La Generación Z domina ya el mundo post digital

    Se trata de un grupo con valores, preferencias y conductas propias, con actitudes hacia la tecnología, las finanzas y el gasto netamente diferente de las de las generaciones previas.
    Cualquier minorista, fabricante o proveedor de servicios que esté pensando en reutilizar las estrategias de marketing que desarrolló anteriormente para los Millennials, deberá pensar dos veces antes de hacerlo. Para llegar a ellos deberán hacer algo más que reformular ligeramente sus estrategias de marketing.

    Son mega “influencers”
    Algunos de ellos pueden no tener más de 9 años, pero ya tienen un enorme poder adquisitivo. En Estados Unidos, la Generación Z tiene en la actualidad US$ 200.000 millones en poder adquisitivo directo pero US$ 1 billón en poder adquisitivo indirecto por su influencia en el gasto familiar. Sus avanzados conocimientos digitales y su habilidad para evaluar factores como precio y disponibilidad desde temprana edad los convierte en un grupo muy influyente en las decisiones del gasto familiar.
    Son grandes consumidores. Para el año 2020, serán el más grande grupo de consumidores en todo el planeta. Representarán 40% de los consumidores en Estados Unidos, Europa y los países BRIC y 10% en el resto del mundo, según Booz Co. Las empresas que no sepan enganchar bien con ellos podrían perder rápidamente participación en sus mercados.
    No son mini-millennials; son diferentes. Se diferencian de los Millennials en cuatro actitudes fundamentales que tienen consecuencias directas para las estrategias de marketing en el mundo post digital.
    Para tener buena llegada con esta generación, las empresas deben entender los atributos que los hacen diferentes. Booz Co. identifica cuatro formas en las que se diferencian de sus predecesores.
    1. Conectados desde que nacieron
    Si los millennials fueron pioneros digitales, los de la Generación Z son los verdaderos nativos digitales; no conocieron ni un momento sin tecnología en la punta de los dedos. Esto les generaría la expectativa de contar con conectividad permanente y a pedido, algu que lass compañías deberán proveer.
    2. Totalmente enfocados. Son los niños más atendidos que nunca por las actividades de marketing. Por eso su corto tiempo de atención no debe ser visto como una incapacidad de concentración sino como un filtro desarrollado para ayudarlos a encontrar contenido relevante más rápidamente y con más precisión que cualquiera otra generación anterior.
    3. Económicamente conservadores… Pueden ser ávidos consumidores. Pero la crisis financiera global de 2008, la experiencia de ver a sus hermanos mayores lucando para encontrar trabajo y una sensación general de inestabilidad general están gestando un renovado foco en la resiliencia personal, el conservadurismo financiero y el trabajo duro. Las oportunidades que aparecen online están pueden desatar todo su potencial de trabajo.
    4… pero activistas sociales. Están en conocimiento de los asuntos internacionales desde edad muy temprana gracias al ciclo de noticias de 24 horas que implacablemente llena de información a las familias. También gozan de acceso a los viajes, a la cultura y a las ideas que no tiene precedentes, algo que hace que valoren mucho la diversidad en todas sus formas.
    Por eso, están dispuestos a usar su voz colectiva y su poder de compra para defender las marcas que reflejen sus valores y cuestionen a los que no lo hagan. 60% de toda la generación apoyan a las marcas que asumen una posición sobre los temas de igualdad de derechos, orientación sexual y raza.
    Por todo esto las marcas y las empresas deben actuar con velocidad para estar listas para atender a la Generación Z cuando este grupo alcance el dominio consumidor a principios de la década del 2020.
    Pero las empresas también necesitan tomarse el tiempo para entender las idiosincracias de este grupo: los Z tienen la atención ultra corta, pero tienen avidez de contenido auténtico; no creen en las instituciones financieras y, sin embargo, desean ahorrar y tener independencia financiera; viven inmersos en las redes sociales pero también quieren tener un impacto positivo en el mundo real.
    El momento de sintonizar con ellos es ahora. Solo aquellas empresas que genuinamente entiendan las conductas diferente, los valores y las prioridades de la Generación Z tendrán alguna chance de triunfar con ellos.