Los lectores de Mercado están familiarizados con el tema. Son diversos los ángulos de mira para abordarlo. Para algunos, en un sentido estricto, se trata de llevar al mercado algo nuevo a un precio adecuado. Puede ser un proceso, un producto, un servicio. Pero lo esencial –desde esta óptica– es la introducción en el mercado. Una idea diferente de la que prevalece en el ámbito académico.
Para otros especialistas, innovación se identifica casi exclusivamente con cambios tecnológicos, soslayando que su significado es mucho más amplio. Aunque sin duda muchos de los ejemplos disponibles surgen de la tecnología.
La investigación que desarrolla Mercado en esta edición –con el respaldo y la activa participación de la consultora Olivia– es muy diferente. El foco está puesto en lo que significa la innovación en el proceso de gestionar la empresa, y además en conocer las expectativas del cliente.
La encuesta, especialmente concebida para este propósito, es reveladora en sus resultados –como se advierte a partir de la página 26– y crea un nuevo ámbito propicio para indagar en una nueva generación de ideas y en experiencias concretas.
Lo original de la encuesta que sirvió de base a esta investigación es que quienes respondieron precisaron, por ejemplo, si en la empresa en la que actúan hay un área dedicada a gestionar la innovación empresarial; cuál es el nivel de madurez que existe en ella sobre la innovación; si la estrategia está alineada con el plan de negocios; y se consideran las necesidades de los clientes.
El mundo está signado por la velocidad de los cambios; tecnológicos, productivos, sociales, comunicacionales, en la relación entre las personas; cambios también en las ideas, las idiosincrasias, las expectativas. Saber adaptarse a los nuevos procesos y vínculos, pero también ver más allá de lo nuevo, adelantarse y marcar camino, parece ser claves para las compañías que pretendan avanzar y crecer en el futuro. La innovación se convierte, así, en un intangible valiosísimo. Indispensable.
Los temas centrales
La agenda cambió de modo decisivo. Son todos nuevos los grandes temas que hoy ocupan la agenda de los empresarios. Si Peter Drucker estuviera vivo, estaría –al menos– estupefacto. Sólidas ideas y teorías en torno a la estrategia y el liderazgo, que eran la principal corriente de pensamiento hace 20 o 30 años, se han esfumado o quedaron condenados a antiguos libros de texto.
Hoy la tensión pasa por la digitalización de la empresa; la sustentabilidad; la automatización, robotización y futuro del empleo; la ecología y las “empresas verdes”, la diversidad de género e inclusión; la transparencia y ética en las empresas, como los temas más relevantes.
Este informe en profundidad se ofrece a partir de la página 90, en partnership con la consultora EY.
Además, como todos los años para esta época, Mercado realiza un dossier tradicional sobre las universidades que prefieren las empresas a la hora de contratar profesionales y personal altamente calificado (que se despliega a partir de la página 68).
El sondeo de opinión entre empresarios abarca no solo cuál es la universidad favorita. También de que universidad egresó el buscador de talento, y además, desde su experiencia, en qué universidad le gustaría cursar hoy.
Pero además, las universidades, ¿están dando el conocimiento que se necesitará en cinco años más? ¿O siguen atadas a programas y materias que han quedado obsoletas?
Finalmente, se incluye también en esta edición un ensayo sobre cómo la tecnología termina siendo un arma contra la democracia.
Para comprender cómo fue que las tecnologías digitales dejaron de ser instrumentos para difundir la democracia, para convertirse en armas para atacarla, hay que mirar más allá de las tecnologías mismas. Cómo se combinan la dinámica social, la ubicua conectividad digital y los modelos de negocios de las gigantes tecnológicas.
En Alta Gerencia, con el título de “Clima tóxico para la mujer ejecutiva” (página 78) se narra cómo Indra Nooyi, CEO de PepsiCo y una de las mujeres más prominentes en el ranking Fortune 500, anunció en agosto que se retira en octubre. ¿Por qué lo hace en el mejor momento de su carrera? ¿Por qué se va si el directorio no se lo pide? ¿Por qué han hecho lo mismo otras cinco mujeres triunfadoras en el ámbito empresarial?
Los problemas de la inequidad de género son tan endémicos en los peldaños más altos de la escalera corporativa como en cualquier otra parte de la sociedad. Las mujeres constituyen 5% de los CEO de las principales corporaciones; en promedio, se les paga menos que a sus colegas hombres; sus comentarios suelen ser analizados con lupa y muchas veces magnificados fuera de toda proporción. Todo eso, junto, hace que la complicada tarea de manejar una compañía sea todavía más difícil.