de adopción de nuevos servicios o de nuevas capacidades. Es la razón de ser de una compañía de servicios tecnológicos.
–¿Cuán avanzada está la adopción de tecnologías y procesos de transformación digital (profunda) en las empresas, en la Argentina?
–Hay muchas compañías que están avanzando con varias aristas diferentes de la adopción de nuevas tecnologías. No hay grandes diferencias en la calidad o categorización del tipo de proyectos que vemos localmente, en comparación a los que se hacen en otros países. La capacidad, la necesidad y el valor potencial de la transformación digital sin duda están disponibles en el país y son visibles. El gran diferencial es la capacidad de inversión; se pone de manifiesto la posibilidad de plantear modalidades de negocio diferentes que cambien Capex por Opex, o que sean de repago muy acelerado.
Soluciones a futuro
–¿Cuáles son las nuevas tecnologías o los modelos de gestión de procesos que se vislumbran en el futuro cercano?
–La adopción de 5G me parece que va a ofrecer nuevos paradigmas de relacionamiento entre consumidores y proveedores de servicios de materiales en todos los rubros. Va a ofrecer un abanico de soluciones que hasta ahora eran imposibles, ya sea por la velocidad requerida o por alto costo.
La realidad virtual y la inteligencia artificial todavía no tuvieron el impulso que seguramente vamos a empezar a ver en los próximos años.
También me parece que el ciclo de la pandemia despertó un entendimiento cabal y dejó al descubierto que es necesario un nuevo mecanismo de relacionamiento entre los consumidores y los servicios (incluyendo a los Gobiernos) y eso va a tener cada vez más incidencia en los reclamos de usuarios y ciudadanos.
MicroStrategy
El poder de la información
“Las tecnologías más disruptivas tienen que ver con los datos, porque el mundo es más digital, la gente está cada vez más conectada y recibe más ofertas dirigidas, micro segmentadas”, asegura Luis Lombardi, CEO de la firma para Latinoamérica Sur.
Por Carina Martínez
“Por este motivo surgió Big Data, para micro segmentar al mercado –explica Luis Lombardi, CEO de MicroStrategy–. El comportamiento digital de la persona es el que nos da cada vez más información, y esta puede ser usada para vender más y para anticipar a la gente en sus conductas de compra. Esto hizo que se genere más tecnología vinculada con el análisis de datos, la inteligencia artificial, la analítica con Big Data y el análisis de los datos desestructurados, o sea, los datos que no están en un Excel o en una tabla, sino que surgen, por ejemplo, de todos los lugares en que la persona tocó en la pantalla del celular dentro de una aplicación, o aquel que más miró en la pantalla. Esa es información vital que requiere de nuevas herramientas”.
–Las nuevas tecnologías y tendencias ¿de qué manera transformaron a las empresas?
–Estos nuevos desarrollos y tendencias generaron un gran cambio en la manera de vender de la compañía y de hacer negocios. No se puede seguir queriendo hacer negocios de la misma manera que se hacía hace 30 años, cuando no existía ni siquiera el celular o la tarjeta de crédito. Todo esto fue cambiando y aquel que cambió va a tener mayor asertividad con los clientes.
El perfil requerido de los empleados también cambió. Hoy todas las personas tienen mucho más conocimiento de marketing digital y de analítica, hablan o conocen de nombre la inteligencia artificial. Hace dos años parecía una palabra solo de libros de ciencia ficción. Hoy, muchas personas saben perfectamente que ayuda a los algoritmos a aprender sobre ciertas conductas. El foco de los productos y servicios también se fue modificando; ya no es el proveedor quien tiene el control del cliente.
Actualmente, el control total está del lado del usuario, por ejemplo, en los servicios de streaming. El día que el cliente quiere dar de baja el servicio lo da de baja, sin depender de que te atienda alguien de atención al cliente. O, si sabe que el primer mes es gratis lo explota “a full”. Claramente con la transformación digital esta relación cliente-servicio cambió mucho.
Impulso a la digitalización
–En la Argentina, ¿cuán desarrollado está el proceso de digitalización?
–La transformación digital en Argentina venía lenta, y la pandemia hizo que las empresas obviaran aspectos formales como financieros, o protocolos de seguridad y hasta económicos, que frenaban el desarrollo sostenido de este proceso que muchas compañías ya habían iniciado. Había muchos peros que frenaban la digitalización de los negocios. Con la pandemia pasó a ser más importante ser digital que tener todo en orden.
La pandemia destruyó el negocio físico y obligó a digitalizar. Hace no mucho tiempo las grandes cadenas tenían un 7% de la venta online y un 93% en los salones, ¿por qué iban a invertir en digitalizar su negocio si la prioridad, el flujo, la tenían el salón? Hoy para sobrevivir no hubo otra opción que acelerar a fondo el proceso de transformación digital.
–¿Cuáles son las principales barreras para que se despliegue esta transformación tecnológica?
–La principal barrera en Argentina para implementar un proceso de transformación digital es la falta de previsibilidad en los negocios, más allá de la crisis de la pandemia, la inestabilidad es un gran enemigo de estos proyectos que requieren planificación a futuro.
–¿Cómo imagina que será el futuro tecnológico o la gestión de procesos, apalancada en la tecnología?
–El futuro va hacia la híper–inteligencia; cómo llega la información a cada persona sin que sepa siquiera que necesita esa información; sin pedirle a la persona que gaste tiempo o conocimiento en buscarla.
La única manera de que la inteligencia empresarial sea masiva es que todas las personas puedan conocer los datos de esa compañía sin tener que estar interesada en conseguirlos. Ese es el futuro que veo; la misión de la información en las organizaciones.
Esa información es para una persona determinada, con un dispositivo determinado (que es propio de esa persona) y para el perfil de área de negocio o función que tiene dentro de la organización a la que pertenece.
Todo esto personalizado, sin tener que hacer un clic, sin necesidad de esperar un segundo, sin necesidad de aprender una nueva herramienta.
Ese es el futuro que MicroStrategy ya está distribuyendo en el mundo.
La transformación digital es el nuevo medio para hacer negocios; es el camino que no tiene ticket de retorno. Si hacemos negocios como hace 30 años, tenemos que agradecer porque nos han regalado 29.
Tenemos que pensar también en las nuevas generaciones; cómo van comportándose e interactuando con sus medios. Hoy hay muchos jóvenes que en su primer trabajo nunca conocieron a nadie ni interactuaron con compañeros de oficina. Eso define comportamientos y esos comportamientos definen conductas, y poder predecir esas conductas puede ayudar a hacer negocios en los próximos 30 años, cuando esa generación de gente que empezó a trabajar en 2020 esté en su punto más alto de productividad y crecimiento profesional.
Baufest
Enormes desafíos
“La tecnología no es neutra y es responsabilidad de los dirigentes de cada empresa y de cada individuo tener un pensamiento crítico sobre su uso”, sostiene Adrián Lasso, vicepresidente y Chief Innovation Officer de la empresa.
Por Carina Martínez
“A través de nuestros ‘Principios de tecnología centrada en las personas’, desde Baufest declaramos nuestro compromiso de llevar adelante los proyectos y las prácticas que encaramos con una postura clara y ética respecto a la seguridad de la información, la privacidad, la dependencia y el aislamiento”, asegura Adrián Lasso, vicepresidente y Chief Innovation Officer de Baufest.
–¿Cuáles son los desarrollos tecnológicos que más impactaron a las organizaciones en los últimos años?
–Las tecnologías más disruptivas que surgieron en los últimos años son cloud, Data Science (modelos predictivos y prescriptivos), analítica avanzada, blockchain, IoT (internet de las cosas), Robotic Process Automation (RPA) y algunas otras ramas de la inteligencia artificial como los chatbots cognitivos con procesamiento de lenguaje natural, texto a voz y voz a texto; y visión por computadora. Todas ellas siguen pisando fuerte, evolucionando y su nivel de adopción continúa creciendo gracias al valor que le aportan al negocio.
Ponderación de las habilidades “blandas”
–¿De qué manera estas tecnologías transforman a las organizaciones?
–Los beneficios que aportan estas tecnologías al negocio permiten ganar competitividad y adaptarse de manera ágil y efectiva a las tendencias y cambios del mercado. En términos generales, el uso de estas nuevas herramientas y plataformas permite aumentar la productividad, obtener productos o servicios de mayor calidad y reducir costos.
El enfoque customer centric y las múltiples posibilidades que ofrecen las nuevas tecnologías, sumado a la digitalización de los consumidores llevan a las compañías de diversas industrias a repensar la relación con sus clientes y proveedores.
Muchas compañías ampliaron y agregaron otros modelos de negocio, por ejemplo, empresas del mundo B2B que comienzan a desarrollar una relación directa con sus clientes finales mediante plataformas cloud de e–commerce, generando un modelo B2C.
Ahora bien, estos cambios organizacionales no siempre son tan sencillos. Incorporar tecnología, como todo proceso de innovación, requiere la capacidad de ejecutar el trabajo diario mientras que se aprenden cosas nuevas y se adopta una nueva realidad. Es por esto que los perfiles más valorados en el mercado actual son aquellos que no solo tienen conocimientos de tecnología, sino también las habilidades blandas para implementarla y utilizarla: colaboración, empatía, asumir riesgos y afección al cambio. Desde hace algunos años existen nuevos roles como el Chief Digital Officer, el Chief Data Officer y el Chief Innovation Officer que son capaces de acompañar estos procesos de Change Management y liderar tecnológicamente la estrategia de la compañía.
–Las empresas de la Argentina, ¿están avanzando, de manera profunda, en su transformación digital?
–De acuerdo a una encuesta realizada por la consultora Glue Executive Search, en 2019 el 83% de las compañías argentinas ya se encontraba en un proceso de transformación digital. Teniendo en cuenta que la pandemia la aceleró, seguramente este porcentaje hoy es aún mayor.
Esto demuestra que, en la Argentina, la mayoría de las empresas comprendieron que la transformación digital es el camino hacia una organización más flexible y competitiva y que la inversión en tecnología hoy es una decisión estratégica.
–¿Qué tecnologías marcarán tendencia en el futuro cercano?
–Existen diversas tecnologías que se encuentran en etapa de crecimiento y que, seguramente, dentro de poco tiempo serán tendencia. En el campo de la inteligencia artificial, computer vision y machine learning con su modelo de lenguaje estrella, GPT3, y también se continúan desarrollando algunas prácticas de IoT, blockchain y robótica.
Red Hat
Apuesta al trabajo colaborativo
“Al ser una empresa que se apoya en open source como su principal herramienta, Red Hat contribuye de forma permanente a los nuevos desarrollos tecnológicos dentro de las comunidades del código abierto”, sostiene Javier Carrique, director comercial de la compañía.
Por Carina Martínez
“Podríamos decir que este modelo de negocios de constante evolución tuvo una etapa de profundización en los últimos meses, a raíz de que muchas empresas tuvieron que apoyarse en las tecnologías y herramientas que Red Hat ofrece para poder superar sus desafíos más urgentes –asegura Javier Carrique, director comercial de la tecnológica–.
Todos nuestros productos y servicios apuntan a un camino de crecimiento, escalabilidad y cambio continuo. Una posibilidad de que diferentes empresas y organismos puedan hacer más sin tener que hacer grandes modificaciones en sus estructuras”.
Respecto de cuáles fueron las tecnologías más disruptivas de los últimos años, el ejecutivo sostiene que en Red Hat todo se encolumna o se inicia en el código abierto, básicamente por el diferencial que ofrece el trabajo colaborativo en comunidad. “El código abierto permite conectar a desarrolladores de diferentes partes del mundo, mediante diferentes soluciones como Linux, nube híbrida abierta, contenedores y Kubernetes, para buscar soluciones innovadoras que aceleren procesos de transformación digital. Otra de las principales revelaciones en el sector de tecnología es el edge computing –explica Carrique–. La misma permite que las empresas pueden resolver problemas claves como el ancho de banda, optimizar velocidades e incrementar la calidad en la transmisión y procesamiento de datos, al tiempo que se reducen los riesgos ante potenciales ciberataques y se disminuye la latencia. Gracias a este tipo de soluciones, el edge computing acelera la toma de decisiones y el procesamiento de información en tiempo real, lo cual elimina el factor tiempo que en algunos casos es crucial, y en muchos otros es, al menos, un costo extra”.
El cambio es cultural
Como toda transformación, la tecnología disponible es solo el primer paso del proceso. Para que el impacto sea efectivo dentro de las organizaciones, se requiere de un trabajo aceitado que allane la real puesta en práctica. En este sentido, según Carrique, en la Argentina, “se está atravesando un camino guiado por la transformación digital de empresas y organizaciones el cual conlleva eventualmente también a un cambio cultural, que implica una mayor adopción de todas las herramientas tecnológicas que mejoran el accionar de una empresa u organización, dentro y fuera de la misma. Desde ya que todo tipo de cambio profundo lleva tiempo de implementación y adopción. Es un proceso que se va a seguir prolongando pero a un paso rápido de aceleración –indica–. Un dato alentador en este aspecto surge de la más reciente edición del estudio ‘El estado del open source’, realizado por Red Hat por tercer año. El mismo dio cuenta de que el 87% de los encuestados considera que el código abierto empresarial es igual o más seguro que el software propietario, debido en gran parte a sus procesos de investigación y pruebas comerciales. Esto es una clara muestra de que la adopción de nuevas tecnologías de código abierto es cada vez mayor y genera más confianza. Es lo que está encaminando la transformación cultural”.
Lo próximo
En cuanto a las nuevas tecnologías que se avecinan, el ejecutivo de Red Hat considera que entre las principales tendencias se destaca la nube híbrida abierta. “Durante 2020, la nube híbrida abierta fue la elegida por muchas organizaciones que deseaban actualizarse de un entorno tradicional a uno digital. Esta les permitió obtener mayor escalabilidad y agilidad y de esta manera responder a los cambios rápidamente, aspecto que fue esencial durante la pandemia para satisfacer las demandas de los clientes –indica–. Estas características junto con su capacidad de flexibilidad, integración y nivel de seguridad, convirtieron a la nube en el centro de la estrategia de las compañías para administrar diferentes cargas de trabajo”.
A esto, Carrique agrega DevOps, que se relaciona con el cambio organizacional de las empresas, algo que, si bien se inició en el sector tecnológico, está en proceso de masificación. “En este sentido, DevOps es una metodología de vital importancia para la transformación cultural, ya que describe los enfoques para agilizar los procesos con los que una idea pasa del desarrollo a la implementación, en un entorno de producción en que puede generar valor para el usuario”.
SAP
Tecnologías que transforman a las organizaciones
No es descabellado pensar que en poco tiempo veremos el primer automóvil hecho en impresora 3D, una ciudad con más de 50.000 habitantes y ningún semáforo o el primer celular “implantable” disponible comercialmente, tal como pronosticaba el Foro Económico Mundial hace algunos años.
Por Lionel Turek (*)
Los rápidos avances tecnológicos nos confirman a diario que estamos yendo en ese camino.
Inteligencia artificial y machine learning, Internet de las Cosas (IoT) y automatización robótica de procesos (RPA) son algunas de las tecnologías que están generado mayor disrupción en las organizaciones. Y en este contexto tienen mayores oportunidades las empresas inteligentes, aquellas que utilizan las últimas tecnologías como estas para convertir los datos y la información estratégica en decisiones en tiempo real. El impacto es concreto: en Argentina vemos que las early adopters, sin importar su tamaño, están capturando valor en el mercado más rápidamente, lo que les permite mejorar sus márgenes de ganancias y ganar participación de mercado.
Y esto gracias a implementaciones cortas e inversiones acotadas.
La inteligencia artificial simplifica los flujos de trabajo, conduce a pronósticos más exactos y crea nuevos modelos comerciales basados en datos. Además, acelera las decisiones y aumenta la capacidad de la empresa para adaptarse a los cambios del mercado gracias a la información y las predicciones en tiempo real, que van más allá de la capacidad humana. En suma, hace que las empresas sean significativamente más eficientes, aumentando su competitividad.
Ventajas competitivas
De acuerdo con IDC, el 94% de las empresas cree que el aprendizaje automático (machine learning), una de las ramas de la IA, abre importantes ventajas competitivas. Esto se debe a que mejora la productividad y la flexibilidad y crea nuevos activos comerciales, como chatbots inteligentes, que se utilizan en el servicio al cliente. Algunas de las muchas aplicaciones de IA y ML en nuestras soluciones contribuye a, por ejemplo, detectar sesgos en el proceso de contratación y reducir significativamente el tiempo para preseleccionar los mejores candidatos para un puesto o viceversa.
Internet de las Cosas, a su vez, brinda inmejorables posibilidades de optimización y sectores como la logística y la agricultura ya aprovechan sus ventajas. En el primer caso, permite automatizar, controlar y tener la trazabilidad completa de todo el proceso y de todos los productos, desde que se produce, entra a los depósitos hasta que llega a los clientes. En el segundo, ayuda a que los productores mejoren la eficiencia y la productividad y proporciona un mejor sustento a las personas que dependen de sus cultivos y ganado. Las oportunidades se multiplican exponencialmente y abarcan a todas las industrias más allá de las dos mencionadas.
Otra de las tecnologías que está transformando las organizaciones es robótica de procesos, al proporcionar una forma de gestionar los picos de demanda, reducir costos y liberar a los empleados para tareas de mayor valor. De acuerdo con IDC, aunque no es nueva, ha tomado mayor impulso por las vulnerabilidades de los procesos comerciales que expuso la pandemia y la identificó como una de las tecnologías más relevantes para la pospandemia. En este mismo sentido, Grand View Research espera que los ingresos mundiales de RPA crezcan entre un 29% y un 41% entre los próximos cinco a siete años.
Para adaptarnos a la nueva realidad digital y ayudar a nuestros clientes en su viaje para convertirse en empresas inteligentes en SAP adoptamos una mentalidad de nube. Nos transformamos y reinventamos la manera en que trabajan nuestros equipos, conscientes de que la tendencia hacia la nube está ganando impulso continuamente y es esta mentalidad la que determinará los negocios.
En este futuro digital también convergen tecnologías que tendrán un crecimiento exponencial, como blockchain, realidad virtual y aumentada, así como una mayor robotización, entre otras, que modificarán profundamente las organizaciones y los negocios tal y como los conocemos. Aprovecharlas no es una opción, es una necesidad para crecer en la economía digital.
(*) Gerente general de SAP Argentina
Finnegans
Co-evolución digital de las empresas
“Existen tecnologías muy avanzadas y con mucho potencial en la actualidad, como inteligencia artificial y Big Data, entre otras. Además, en Finnegans consideramos que la nube y la movilidad, si bien no son tan recientes, brindan un tremendo impacto en las organizaciones; todavía hay mucho para explotar en ese sentido”, sostiene su CEO Blas Briceño.
Por Carina Martínez
“Volviendo a la inteligencia artificial y/o machine learning, junto con Big Data, tienen muchísimo potencial en lo que respecta a la automatización de procesos. En Finnegans permanentemente buscamos la forma de poner estas tecnologías al servicio de las organizaciones, para simplificar y automatizar la mayor cantidad de procesos. El objetivo es dejar a los humanos el tiempo para dedicarse a las tareas humanas”, asegura Blas Briceño.
–¿De qué manera se puede avanzar en la transformación tecnológica?
–Varias de estas tecnologías llevan cierto tiempo disponibles en soluciones concretas para las empresas. Sin embargo, muchas veces es difícil cambiar procesos o la cultura de una organización, incluso aunque los beneficios sean claramente perceptibles. Creo que el surgimiento de la pandemia de Covid–19 forzó a la adopción de muchas de estas tecnologías, al no dejar alternativas a muchas organizaciones.
Por fortuna, en Finnegans estábamos preparados y no fue muy trabajoso adaptarnos, tanto en la gestión interna como en cuanto a producto. Desde hace tiempo veníamos trabajando en implementaciones remotas o que casi no requieren intervención. Eso se volvió fundamental en momentos en que lo mejor para todos es evitar al máximo la circulación de personas y/o las visitas técnicas.
Al mismo tiempo, para nuestros clientes las ventajas de tener un sistema en la nube se volvieron claramente visibles, y en algunos casos, indispensables. Algo similar ocurrió con la necesidad de poder analizar los datos de gestión en tiempo real para poder tomar decisiones ágiles, lo que es más crítico que nunca.
–¿Cuál es el despliegue de la Argentina en cuando a adopción de tecnologías de vanguardia?
–Depende cómo se lo mire. Comparada con América Latina, Argentina presenta ciertos niveles de adopción de distintas tecnologías relativamente alta. Pero el punto central es que estas tecnologías y las plataformas y soluciones que habilitan se pongan efectivamente al servicio de la empresa; allí reside la transformación digital de la organización. Desde Finnegans impulsamos además el concepto de co-evolución digital, que es plantear la transformación no desde el punto de vista de la organización como entidad aislada, sino dentro de un enfoque de comunidad con su ecosistema, incluyendo clientes, proveedores, clientes internos y otros actores interesados, lo cual beneficia a todos mutuamente. Es allí donde vemos el gran aporte que puede hacer la tecnología.
En este sentido, las barreras son más de tipo cultural, de romper con procesos tradicionales que, a la luz de las nuevas tecnologías, resultan ineficientes.
–¿Cuál es el potencial de la digitalización?
–Creemos que existe mucho potencial aún para la co–evolución digital de las empresas. Una organización puede digitalizarse, pero si sus clientes, socios y proveedores no lo hacen, los beneficios son solo parciales. Si las organizaciones pueden extender su digitalización más allá de sus fronteras e involucrar a su ecosistema, las ganancias en eficiencia serán mayores para todos y podrán dedicar sus recursos a su propósito esencial. Creemos que es de este modo que podemos contribuir a cambiar el mundo a través de la tecnología.
Fortinet
Tecnologías de ciberseguridad en ascenso
El impacto de la pandemia global del Covid–19 en los negocios es aún difícil de predecir en muchos casos. Desde un punto de vista de ciberseguridad, ¿qué tecnologías están siendo las más demandadas?
Por Gonzalo García (*)
Revisemos en detalle dos tendencias que están claramente en ascenso: el acceso remoto y la nube.
Acceso remoto, asegurando a la fuerza de trabajo
Si bien el acceso remoto no es nuevo, me atrevo a asumir que en muy pocos casos ha sido pensado para tener a casi la totalidad de la fuerza laboral dependiendo de esta modalidad en forma simultánea. Es común ver en este momento que los anchos de banda de los enlaces o las capacidades de procesamiento de los concentradores de redes privadas virtuales estén siendo afectados. Las personas responsables de dichos servicios se ven ante la urgencia de hacerlos crecer rápidamente. Entonces el dilema que se presenta es: ¿cómo hacerlo económicamente eficiente? Por suerte es posible utilizar la escalabilidad de la nube y crear un concentrador de acceso remoto como parte de una estrategia de Seguridad como Servicio (SaaS) en la nube. De esta forma, se puede desplegar rápidamente y optar por hacer la inversión en un modelo de gasto de capital o pagar como servicio.
En cuanto a la protección del acceso a la información, hay que pensar la forma de autenticar el acceso y la integridad y comportamiento del dispositivo que se está usando para acceder en forma remota. En esto surgen nuevas tendencias como las redes Zero Trust Access (acceso de confianza cero), que requieren verificar todo y a todos los que acceden a la red corporativa. Además, para robustecer la seguridad de los dispositivos, se está tornando más común incorporar a los tradicionales antivirus, inteligencia artificial para la detección y respuesta de incidentes (EDR, por sus siglas en inglés). Los equipos que gestionan la tecnología deben tener la capacidad de inspeccionar incluso el tráfico cifrado que se produce entre el punto de acceso y las aplicaciones, y la infraestructura a la que se le está dando acceso.
Por último, para terminar la arquitectura de seguridad avanzada de acceso remoto, no solo se necesita pensar en prevenir, sino también en detectar y responder en tiempo real. Para esto, se deben incorporar servicios de inteligencia de amenazas que miren los registros de accesos y actividades en búsqueda de indicadores de compromisos. La inteligencia artificial ya permite incorporar analistas de ciberseguridad virtuales, los cuales pueden revisar lo que está sucediendo en tiempo real para mejorar la toma de decisiones. Terminando la lista, para que todo esto sea accionable, es recomendable incorporar tecnología de orquestación y respuesta que tenga la capacidad de poner en marcha mecanismos de respuesta automatizada ante incidentes.
La nube: agilidad y flexibilidad
Adaptar el modelo de negocio, permanecer relevantes con los servicios y estar próximos a los clientes son algunos de los múltiples problemas que deben resolver las organizaciones hoy más que nunca. Desde el punto de vista de los sistemas de información, el dilema muchas veces se trata nuevamente sobre lo mismo: ¿cómo adaptar la tecnología rápidamente para responder a las necesidades de negocio?, ¿cómo decidir la inversión y que tecnología disponer, sabiendo que es difícil estimar la demanda y el tiempo de vigencia? Bajo todas estas premisas, sin dudas la tecnología de nube es una de las opciones más atractivas, pero ¿cómo se la debe integrar en la estrategia seguridad?
Aquí destaco algunos consejos al pensar en la postura de ciberseguridad para la nube:
Pensar en multi–cloud, no limitarse incluso a utilizar un único proveedor de nube.
Personalizar políticas de seguridad dentro de la organización; no quedarse solo con las del proveedor de nube.
Elegir soluciones de ciberseguridad que permitan incluir servicios de inteligencias de amenazas.
Considerar que todo diseño debe permitir escalabilidad y automatización.
Sin duda, el año 2020 aceleró procesos de adopción y las organizaciones han tenido que evaluar alternativas tecnológicas que antes no habían considerado o lo habían hecho de modo parcial. Hablamos de trabajo remoto y de la posibilidad de aprovechar de mejor forma tecnologías de nube, así como de colaboración y otras innovaciones digitales que favorezcan la interacción segura no solo entre empleados sino también con clientes y proveedores.
(*) Vicepresidente de Fortinet para Sudamérica
Lumen
Más automatizados y veloces
“Son muchas las herramientas que definen el antes y el después de las organizaciones ya que en muy poco tiempo diversas opciones se fueron instalando en este sector. Enunciaré algunas que a mi modo de ver son disruptivas y aún se perfilan como tendencias”, detalla Eugenia Lasta, VP Regional de Planeamiento Estratégico y Transformación de la firma.
Por Carina Martínez
“Por ejemplo, Big Data permitió la gestión de datos para el análisis. De esta manera fue posible aportar en la toma de decisiones acertadas para lograr mejoras evidentes: nuevas oportunidades, ahorros y transformación en todas las áreas de negocios –indica Eugenia Lasta–. La inteligencia artificial es otra de las tecnologías revolucionarias, que ayudó a las compañías a entender y procesar el lenguaje humano para poder optimizar la información. Aunque aún está en desarrollo, actualmente aporta al mantenimiento, escalabilidad y mejora de la estructura empresarial de diferentes industrias. Por su parte,
Edge Computing es fundamental porque descentraliza la información de almacenamiento tradicional para evolucionar hacia la periferia, con lo que se reduce la latencia y mejora los niveles de rendimiento general de las aplicaciones. Permite la aceleración de los procesos, que se traduce en un mejor servicio al cliente para lograr experiencias diferentes.
Por último, los datacenters, ya que, a través de ellos las empresas pueden acceder a las ofertas de plataforma como servicios (PaaS), que entrega una solución completa de infraestructura tecnológica, totalmente administrada y asegurada. Así, pueden concentrar sus inversiones y esfuerzos en el core del negocio, mientras garantizan la seguridad, administración y disponibilidad de su información”, señala la ejecutiva.
Adopción creciente
Como sabemos, la pandemia aceleró la vida digital y llevó a replantear a las empresas a “pagar sus deudas digitales”, en palabras de Eugenia Lasta. “De hecho, casi el 60% de las empresas en la región planea incrementar su gasto total en IT durante 2021, contra casi un 30% que piensa mantenerlo estable. Esto muestra que hay mucho hecho, pero mucho por hacer. La computación en la nube y el modelo “as a service” funcionan como grandes impulsores para acortar la brecha digital. También IDC identificó un crecimiento acelerado en la inversión en cloud, que pasará de US$ 8.400 millones en 2020 a US$ 21.300 millones en 2024, impulsada precisamente por los servicios profesionales y administrados y por los modelos PaaS (plataforma como servicio) e IaaS (infraestructura como servicio). Todos estos elementos son claves para cubrir la deuda digital. Pero en cualquier caso, hemos visto que uno de los grandes frenos para la adopción de la transformación digital ha estado hasta ahora en la cultura de las organizaciones, más que en la tecnología disponible. Ese es el gran desafío”, enfatiza la ejecutiva de Lumen.
Velocidad, la gran diferencia
Tal como sostiene Eugenia Lasta, “la evolución de la tecnología no da tregua” y se vislumbran nuevas herramientas que acelerarán aún más los procesos de las organizaciones. “Por ejemplo, la implementación de la quinta generación de Internet que utilizan las tecnologías móviles: las redes 5G. Para los usuarios, consumidores y organizaciones, significará un salto superlativo en ancho de banda, velocidad de conexión y transmisión de datos, todo prácticamente en tiempo real”, asevera.
“Otro desarrollo que continuará transformando a las compañías es la híper-automatización. Con esta tecnología las empresas podrán alcanzar nuevos niveles de automatización de tareas, agilizando procesos cada vez más complejos para generar ahorros sustanciales. Sumado a esto, se viene el nuevo estándar WiFi 6, con este avance, la velocidad de descarga debería incrementarse al menos tres veces, y permitirá satisfacer las nuevas y más complejas exigencias en IoT y automatización de entornos corporativos”.
Oracle
Avanzar sin pausa
“El último año fue un punto de inflexión. Todos debimos enfrentarnos de golpe a una híper–digitalización tanto en la vida privada como en el ámbito laboral, que puso en evidencia la brecha entre el desarrollo tecnológico y nuestra adopción”, asevera Gonzalo Fernández, Aplications Sales Director de la firma.
Por Carina Martínez
En este contexto, la nube se convirtió en un motor clave para impulsar la innovación.
“Como producto de esto se generó una alianza natural con el sector corporativo y las empresas, por su flexibilidad, escalabilidad y agilidad. Y su importancia para posibilitar y potenciar el trabajo remoto –evalúa Gonzalo Fernández, Aplications Sales Director de Oracle–. Consultoras como IDC postulan que para la etapa post Covid–19, la nube híbrida emerge como la tendencia más importante en América Latina, especialmente en las cargas de trabajo críticas”.
–¿De qué manera las nuevas tecnologías impactan en los negocios y marcan un antes y un después en la gestión?
–La evolución de esta tecnología permite adaptarse al contexto cambiante. En Oracle desarrollamos una nube de segunda generación que brinda nuevas capacidades autónomas, mayor seguridad, ventajas de rendimiento, eficiencia y costo. También, tecnologías como Oracle Autonomous Database incorporan inteligencia artificial al manejo de datos, y dan como resultado una innovación que es capaz de conducirse, repararse y protegerse de forma autónoma.
Implementaciones como esta marcan un antes y un después en el funcionamiento de las compañías, ya que permiten integrar una gran variedad de aplicaciones que manejan de manera ágil y flexible las diversas operaciones de la organización. Y ofrecen a la vez un aumento de la productividad, eficiencia y efectividad.
Tendencias que cobran ritmo
–¿Cómo repercutió en la empresa el desarrollo de estas soluciones y las nuevas demandas de las organizaciones?
–Hoy todos los actores corporativos son conscientes de que, si bien no es fácil, necesitan adoptar estas nuevas tecnologías para rendir al máximo en este contexto tan dinámico. Estas nuevas demandas de los clientes nos sirvieron para seguir aprendiendo y mejorando, brindando servicios cada vez más personalizados y customizados, adaptados a las necesidades que surgían en cada caso y customizando los procesos. Así, quienes se vieron en la necesidad de reducir gastos o volver más eficientes determinados procesos, se decidieron por ciertas aplicaciones con foco en el backoffice de la organización. Otros apuntaron a potenciar sus servicios de atención al cliente, marketing o ventas, y eligieron soluciones diseñadas para mejorar la experiencia de los clientes.
Podemos decir que luego de 2020, la mayoría de las compañías estamos disfrutando de los beneficios de la automatización, entendiendo que es fundamental incorporar hábitos y conductas diferentes para continuar enfrentando los desafíos de escenarios que ofrecen poca previsión. La llamada nueva normalidad no es más que un presente exponencial en constante movimiento y aceleración: la clave está en no detenernos y continuar transformándonos.
–¿Cuáles son las principales barreras a esta necesaria transformación en la Argentina?
–Los procesos que implican grandes cambios siempre representan un desafío, sobre todo porque no nos adaptamos tan rápido como lo hace la tecnología. Esta es la principal barrera. En este periodo nos tocó acompañar a varias compañías, ayudándolas –a veces en tiempo récord– a transformarse para brindar una rápida respuesta a las demandas que se les presentaban, ya sea por necesidades de los usuarios o cuestiones establecidas por el contexto (como nuevas regulaciones). Por supuesto, quienes ya venían trabajando en este camino se encontraron mucho más preparados y pudieron sumar valor a su propuesta, pero todas las organizaciones se vieron empujadas a tomar decisiones y reinventarse.
Como trabajamos hace más de 30 años en el país, sabemos que una de las barreras de acceso pueden ser los contratos en monedas extranjeras. Por eso, en Oracle realizamos nuestras cotizaciones en moneda local a fin de aportarles una ventaja competitiva a nuestros aliados. Además, decidimos establecer plazos contractuales de tres años para brindar previsibilidad y una verdadera dimensión de los cambios que se pueden efectuar.
–¿Hacia dónde considera que se encaminan las tecnologías del futuro?
–Hoy la inteligencia artificial, Internet de las Cosas y soluciones como los chatbots o blockchain ya son “mainstream”, con el 84% de las organizaciones utilizando al menos una de estas cuatro tecnologías. Además, según un estudio que realizamos en conjunto con Enterprise Strategy Group el año pasado, el 82% de las compañías que utilizan tres o más tecnologías emergentes están por delante de sus competidores, en comparación con solo el 45% que no utiliza ninguna.
Sin duda la nube continuará creciendo exponencialmente. Desde Oracle creemos que la innovación continuará por la autonomía y el autoaprendizaje de esta y otras tecnologías, y apostamos en ese camino.
Sumado a esto, otra tecnología que está creciendo a pasos agigantados es Internet de las Cosas, que nos permite obtener datos de casi cualquier objeto y así acceder a más información que nunca sobre el mundo que nos rodea. Este contexto se presenta como una oportunidad para generar, por ejemplo, ciudades más inteligentes. Según un estudio que patrocinamos, las ciudades están apostando especialmente por la nube y la IA. Así es que el 66% está invirtiendo en IA y el 80% lo hará en los próximos tres años, principalmente en el área de asistentes digitales y chatbots.
Hexagon Consulting
Del imperativo tecnológico a la transformación del negocio
A comienzos del siglo, la tecnología y el negocio buscaban todavía un punto donde converger. El esfuerzo era tal que, a duras penas, se lograba pasar de la contabilidad y la digitalización de documentos; temas que aún hoy siguen pendientes en muchas organizaciones.
Por Carolina Riemann (*)
Sin embargo, en los últimos años –y más aún en el marco de la situación que venimos viviendo desde hace 18 meses– hoy es imposible pensar en el desarrollo de negocios sin que la tecnología esté involucrada, al punto que para muchos usuarios la tecnología se ha vuelto prácticamente un elemento natural de su día a día de trabajo.
Las tecnologías que más han impactado son las que han permitido modificar la forma de hacer las cosas, las que nos liberan de tiempo, nos ayudan a ganar o generar nuevos negocios o que reducen significativamente el riesgo operativo. Uno de los cambios revolucionarios ha sido el despliegue de la nube y la capacidad de potenciar el alcance de los sistemas existentes en las organizaciones a partir de las plataformas, que además brindan mayor flexibilidad y capacidad de adaptación. En este sentido, sería muy difícil pensar en sistemas de información que viajan a través de la nube y que logran un buen funcionamiento sin una capacidad real de administrar un enorme volumen de datos en pocos segundos. Esto, claro, ya existía; pero hoy puede aprovecharse mucho más.
Las transacciones de las apps de delivery, las compras en plataformas de e-commerce y las plataformas de video on demand serían imposibles sin estos recursos que han cambiado para siempre la forma de hacer negocios.
Casos de éxito
En Argentina, existen muy buenos ejemplos de esta transformación de los negocios en los que la tecnología es el corazón de su funcionamiento. En 2020 vimos nacer a Ank, una fintech que implementó de modo completamente remoto su sistema de gestión SAP en un puñado de semanas, algo que en otro momento hubiera sido impensado para una entidad financiera. También vimos cómo compañías de seguros y bancos comenzaron a gestionar la relación con sus clientes desde otra perspectiva, apoyando la labor comercial en los datos que estaban en sus propias bases y convirtiendo cada caso en una oportunidad real para desarrollar un producto a la medida del cliente, en el cual éste estuviera dispuesto a invertir.
Casos como estos han demostrado que la tecnología para lograr la transformación de las organizaciones está lo suficientemente madura como para conseguir más avances en materia de innovación y que el próximo paso tiene más que ver con la toma de decisiones.
En cualquier caso, la tecnología continuará dando saltos importantes. Analistas del mercado prevén, para los próximos dos año, un avance importante de las herramientas de inteligencia artificial, machine learning en una versión más adaptativa y mayores niveles de adopción de Edge Computing y de Internet de las cosas, todos elementos que se potenciarán aún más con la masificación del 5G, que se encuentra ya a la vuelta de la esquina.
En este sentido, la tecnología parece no reconocer límites y ha pasado de ser un imperativo, a ser una plataforma para el verdadero cambio del negocio; una transformación que comienza más por nosotros mismos y nuestra forma de pensar la innovación que por las herramientas disponibles. Este futuro es posible, y depende más de nosotros que de la tecnología.
(*) Directora Comercial de Hexagon Consulting
Citrix
IA y nuevos liderazgos
“En 2020, la urgencia por migrar a la nube nos adentró en un nuevo orden de trabajo, para el cual las empresas tuvieron que implementar nuevas tecnologías disruptivas, empezando por los espacios de trabajo digitales”, indica Hugo Giampietri, Principal Corporate Account Manager de la compañía.
Por Carina Martínez
“El concepto de espacio de trabajo digital no se trata de una tecnología simple, sino de un organismo que se nutre de información constante para ofrecer alternativas variadas según las necesidades del usuario –explica Hugo Giampietri–. En esto la inteligencia artificial (IA) y el machine learning (ML) son puntos de quiebre que aceleran los procesos en tiempo real”.
En este sentido, el ejecutivo cita el reporte global para Citrix, Work 2035, que revela que un 77% de líderes de negocios consideran que la IA acelerará sus procesos de decisión y los hará más productivos en el futuro y un 90% cree que para en 2035 esta tecnología será el driver central para el crecimiento de su organización. “Mediante inteligencia artificial y machine learning, las compañías tienen la capacidad de comprender cómo trabaja cada empleado y conocer sus inquietudes, para ayudarlos y guiarlos de forma inteligente a las aplicaciones, datos y herramientas que utilizan a diario. De esta manera, la tecnología funciona como un habilitador, poniendo foco en la flexibilidad que hoy resulta preponderante para los talentos, acelerando de forma notable los procesos y minimizando el margen de error”, asegura Giampietri.
Nuevos desafíos
“En Citrix estábamos acostumbrados a tener la libertad de elegir desde dónde trabajar cada día, sumado a la flexibilidad de balancear nuestras responsabilidades laborales y nuestra vida personal. Sin embargo, esa libertad en 2020 significó todo un reto y nos hizo valorar aún más el poder de la movilidad segura y ágil en la experiencia de trabajo –destaca el ejecutivo de Citrix–. Aun así, no todos los colaboradores estaban acostumbrados a tener la posibilidad de trabajar de manera remota. Ante estas necesidades, les entregamos a las empresas nuestro espacio de trabajo Citrix Workspace, que incluye inteligencia y flujos de trabajo personalizados, garantizando a los empleados que verán lo que necesiten justo cuando lo necesiten y permitiendo acceder a información más deprisa”.
Por supuesto, este contexto llevó al extremo la problemática de la seguridad informática. Respecto de esto, Giampietri indica que, en 2020, las empresas invirtieron en soluciones que refuerzan su estrategia de ciberseguridad, pero los ataques se volvieron más dirigidos. “Por ello, la clave es que los departamentos de TI se planteen una estrategia de seguridad que proteja en su totalidad al espacio de trabajo digital del colaborador, desde dos enfoques de seguridad que llamamos Zero Trust y SASE”.
La situación local
Respecto del grado de avance de la digitalización en la Argentina, Giampietri considera que las empresas tuvieron que reinventarse para permanecer en el mercado; repensaron su modelo de negocio y hasta transformaron sus servicios.
“Sin embargo, no todas las compañías cuentan con los recursos necesarios para dar ese salto a la transformación digital. Frente a esta situación, para continuar en el mercado es indispensable la inversión en nuevas soluciones a largo plazo, que les garantice también un modelo de trabajo factible para la nueva realidad”. Y agrega que tener la capacidad de adaptación también es determinante. “Es crucial que los directivos de Recursos Humanos y Tecnología trabajen en medidas y tomen las decisiones en conjunto, siempre pensando en la experiencia de los empleados como prioridad para el nuevo orden laboral”, sostiene.
Modelos híbridos y nuevos liderazgos
Como tendencias a futuro, el Giampietri señala que, en este contexto, “el nuevo paradigma de oficina híbrida llama a las compañías a la acción para implementar nuevas tecnologías de gestión que permitan la flexibilidad que los empleados necesitan para trabajar desde casa y que también los haga sentir empoderados”. Y cita un estudio propio realizado en 2021 en Argentina, que reveló que un 66% de los argentinos le gustaría tener un modelo híbrido en el que pueda optar cada día por trabajar a distancia o en la oficina.
“Siguiendo esta línea –refuerza Giampietri–, estamos convencidos de que la inteligencia artificial ocupará un lugar central para los futuros modelos. Según Work 2035, el 57% cree que la IA tomará la mayoría de las decisiones de negocio y es posible que elimine la necesidad de contar con equipos senior de gestión. El liderazgo se tornará diferente y la productividad recibirá un fuerte impulso de asistentes digitales para hacer su labor, ayudando a los empleados a priorizar las tareas y el tiempo, mejorando su compromiso y preservando su bienestar físico y mental”.
Espacios digitales
“En la medida en la que migramos a un mundo cada vez más digital, mantener las prioridades y apaciguar el ruido digital puede ser un desafío –menciona Hugo Giampietri–. Desde Citrix entendemos esa necesidad, por lo que nuestro espacio de trabajo digital incluye tecnología que se adapta a las necesidades de los empleados, y los guía para que su experiencia de trabajo sea la mejor posible, automatizando tareas rutinarias, y entendiendo el comportamiento del colaborador en función de sus responsabilidades. Nuestra apuesta de innovación va en esa dirección, con la misión de acercar la mejor experiencia de trabajo a los colaboradores, manteniendo la información segura, y preparándolos para el futuro”.
IBM
La nube híbrida es la clave
“En este último año, vimos un escenario de híper digitalización con empresas que tuvieron que acelerar el uso generalizado de la tecnología en los procesos empresariales”, explica Alejandro Pelloni, Technology Leader de la compañía.
Por Carina Martínez
“Hoy vemos que las organizaciones están centradas en mejorar la experiencia del cliente con inteligencia artificial, así como acelerar la agilidad y eficiencia de sus negocios con la nube –refuerza Alejandro Pelloni–. La pandemia también ha acelerado la transformación digital de las empresas, lo que veríamos pasar en cinco o seis años debería suceder en aproximadamente dos. El CEO Study 2021 de IBM Institute for Business Value (IBV), en el cual se entrevistaron a CEOs de América Latina, incluidos de Argentina, reveló que la infraestructura tecnológica (44%), la gestión de la fuerza laboral ‘en cualquier lugar’ (38%), los riesgos cibernéticos y la regulación (37%) son los principales elementos que pueden representar los mayores desafíos para sus organizaciones en los próximos dos o tres años”.
–¿Cuáles son las áreas de negocios y soluciones que se consolidan a partir de las nuevas tecnologías disponibles?
–Desde IBM estamos comprometidos con un enfoque de nube híbrida y plataforma de IA porque es lo que nuestros clientes requieren. Nuestro enfoque de plataforma se adapta a las necesidades de los clientes independientemente de donde se encuentren en su viaje hacia la nube. Vemos la nube híbrida como una oportunidad de 1 billón de dólares. Solo el 25% de las cargas de trabajo de misión crítica se trasladaron a la nube pública. Para IBM es importante sumar talento que pueda incorporar rápidamente nuevas habilidades necesarias para llevar adelante los trabajos llamados “del futuro” que hoy se hacen realidad.
–¿Está avanzada la Argentina en la adopción de las nuevas soluciones?
Uno de los mejores indicadores de progreso es el ritmo de consumo de los clientes. La tecnología de agente virtual con IA de IBM, Watson Assistant ha sido utilizada cada vez más por organizaciones de toda América Latina y duplicó su uso en 2020 en la región. El sector de tecnología tiene una muy buena oportunidad de crecimiento dada la aceleración de la transformación digital que se produjo en todos lados por efecto y necesidad de la pandemia.
–¿Cuáles son los principales focos a tener en cuenta en el proceso de transformación digital?
–IBM se ha transformado para acelerar la digitalización de las empresas, lo que lleva a la diferenciación con la IA, la agilidad y la seguridad a través de la nube híbrida, que ayuda a las empresas a emerger más fuertes con capacidades únicas de confianza, talento y tecnología.
Confianza: la privacidad de los datos, la seguridad y las asociaciones de confianza son esenciales. Las empresas deben tener confianza en que sus datos son sus datos y sus conocimientos son sus conocimientos, y no serán utilizados o accedidos sin autorización.
Talento: algo que está transformando los empleos es la automatización. IBM está bien posicionada con tecnologías de automatización para satisfacer las necesidades que los profesionales de TI están identificando. La diversidad y la inclusión también son factores fundamentales que forman parte de la cultura de IBM y nunca han sido más importantes que en 2020. Nuestros esfuerzos en relación con el talento también incluyen el compromiso con la educación y la democratización de la tecnología.
Tecnología: realineamos nuestro portafolio para ayudar a los clientes a ganar agilidad, flexibilidad y eficiencia en sus capacidades de TI para superar la incertidumbre del mercado actual. OpenShift es la plataforma líder de nube híbrida con más de 3.000 clientes en el mundo. Nuestros software de cloud e IA automatizan, modernizan, aseguran y predicen. Por otro lado, IBM Research mantiene nuestra tecnología de vanguardia. En 2020, invertimos aproximadamente el 9% de los ingresos totales en I+D, y por 28º año consecutivo, IBM fue reconocida como la empresa número 1 con la mayor cantidad de patentes emitidas en EE.UU.
BGH Tech Partner
Imperativo estratégico
Nuestra propuesta de valor consiste en entender las necesidades puntuales de los clientes, para asesorarlos en cómo maximizar las oportunidades que brinda la transformación digital.
Por Marcelo Girotti (*)
El surgimiento de nuevos desarrollos y la necesidad de las organizaciones de adoptarlos a través de una propuesta world class dieron origen a nuestra compañía en 2003. En BGH Tech Partner, nos especializamos en infraestructura y telecomunicaciones, y representamos a marcas como Cisco, Huawei, Motorola, Oracle, SAP, AWS y Google, entre otros. Desde el origen, estamos atentos a las tendencias que surjan para acompañar los nuevos desafíos de las organizaciones que confían en nosotros.
Avanzar en un proceso de transformación digital no es elegir una tecnología e implementarla. La transformación digital tampoco es un set de proyectos de IT. Transformar digitalmente un negocio es cambiar la forma en que se desarrollan los mismos, a partir de las nuevas necesidades de los clientes de las empresas, que son cada vez más “digitales” en sus modalidades de consumo.
Se trata de diseñar nuevos modelos de negocio, de contar con la cultura adecuada, de centrarse en el cliente y anticiparse a los cambios del mercado.
En ese sentido, la transformación digital se convierte en un imperativo estratégico hoy de todas las empresas, por eso es fundamental entender que siempre hay que elegir a un proveedor experimentado, que escuche, asesore, diagnostique, implemente y acompañe a la organización.
Hay que considerar también que las tecnologías no son “estancas” sino que se entrecruzan e interrelacionan. Por ejemplo, un informe reciente señala que se espera que el tamaño del mercado global de seguridad de Internet de las cosas (IoT) crezca de US$ 12.500 millones en 2020 a US$ 36.600 millones en 2025, a una tasa de crecimiento anual compuesta (CAGR) del 23,9%.
Desarrollos que marcan tendencia
Las tecnologías más disruptivas o claves de los últimos años se vinculan a inteligencia artificial y analítica de datos; cloud computing; Internet de las cosas y, unido a esto, la ciberseguridad.
En cuanto a los próximos desarrollos, si bien hace tiempo que se viene anticipando la explosión de 5G, la incorporación de esta tecnología móvil, de baja latencia y gran ancho de banda, ofrece grandes posibilidades de nuevos servicios y aplicaciones.
Otra tecnología que acelerará la transformación digital será edge computing, que lleva el poder de cómputos, la red y parte del almacenamiento a la fuente de datos (por ejemplo, a los dispositivos IoT). Esto permite reducir significativamente el tiempo de viaje y la latencia, habilita tiempos de respuesta más veloces y disminuye los volúmenes de datos que deben transferirse.
Además, cloud computing, con la posibilidad de manejar “data lakes” de gigantes volúmenes de información, permitirá usar los datos que se generen de aplicaciones transaccionales y provenientes de diversos dispositivos, para ajustar las estrategias digitales de las empresas.
La transformación como recorrido
No podemos hablar en términos generales acerca de cómo están las organizaciones de la Argentina respecto a su proceso de adopción de tecnología y de transformación digital porque la situación es muy diferente en cuanto a industrias y también dentro de cada sector. Hay empresas en que su modelo de negocios se ha transformado fuertemente (por ejemplo, entretenimiento e información) y otras que vienen cambiando sostenidamente sus procesos y go to market (como ventas, retail, banca).
Pero, independientemente del sector, las organizaciones han entendido que la transformación digital de los negocios es una necesidad para sobrevivir en el mundo que viene: no hay modelo de negocio actual que no incluya tecnología aplicada.
En cuanto a las principales barreras para avanzar en el proceso, en Argentina contamos con tecnología de punta y talentos que son buscados en todo el mundo. Por todo esto, quizás esté en comprender que la transformación toma su tiempo y debe incluir la cuestión cultural. En BGH Tech Partner, ayudamos a las empresas a conceptualizar un nuevo modelo de negocios, no solo impactando en tecnología sino también buscando un cambio de procesos y cultura de la organización.
(*) CEO de Grupo BGH y director ejecutivo de BGH Tech Partner
Globant
Siete claves para lograr cambios
Nos encontramos en un momento muy particular: el cambio siempre ha existido, pero está avanzando a una velocidad nunca antes vista. Y esto es tan solo el comienzo.
Por Adriana Sclar (*)
Algunos especialistas predicen que la humanidad cambiará más en los próximos 20 años de lo que lo hizo en los últimos 30. La velocidad con la que se están dando los cambios hace imprescindible que creemos las condiciones propicias para que nuestras organizaciones sigan siendo capaces de adaptarse, poniéndonos en “modo de aprendizaje beta continuo”.
Cuando se da inicio a un cambio, de cualquier tipo (cultural, tecnológico o de negocio) dentro de una organización, necesitamos tener en cuenta que las “organizaciones” por sí solas no cambian; cambian las personas. Es por eso que, a la hora de afrontar este proceso, debemos poner a las personas como prioridad, en el centro de nuestra estrategia para que nos ayuden a alcanzar la organización deseada.
“No puedes construir una organización capaz de adaptarse sin personas capaces de adaptarse, y las personas solo cambian cuando deben o quieren hacerlo”, sostenía Gary Hamel, fundador de Strategos y consultor reconocido mundialmente. Es por esto que no importa qué rol cumpla la persona en la organización; para que exista una transformación real, cada uno debe convertirse en un líder del cambio, y saber que esto será un proceso que lo transformará no solo como profesional sino también como persona.
A modo de resumen, estas son las siete claves que pueden ayudar a alcanzar cambios en el futuro:
- Desarrollar un plan “Un objetivo sin un plan es solo un sueño” – Antoine de Saint–Exupéry.
El cambio es para los soñadores, pero lograr un cambio efectivo es para los valientes.
Es necesario hacer un plan y animarse a dar el salto antes que otros lo hagan por uno.
- Escuchar, preguntar, aprender y volver a aprender.
Las nuevas respuestas surgen de las buenas preguntas. Un cambio profundo requiere gente curiosa e interesada en descubrir nuevas formas de hacer las cosas.
- La tecnología no es tan solo “algo técnico”.
La tecnología es esencial para conocer información crucial y acelerar el cambio. Permitirá que las decisiones basadas en datos sean más acertadas, y ayudará a ganar velocidad para que otros comprendan mejor y apoyen las iniciativas de cambio.
- Conectar con las personas.
A todos nos mueve nuestro propósito. Debemos descubrir qué motiva a las personas a impulsar el cambio y crear una conexión. Involucrarlos, hacerlos parte, darles visibilidad y no olvidarse de celebrar con ellos los pequeños hitos y logros a lo largo del proceso; eso hará que se mantengan motivados y comprometidos.
- Métricas, métricas, métricas.
Tal como indicó Peter Drucker, “lo que no se puede medir, no se puede gestionar”. No debe subestimarse la importancia de los datos. Además, como escribió Jeff Bezos, “la mayoría de las decisiones probablemente deberían tomarse con un 70% de la información que nos gustaría tener. Si se espera a tener el 90%, seguramente se estará avanzando muy lento. Es fundamental comenzar a medir desde el comienzo, para que luego se pueda ir comparando y haciendo correcciones a lo largo del camino y ver resultados tangibles al final. Debe recordarse que un proceso de transformación no se da de la noche a la mañana y lo único que va más rápido que la tecnología es las expectativas de nuestros consumidores.
- Be Kind (Ser Amable)
Para que a la gente le importe, es necesario cuidar de ellos, y ellos se ocuparán del cambio. Es clave promover la importancia de ser amable no solo con los demás, con nuestros compañeros sino también con nosotros mismos y con el planeta.
- Visibilizar el cambio.
Si no se puede ver, no existe. Es necesario pensar en una estrategia para hacer visibles los cambios invisibles; convertir al cambio en algo tangible –con base en métricas–, celebrar los éxitos, hacer retrospectivas que ayuden a aprender y reaprender constantemente.
Por último, evolucionar y adaptarse a esta nueva era es inevitable y, más aún, es posible y recomendable. Con esto en mente, podemos elegir cómo transitamos el cambio y qué lugar ocupamos y es clave que estemos listos para pensar.
(*) Cultural Hacking Studio Partner de Globant