Según datos presentados por Sumar Inversión, la primera plataforma con app que permite invertir en crowdfunding inmobiliario, hay una tendencia que demuestra que un 50% ingresa con módulos de US$ 1.000, un 30% con módulos de US$ 100, y un 20% con módulos de US$ 10.000 y US$ 25.000.
Los módulos de inversión se pueden adquirir en efectivo o con tarjeta de crédito en pesos, sin consumir el cupo de US$ 200 mensuales. Esta última es una opción que se ofrece para que los inversores no se preocupen en cómo transferir, cómo hacerse de los dólares, y en qué tipo de cambio pensar. Además desde la compañía afirman que el porcentaje de adhesión mediante tarjeta de crédito creció a más de un 100% con respecto a desarrollos del año 2020.
Además el pequeño ahorrista puede suscribir un módulo de US$ 100 por mes con tarjeta de crédito, y de esta manera utilizarlo como una forma de ahorro constante respaldada por ladrillos.
En este sentido, para aquellos que quieran empezar a invertir en crowdfunding inmobiliario en CABA, la compañía lanzó la propuesta EZ09, un edificio con 10 unidades, con un diseño de vanguardia y excelente categoría para la vida en la ciudad, en pleno barrio de Palermo Soho, a unas cuadras de la Plazoleta Julio Cortázar (Plaza Serrano).
Por otro lado, en el marco del auge de la transformación digital que se vive impulsada por la pandemia, más del 50% de los inversores actuales han completado el proceso de adhesión mediante canales digitales.
“El 50% de los inversores que sumamos se dio en cuatro meses sobre un proyecto de tres años, lo que nos da pie a buscar nuevos proyectos en CABA en el corto plazo”, explica Víctor Zabala, CEO de Sumar Inversión, y agregó: “seguimos trabajando en esta tarea de democratizar el mercado inmobiliario permitiendo que los que tienen un pequeño ahorro puedan invertir en ladrillos y resguardar y hacer crecer sus ahorros”.
De esta manera, el crowdfunding inmobiliario se vuelve la alternativa ideal para quienes buscan protegerse de la devaluación y generar rentabilidad en dólares, en un momento en que el acceso a la moneda extranjera es complejo.
