Por Carina Martínez

Si bien no existe aún reglamentación alguna que obligue a las compañías a dar cuenta de su accionar en sustentabilidad y RSE, la práctica del reporte viene extendiéndose a través de los años. Consultados sobre los beneficios de reportar, los ejecutivos coinciden en que aporta notablemente a la transparencia en la gestión y el consecuente vínculo positivo con los stakeholders, pero también a la misma puesta en práctica interna, entre los colaboradores.
Reportar implica medir, evaluar, poner blanco sobre negro. Requiere recabar datos de diferentes áreas que componen la organización –que no siempre logran un diálogo fluido–, ponerse objetivos, dar cuenta de su cumplimiento.
La relevancia que la práctica fue adquiriendo a lo largo de los años llevó a Mercado a, en 2011, encargar un proceso que incluye la evaluación de los reportes por parte expertos en la materia y que resulta en la selección de los 10 más destacados, sin orden de jerarquía (puesto que no es un ranking). Como consecuencia, de alguna manera, se contribuye a la divulgación de esta acción fundamental para transparentar la gestión de las compañías y, además, brindar algunas herramientas para mejorar su puesta en práctica.
Gran parte de los reportes se basa en los indicadores de Global Reporting Initiative (GRI) institución que creó un estándar global de lineamientos para la elaboración de memorias de sostenibilidad de las empresas que deciden evaluar su triple desempeño: económico, ambiental y social.
El equipo evaluador
Como en las ediciones anteriores, la evaluación estuvo a cargo de profesionales con amplia experiencia en el tema, independientes, libres de compromiso, y con una sólida formación. Ellas son:
Cristina López. Es contadora pública (UBA), experta en Responsabilidad Social, auditora social y coach organizacional.
Es presidente de Fundación El Otro, co-secretaria del Comité Estratégico de Responsabilidad Social, secretaria del Subcomité de Compras Sostenibles del IRAM y miembro del PPO-Post Public Organization de la ISO 26000:2010.
Entre otros aportes ha sido la coordinadora para Iberoamérica del Proyecto Oxfam Novib de incidencia en el desarrollo de la responsabilidad social en Iberoamérica, ejecutado dentro del marco de la Red Puentes Internacional.
En 2008 fue nominada por varias ONG de la Argentina como su experta ante el Comité Espejo durante el proceso de elaboración de la Guía ISO 26000:2010. Desde entonces ha representado al sector-país en todos los plenarios internacionales. Entre otras instancias de representación sectorial ha participado en el proceso de revisión de las Guías Directrices de la OCDE para EMN en el Comité de Inversión en Paris 2010 y en diferentes procesos de consulta: ONU-John Ruggie, Accountability, GRI, Banco Mundial, BID y Foros de la ONU sobre Derechos Humanos y Empresas.
Desde 2012 realiza asesoramiento técnico en el Ministerio de Trabajo de la Nación en el área de RS y Trabajo Decente, y es co-autora del Sistema de Gestión de la Calidad Ocupacional.
En el ámbito académico, ha sido docente fundacional del Master en Coaching Organizacional de la USAL, del programa de formación en RS y Sostenibilidad de la UTDT, de la Cátedra Abierta de Responsabilidad Social de la Universidad Nacional de La Plata, ha integrado la Red de Apoyo del IAE para desarrollo de emprendedores como mentor y juez de la Competencia Naves y actualmente en la Coordinadora del Centro de Estudios Internacionales perteneciente al Observatorio de Responsabilidad Social, Desarrollo Sustentable y Calidad de Vida de la UNLZ.
Adriana Rosenfeld. Es computadora científica (UBA) y Licenciada en Información Ambiental (UNL). Es auditora ambiental (certificada), experta en 26000:2010, con certificado de IRAM y Formadora de Formadores en RSE (certificada). En la Universidad de Luján es profesora adjunta del Departamento de Ciencias Sociales, coordinadora de la Licenciatura en Información Ambiental e integra equipos interdisciplinarios de investigación, extensión y vinculación tecnológica. Formó parte del desarrollo de la ISO 26000:2010, guía de RS, como integrante del Comité Espejo Argentino y representante de la UNLu. Integra el grupo internacional encargado de velar por el uso correcto la ISO 26000:2010, co-lidera el grupo específico para la Comisión Panamericana de Normas Técnicas y está a cargo de la coordinación a escalas internacional, regional y nacional en materia de RSE, para IRAM.
Comentarios de las expertas: una mirada global
Todos los reportes recibidos han sido analizados en función de: a) los criterios de evaluación que se muestran en tabla y b) de las características de la información en el marco de los principios de determinación de contenido y calidad de la memoria globalmente reconocidos.
De los reportes preseleccionados en base al cumplimiento de los criterios establecidos en tabla, las evaluadoras han destacado cuatro que superaron las expectativas y merecen un reconocimiento especial al compromiso asumido en relación a la rendición de cuentas de la información no financiera. Las empresas más audaces que han elegido reportar según los requisitos de la opción exhaustiva del GRI G4 son: Banco Galicia, Carrefour, Sancor Seguros y Tarjeta Naranja.
Otros datos destacados por las expertas son que, como resultado del análisis se han observado muchos casos en los cuales la información reportada no ha seguido con rigurosidad los lineamientos relacionados con el principio “contexto de sostenibilidad”. En este sentido se recuerda que “Cuando se informa sobre asuntos que tienen impactos locales positivos o negativos, es importante proporcionar información detallada sobre cómo afecta la organización a las comunidades de distintos lugares. Igualmente, será necesario diferenciar entre las tendencias o los patrones de impacto en el conjunto de las operaciones y el desempeño en cada localización.” (GRI G4 Guía para la elaboración de memorias de sostenibilidad – Manual de aplicación).
Del mismo modo, en relación al principio de “puntualidad”, se recuerda que la “utilidad de la información depende en gran medida de si se transmite a los grupos de interés en el momento oportuno para que éstos la integren eficazmente en sus procesos de toma de decisiones”.
También, se ha indicado que en muchos reportes, se omite la descripción de la metodología de identificación de partes interesadas y la forma en cómo la organización ha integrado en su estrategia las expectativas relacionadas con los temas de responsabilidad social.

Los 10 informes sobresalientes de este año
Todos los reportes considerados como sobresalientes presentan información de sus operaciones en la Argentina de manera oportuna, hacen mención al uso de lineamientos de responsabilidad social globalmente reconocidos y aplican como metodología de rendición de cuentas el GRI.
Banco Galicia

En su Informe de sustentabilidad 2014 – Diez años de avance constante, realizado siguiendo los requisitos de la opción exhaustiva “de conformidad” con la Guía G4 del GRI y el Suplemento Sectorial para la Industria Financiera, la empresa declara haber considerado el manual AA1000SES, la Norma ISO 26000:2010 y los principios del Pacto Global de las Naciones Unidas.
A lo largo del reporte cada uno de los capítulos desarrollados son vinculados apropiadamente con el/los indicadores GRI relacionados lo que facilita su comprensión en el marco del GRI.
En el apartado gestión integral del riesgo, la empresa menciona los criterios de monitoreo de cumplimiento de las normas, políticas, regulaciones y códigos en todas sus dimensiones.
Con respecto a la información sobre los procesos de selección, contratación y evaluación de proveedores, la empresa presenta información sobre los análisis que realizan más allá de los aspectos legales y laborales, incluyendo criterios sociales y ambientales.
Por otra parte cabe mencionar la iniciativa –apoyada por la nueva edición de la Guía de Proveedores Sustentables–, de promoción del consumo responsable que ofrece un listado de empresas que brindan productos y servicios realizados en el marco del comercio justo y el cuidado ambiental y/social.
En relación a los contenidos, la presentación de la información sobre la inversión social realizada es sintética, clara y completa, la que expone por medio de tablas que resumen la información de cada uno de los programas dentro de las distintas iniciativas.
Para mejorar, se sugiere lograr un mayor equilibrio entre la información orientada al negocio y la información propia de sustentabilidad.
Carrefour

En su Reporte de sustentabilidad 2014 – Actuar hoy, para vivir mejor mañana, realizado siguiendo los requisitos de la opción exhaustiva “de conformidad” con la Guía G4 del GRI, la empresa declara haber considerado el manual AA1000SES, la Norma ISO 26000:2010 y los principios del Pacto Global de las Naciones Unidas.
En el marco del análisis del reporte surge como destacable la información presentada por la empresa en relación a su Gobernanza, la que explicita que la integración de la sustentabilidad al negocio se realiza a través de las funciones del máximo órgano de gobierno de la empresa en el país. El capítulo describe un innovador enfoque de “funciones” del Comité Ejecutivo como máximo órgano de gobierno de sustentabilidad, los temas vinculados a la sustentabilidad que se abordaron desde dicho comité y también menciona que los directivos son evaluados en su desempeño tanto por objetivos económicos, como en los objetivos de sustentabilidad de la compañía.
En línea con este modelo de negocio, el reporte presenta los mecanismos de gestión de la sustentabilidad adoptados por la compañía, entre los cuales cabe destacarse los relacionados con la medición del desempeño a nivel de cada uno de los ejes prioritarios y sus temas relacionados de manera comparativa con el año anterior.
En el apartado “Derechos humanos en la cadena de valor” el reporte contiene información detallada sobre las acciones relacionadas con su política proactiva de proveedores para garantizar que los mismos respeten los derechos humanos y menciona que la empresa realiza auditorias sociales a proveedores de Marca Propia.
Gas Natural Fenosa

En su Informe responsabilidad corporativa 2014, realizado siguiendo los requisitos de la opción esencial de la Guía G4 del GRI, la empresa declara haber considerado la Norma ISO 26000:2010, el manual AA1000SES y los principios del Pacto Global de las Naciones Unidas.
El informe da cuenta que no se limita a comunicar los indicadores de la Guía GRI G4 sino que adicionalmente incluye otros asuntos que son propios de la actividad de la compañía y de su gestión responsable. En línea con ello presenta información sobre su sistema Integral de Gestión bajo los lineamientos de las normas ISO 9001, ISO 14001 y la OHSAS 18001.
Presenta una estructura eficientemente organizada que lo posiciona como una herramienta de comunicación indiscutiblemente eficaz. En el mismo sentido, el glosario de términos técnicos que incluye, contribuye a facilitar la comprensión de su texto.
Enumera los principios de actuación responsable para las temáticas de sustentabilidad que aborda. Describe el compromiso asumido, las acciones de valor propuestas para el año bajo reporte, especifica el grado de cumplimiento de cada una de ellas –mediante la descripción detallada de la gestión realizada– y finalmente presenta un recuadro con las Metas 2015.
Adicionalmente el reporte da cuenta de la existencia de una Política de Derechos Humanos debidamente implementada a través de las distintas acciones que relata, como por ejemplo la formación a 94% del total del personal de seguridad tercerizado en relación a las temáticas de Seguridad y Derechos humanos y Conductas éticas en el desarrollo de sus funciones.
Kimberly-Clark

En su 7mo reporte de sustentabilidad 2014, realizado siguiendo los requisitos de la opción esencial de la Guía G4 del GRI, la empresa declara haber considerado la Norma ISO 26000:2010, el manual AA1000SES y los principios del Pacto Global de las Naciones Unidas.
El documento se caracteriza por un enfoque didáctico y amigable que permite su comprensión independientemente del nivel técnico del lector. Por ejemplo, incluye en sus primeras páginas todos los elementos necesarios para contextualizar su lectura y luego presenta infogramas que evidencian los logros obtenidos para cada una de tres de sus áreas estratégicas (personas, planeta, productos).
Da cuenta, además, que la empresa ha integrado la estrategia de sustentabilidad al plan de negocios y particularmente, en el capítulo de gobernanza, informa que los integrantes del Comité de Dirección reciben un componente variable que se calcula teniendo en cuenta los objetivos de desempeño relacionados con la sustentabilidad, como parte de su remuneración.
Incluye una descripción del programa insignia de la empresa llamado Proyectar, herramienta a través de la cual la empresa implementa su estrategia de sustentabilidad. A través de la misma se evidencian los objetivos, las metas 2014, el grado de avance alcanzado y las metas 2015 para tres de las áreas estratégicas definidas por la organización.
En las páginas 84 y 85 se describe detalladamente el estándar de cumplimiento social del proveedor, utilizado para transmitir los valores de la compañía y garantizar el respeto de las normativas laborales, ambientales y de salud y seguridad ocupacional en su cadena de valor.
Como sugerencia de mejoras, el informe incluye información sobre el estándar de cumplimiento social, el cual –cuando hace referencia a protección contra el trabajo infantil–, menciona que los proveedores no deben emplear a ninguna persona menor de 15 años. Dado que se refiere al capítulo argentino de Kimberly-Clark, debería considerarse el límite legalmente establecido en el país (desde 16 o 18 años según las condiciones).
Manpower

En su Reporte de Sustentabilidad 2014, realizado siguiendo los requisitos de la opción esencial de la Guía G4 del GRI, la empresa declara haber considerado la Norma ISO 26000:2010, el manual AA1000SES y los principios del Pacto Global de las Naciones Unidas. Es destacable la manera elegida para vincular las iniciativas mencionadas con cada una de las secciones del reporte, ya que esta modalidad facilita su lectura y comprensión.
El documento da cuenta de políticas, herramientas y lineamientos que guían a la empresa en la gestión de sus riesgos económicos, sociales y ambientales. Ejemplo de ello es la referencia a que el Comité de Dirección recibe como parte de su remuneración, un componente variable que se calcula teniendo en cuenta los objetivos de desempeño relacionados con la sustentabilidad.
Merecen destacarse tanto la claridad con que se explicita la posición de la compañía en relación a los derechos humanos en la gestión del negocio y en particular la forma en que la misma es presentada distinguiendo aquello que “defiende” de aquello que “rechaza” (pág. 33), como la enumeración de las acciones relacionadas con su política de participación activa en instancias de articulación público-privadas para contribuir con la gestión de políticas públicas relacionadas con los temas clave de la sustentabilidad.
Para mejorar. Si bien se declara en el reporte que “Nuestro Código alcanza a todos los empleados promoviendo la integridad y respetando los valores de la empresa”, no surge de la lectura del mismo que los canales existentes para realización de denuncias por parte de los empleados estén también a disposición de los “asociados” de modo que estos puedan realizar quejas o denuncias sin temor a represalias (en relación a la empresa y/o en relación al desarrollo de sus actividades en los clientes de esta).
Nidera

En su Reporte de Sustentabilidad 2014, realizado siguiendo los requisitos de la opción esencial de la Guía G4 del GRI, la empresa declara haber considerado la norma ISO 26000 y las Directrices de la OCDE para empresas multinacionales.
El reporte da cuenta de la aplicación de un sistema de gobernanza integral y presenta un mapa conceptual relacionado (pág. 9) que describe cómo el código de conducta, como documento principal de su marco de control, fortalece su gobierno organizacional y da soporte a las áreas de Riesgo y Cumplimiento, Recursos Humanos y Sustentabilidad.
En cuanto a la presentación de la información contenida en el reporte, cabe mencionar en particular la tabla presentada como Marco de Actuación en Sustentabilidad (pág.14), debido a que la misma recoge de manera equilibrada los tres principales temas materiales que surgieron del proceso de análisis de materialidad realizado por la empresa, relacionados con cada uno de sus públicos de interés.
La empresa describe la puesta en práctica de una modalidad de ejercicio de influencia abarcativa, basada en un abordaje integral de su cadena de valor, dando cuenta de las acciones desarrolladas tanto con proveedores como con distribuidores. En relación a proveedores ha impuesto la obligación (para proveedores nacionales y extranjeros) de la adhesión a una serie de principios de integridad, gestión social y ambiental responsable, cumplimiento legal y respeto por los derechos humanos, mediante la firma de los Estándares para Socios Comerciales. Con respecto a la red comercial de la compañía presenta una original iniciativa: el concurso en sustentabilidad Soy un distribuidor consciente.
Sancor Seguros

En su 10mo Reporte de sustentabilidad 2014–2015, realizado siguiendo los requisitos de la opción exhaustiva “de conformidad” con la Guía G4 del GRI, la empresa declara haber considerado la Norma ISO 26000:2010, los principios del Pacto Global de las Naciones Unidas y las iniciativas AA1000SES y AA1000AS.
En el apartado de Gestión Estratégica el reporte describe que se abordan los temas de RSE y Sustentabilidad dentro de una de las cinco perspectivas estratégicas.
También menciona que durante 2014, para promover un sistema interno de gestión y medición y presentar resultados de desempeño que pudieran integrarse con el Mapa Estratégico del Grupo, el área de RSE avanzó en el desarrollo de un Scorecard de Sustentabilidad con una estructura relacionada con las siete Materias Fundamentales de la Norma ISO 26000:2010.
El abordaje de la responsabilidad social basado en la ISO 26000 que presenta el reporte, se evidencia en la siguiente información de la que da cuenta el mismo: la organización describe como lleva a la práctica la integración de las expectativas de sus grupos de interés, a través de un original esquema que refleja el monitoreo del seguimiento histórico de los compromisos asumidos con estos (Pág. 12); aclara que el Código de Proveedores del grupo está basado en las siete Materias Fundamentales de la ISO 26000 y los 10 principios del Pacto Global y dispone de un capítulo específico para dar cuenta de las acciones de promoción de la responsabilidad social en la cadena de valor basadas en comunicación y formación y promoción de los derechos humanos en su sector.
Tarjeta Naranja
Este Reporte de sustentabilidad es el segundo que presenta la compañía y el mismo ha sido realizado siguiendo los requisitos de la opción exhaustiva “de conformidad” con la Guía G4 del GRI y el Suplemento Sectorial para la Industria Financiera.
Es destacable el compromiso asumido por la organización en relación a la rendición de cuentas de la información no financiera, evidenciado a través de la decisión de cumplir en un segundo reporte con los requisitos exigidos por la opción exhaustiva de la última versión GRI G4 y con el suplemento para el sector financiero.
La empresa declara haber considerado los principios del Pacto Global de las Naciones Unidas si bien aún no ha adherido formalmente a la iniciativa.
En relación al documento, el mismo se distingue por su frescura y un estilo descontracturado que no descuida la completitud de la información. Por otra parte sobresale el modo en el que el diseño gráfico utilizado refleja inequívocamente la cultura de la organización.
Se sugiere lograr un mayor equilibrio entre la información orientada al negocio y la información propia de sustentabilidad.
Telefónica

En su undécimo Informe de sostenibilidad 2014, realizado siguiendo los requisitos de la opción esencial de la Guía G4 del GRI, la empresa declara haber considerado los principios del Pacto Global de las Naciones Unidas y la norma AA1000AS.
El informe explicita que la empresa ha utilizado herramientas y desarrollos informáticos internos y externos para cuestiones relacionadas con recursos humanos y para otros asuntos de gestión responsable, clientes y sociedad, y un sistema específico para la información ambiental que le ha permitido el autodiagnóstico, la verificación de los datos desde su origen y el seguimiento de su trazabilidad.
Describe dos características sobresalientes de las actividades de capacitación en los principios de actuación de la empresa:
1- formación online de carácter obligatorio para todos los empleados en dos versiones: una general y otra específica para las áreas comerciales y de venta.
2- una instancia de evaluación para superar el curso, en la que cada empleado debe contestar satisfactoriamente al menos 80% de las preguntas.
El capítulo Gestión de la cadena de suministro explicita la existencia de una Política de Responsabilidad en la Cadena de Suministro y detalla exhaustivamente (a través de nueve páginas) las acciones derivadas de su implementación. Por ejemplo, refiere que 100% de los proveedores aplican estándares éticos que permiten asegurar el cumplimiento de los derechos humanos y los derechos fundamentales en el trabajo, como así también el respeto por el ambiente.
Molinos

En su 4to Reporte de Sustentabilidad 2014, realizado siguiendo los requisitos de la opción esencial de la Guía G4 del GRI, la empresa declara haber considerado el manual AA1000SES.
El reporte presenta infogramas que sintetizan de una manera muy amigable la información clave. Cabe destacar en particular la presentada en pág. 10 y 11, en la que se concentra la información de las localizaciones de sus plantas clasificadas por tipo actividad y las marcas producidas o actividades desarrolladas en cada una de las mismas.
El reporte de la empresa da cuenta del desarrollo de acciones de ejercicio de influencia en la cadena de valor, tanto en la cadena de distribución, en donde desarrolla un programa de auditorías a depósitos externos, como en su cadena de proveedores a través de métodos de control y monitoreo de proveedores y contratistas.
En línea con ello, la empresa hace público su Código de Conducta para proveedores el cual centra sus postulados bajo los estándares de conducta relacionados con: Integridad empresarial y gestión transparente, Respeto a los derechos humanos, Respeto y cumplimiento de normas ambientales y cumplimiento de los estándares de calidad, seguridad e higiene, estipulados por la normativa vigente y acordada con Molinos.
También describe detalladamente las actividades que realiza en materia de “Prácticas laborales responsables con toda la cadena de valor”. Particularmente se destaca la mención a diferentes procesos críticos (siembra, fertilización, cosecha y pulverización), la importancia que se le asigna a la revisión de las condiciones, el estado de la maquinaria y sus elementos de seguridad. También se destaca la claridad que aporta a la lectura del reporte la ilustración en la que logran sintetizar amigablemente la multiplicidad de acciones derivadas de la implementación de la política de control de contratistas.
Como sugerencia, si bien la empresa reconoce en el capítulo 5 relacionado con el desarrollo de las personas y comunidad incumplimientos en algunos de sus objetivos estratégicos (1. elaborar una matriz de riesgo de los proveedores de compras productivas considerando aspectos económicos, sociales y medioambientales y 2. incorporar y verificar el cumplimiento de las cláusulas de RSE en ofertas/ contratos de abastecimiento (trabajo infantil, forzoso, anti soborno, acoso y abuso, remuneración y carga horaria), no declara compromiso con el logro de los mismos en los “desafíos 2015”.
Mención especial para CPCECABA
Nuevamente merece una mención especial el reporte del Consejo Profesional de Ciencias Económicas de la Ciudad de Buenos Aires, por tratarse de una organización no gubernamental que mantiene su compromiso con la implementación de buenas prácticas de calidad, la mejora continua, la responsabilidad social y con la rendición de cuentas de información no financiera. Cabe resaltar como resultado de la evaluación realizada que este segundo informe de la institución se destaca por su alineamiento con todos los criterios considerados para esta evaluación.
En su Balance Social y Memoria de Sustentabilidad 2015, informe realizado siguiendo los requisitos de la opción esencial de la Guía G4 del GRI, la organización da cuenta de haber considerado la Norma ISO 26000:2010, el manual AA1000SES y los principios del Pacto Global de las Naciones Unidas.
El reporte refleja un enfoque comunicacional muy didáctico tanto en los temas relacionados con la gestión de la responsabilidad social como en los aspectos esenciales que hacen al propio ejercicio profesional y que están íntimamente ligados a la sustentabilidad, como por ejemplo el destacado sobre el Marco legal y ético profesional (pág. 43).
Además de la política de calidad –la institución ha sido recertificada ISO 9001:2008 en el año 2013–, el informe da cuenta de la existencia de una serie de políticas relacionadas con la sustentabilidad que le permiten integrar sus aspectos fundamentales en la gestión: política de responsabilidad social institucional, código de conducta y código de ética profesional, política de no discriminación en el proceso de selección de personal, entre otras.
Sobre su ejercicio de influencia y procesos de debida diligencia, cabe destacar la mención al desarrollo realizado por la institución en el marco de sus acciones de responsabilidad social institucional (RSI): Guía de buenas prácticas de responsabilidad social. Cadena de valor.
Por otra parte el informe describe detallada, clara y amigablemente el proceso de selección, evaluación y seguimiento de proveedores, llevado a cabo en el período informado (pág. 54).
Otras menciones especiales
Si bien no alcanzaron esta vez para situarse dentro del lote de los reportes sobresalientes, hay otros tres reportes que han sido destacados por las evaluadoras. Estos son Acindar, Dow y Terminales.
Acindar
Su undécimo Reporte de sustentabilidad correspondiente al año 2014, ha sido realizado siguiendo los requisitos de la opción esencial de la Guía G4 del GRI. La empresa declara haber considerado los principios del Pacto Global de las Naciones Unidas. El Informe da cuenta que no se limita a comunicar los indicadores de la Guía GRI G4, sino que adicionalmente incluye otros asuntos que son propios de la actividad de la compañía y de su gestión responsable y presenta información sobre los sistemas de gestión recertificados: ISO 14001:2004, ISO 9001:2008, OHSAS 18001:2007.
El reporte detalla la información por localización de sus actividades de manera transparente y clara para los grupos de interés.
En relación al abordaje de su cadena de proveedores, describe un sistema de evaluación basado en la existencia de códigos de conducta relativos a las siguientes prácticas laborales: respaldo a la libertad de asociación, rechazo del trabajo forzado u obligatorio, rechazo del trabajo infantil, erradicación de la discriminación, erradicación del acoso y la violencia, pago de remuneración competitiva y condiciones sostenidas de empleo.
Como sugerencia de mejora, del informe no surge una vinculación entre la información presentada en la matriz de materialidad 2014 (pág. 7) y los principales desafíos 2015 (pág. 19). Por ejemplo, el tema salud y seguridad ocupacional es el más crítico en la matriz y no se incluye ningún ítem que se corresponda con el mismo, dentro del desafío “invertir en nuestra gente”.
Dow Argentina
En su Balance de sustentabilidad 2014, realizado siguiendo los requisitos de la opción esencial de la Guía G4 del GRI, la empresa declara haber considerado los principios del Pacto Global de las Naciones Unidas, la Norma ISO 26000:2010 y el manual AA1000SES.
Según refiere el reporte, sustentabilidad, ética y cumplimiento es uno de los cuatro pilares de la estrategia de negocio de la compañía.
En el mismo se declaran, como Metas de Sustentabilidad, la reducción del impacto ambiental, la innovación para resolver los problemas más urgentes a escala global, la responsabilidad sobre el ciclo de vida de los productos y el desarrollo socioeconómico de las comunidades en las que opera.
El documento describe la realización anual de una autoevaluación de la gestión orientada a la sustentabilidad en relación con los Valores, Transparencia y Gobierno Corporativo; Proveedores; Consumidores y Clientes; Público Interno; Comunidad y Gobierno; Medio Ambiente y Sociedad.
Entre las prácticas descriptas cabe mencionar las sesiones de formación para líderes sobre la importancia de la diversidad en su rol como generadores de una cultura de inclusión y valoración de las diferencias.
Como componente a revisar, del informe no surge que en el listado de grupos de interés (pág. 17) se haya incluido como parte interesada a la comunidad en general (solo se declara haber incluido a las comunidades cercanas a las operaciones) cuando el uso de algunos productos podría impactar negativamente en comunidades distantes de las operaciones de la compañía. Por otra parte esta omisión resulta inconsistente en relación a la declaración de compromiso con el desarrollo sustentable que incluye la responsabilidad sobre el ciclo de vida de los productos (pág. 16).
Terminales Río de la Plata
En su segundo Reporte de sustentabilidad correspondiente al período 2013-2014, realizado siguiendo los requisitos de la opción esencial de la Guía G4 del GRI, la empresa declara haber considerado los principios del Pacto Global de las Naciones Unidas, la Norma ISO 26000:2010 y el manual AA1000SES. La organización cuenta con un Sistema Integrado de Gestión certificado bajo las normas internacionales ISO 9001, 14001, 28000, 50001.
El documento se caracteriza por un diseño amigable que permite una fácil comprensión, independientemente del nivel técnico del lector, y su contenido es pertinente y equilibrado.
El reporte menciona la existencia de las políticas establecidas por la compañía en relación a los distintos temas específicos que forman parte del marco de la sustentabilidad, dando cuenta de la existencia un sistema de gobernanza orientado a la sustentabilidad. Ejemplos: Política de Calidad, Medio Ambiente, Seguridad y Salud Ocupacional, Energía y Seguridad para la Cadena de Suministros, Política de Conducta y Normas Éticas, Política de Conflicto de Interés y Fraude, Política de Delación o Denuncias, Política de Diversidad e Inclusión, Políticas de Recursos Humanos, que incluyen, Política de Reclutamiento y Selección, Política de Inducción, Políticas y Procedimientos sobre Igualdad de Oportunidades y No Discriminación, Políticas y Procedimientos sobre Protección de Datos, Políticas y Procedimientos sobre Acoso, Políticas y Procedimientos de Introducción a Aprendizaje y Desarrollo, Seguridad y Salud Ocupacional, y Seguridad para la Cadena de Suministros, entre otras.
El informe da cuenta que la empresa ha definido indicadores clave en relación al desempeño de responsabilidad social dentro de la estrategia de responsabilidad corporativa y, según lo que presenta en la página 25, la evolución de dichos indicadores es monitoreada anualmente permitiendo evidenciar su grado de cumplimiento.
57 Reportes analizados
3M
Acindar
Adecco Argentina
Allianz Argentina
Arcor
Banco Francés
Banco Galicia
Bridgestone
Bunge
Cargill
Carrefour Argentina
Casino Puerto Santa Fe
CITI
Coca-Cola
CPCECABA
Deloitte Argentina
Dow Argentina
Esarq
Eset
EY
Gas Natural Fenosa
Globant
Grupo LanTam
Holcim
Holcim Fundación
Kimberly-Clark
Ledesma
Loma negra
L’oréal Argentina
Macro
Manpower Group
Mastellone
Mercedes-Benz
Molinos Río de la Plata
Mondelez
Natura
Nidera
Odebretch
Osde
Praxair
Profertil
Randstad
Renault
Sancor Salud
Sancor Seguros
Santander Río
Securitas
Tarjeta naranja
TC2000
Telecom
Telefónica
Terminales Río de la Plata
Tetra Pak
TGS
Toyota
Unilever
Walmart
La agenda 2030
En la senda de los ODS
Las empresas han sido reconocidas como un socio fundamental para el logro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) adoptados en el marco de Naciones Unidas en 2015. Ban Ki-moon declara al referirse a ello: “solo le pedimos que evalúen sus impactos en todas partes, establezcan objetivos ambiciosos y comuniquen de forma transparente sus resultados”.
Por Cristina López (*)

Cristina López
La Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, va mucho más allá de los Objetivos del Milenio (ODM) y en cada uno de los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) que plantea –con sus 169 metas–, hay un universo de acciones posibles relacionadas con las actividades organizacionales que pueden contribuir a su logro.
Alcanzar el cumplimiento de estos nuevos objetivos y metas dependerá de una Alianza Mundial revitalizada y mejorada, y es por ello que Naciones Unidas reconociendo que la actividad empresarial, la inversión y la innovación privadas son los grandes motores de la productividad, el crecimiento económico inclusivo y la creación de empleo, exhorta a todas las empresas a que “empleen su creatividad e innovación para resolver los problemas relacionados con el desarrollo sostenible”.
En línea con este llamado es que dentro del Objetivo 12. “Garantizar modalidades de consumo y producción sostenibles”, define la meta 12.6 en los siguientes términos: “Alentar a las empresas, en especial las grandes empresas y las empresas transnacionales, a que adopten prácticas sostenibles e incorporen información sobre la sostenibilidad en su ciclo de presentación de informes”.
Es decir, la Agenda 2030 insta a las empresas a cumplir con dos grandes desafíos:
1- Desarrollar un sector empresarial dinámico y eficiente que proteja al mismo tiempo los derechos humanos y respete al ambiente, de conformidad con las iniciativas internacionales relacionadas (como por ejemplo los Principios Rectores de las Naciones Unidas sobre las Empresas y los Derechos Humanos, las normas laborales de la Organización Internacional del Trabajo, la Convención sobre los Derechos del Niño y los principales acuerdos ambientales multilaterales), es decir, cuyo modelo de gestión organizacional esté basado en la adopción de prácticas sostenibles; y
2- Rendir cuentas periódicamente sobre los impactos sociales y ambientales a través de la presentación de informes/reportes/memorias de sustentabilidad.
De modo que, si contribuir a los ODS mediante modalidades de producción sostenibles y con una comunicación abierta y transparente del impacto que sus decisiones y acciones generan en la sociedad y el ambiente, es el rol esperado del sector privado, en este sentido, los reportes de sustentabilidad desarrollados aplicando rigurosamente metodologías internacionalmente reconocidas, se constituyen en una herramienta funcional a los ODS, por lo que resulta valioso promover su realización.
(*) Presidente de Fundación el Otro. Integrante de la ISO 26000 Post Publication Organization. Miembro del Comité Estratégico de Responsabilidad Social de IRAM. Secretaria del Subcomité IRAM de Compras sostenibles.
Proveedores y contratistas
Ejercicio de la influencia
Reconocer la responsabilidad social e involucrarse con las partes interesadas son las prácticas fundamentales de la responsabilidad social e implican: el relacionamiento de la organización con sus grupos de interés y el reconocimiento de sus asuntos materiales en este campo, tanto intra organización como dentro de su esfera de influencia.
Por Adriana Rosenfeld (*)

Adriana Rosenfeld
Esto se debe a que las organizaciones pueden verse ampliamente afectadas por sus relaciones dentro de su esfera de influencia, en particular por las decisiones y actividades de los proveedores y contratistas, dado que éstas pueden tener un impacto en la responsabilidad social de la organización.
Según la ISO 26000:2010, “una organización puede ejercer su influencia sobre otros para aumentar los impactos positivos en el desarrollo sostenible, o para minimizar los impactos negativos, o ambas cosas. Al evaluar su esfera de influencia y determinar sus responsabilidades, una organización debería ejercer la debida diligencia.”
Es por ello que, en relación a su esfera de influencia, las organizaciones deberían tener en cuenta aspectos ambientales y sociales y en base a ello, realizar procesos de ejercicio de debida diligencia con el fin de evitar contribuir a los impactos negativos a través de sus relaciones.
Por lo tanto una organización no solamente debería gestionar de forma cuidadosa y metódica sus propios impactos asociados, sino que además debería hacer el seguimiento de los impactos de las organizaciones dentro de su esfera de influencia, para minimizar así el riesgo de daño social y ambiental, y maximizar los impactos positivos.
En particular la ISO 26000:2010, en la materia fundamental Prácticas justas de operación, incluye un asunto estrictamente orientado a la promoción de la responsabilidad social en la cadena de valor. Como primera expectativa, este asunto menciona que una organización debería integrar en sus políticas y prácticas de compra, distribución y contratación criterios éticos, sociales, ambientales, de igualdad de género y de salud y seguridad ocupacional para mejorar la coherencia con los objetivos de responsabilidad social de la organización.
La función de compras tiene un importante papel que desempeñar en una estrategia de sostenibilidad. Por ello ISO se encuentra desarrollando, desde el año 2013, la Norma Internacional 20400 que proporcionará a las organizaciones públicas y privadas orientación en relación a cómo integrar la sostenibilidad en sus procesos de abastecimiento.
Por todo lo antedicho y atendiendo a los principios de presentación de información no financiera, las organizaciones también deberían dar cuenta en sus reportes de sustentabilidad, de las acciones de promoción de la responsabilidad social que desarrollan en su cadena de valor, de si han establecido criterios de sustentabilidad en sus procesos de compras y contrataciones y de si desarrollan acciones de debida diligencia en su cadena de valor (por ejemplo, en materia de trabajo infantil, trabajo forzoso, libertad sindical, pagos de salarios de acuerdo a ley y CCT, duración de la jornada laboral, discriminación, entre otros).
(*) Integrante de la ISO 26000 Post Publication Organization. Miembro del Comité Estratégico de Responsabilidad Social de IRAM. Coordinadora del Subcomité IRAM de Compras sostenibles.

