La Fundación Eidos junto a Wolox, Accenture y Gire llevaron adelante la segunda edición del Plan Azurduy. El programa de capacitación apunta a introducir a jóvenes madres de entre 18 a 30 años a los conocimientos de tecnología. Con este fin se les brindan herramientas para desarrollar las habilidades técnicas y socio-emocionales necesarias para los “trabajos del futuro”.
26% de las mujeres jóvenes están desempleadas y ese porcentaje crece si sólo se considera a quienes son madres. “Este programa busca reducir la brecha de género en pos de la igualdad. Por eso le dá oportunidades a mujeres que tal vez no las tuvieron, pero que tienen todas las capacidades para aprovecharlas y aumentar su potencial”, enfatizó Lara Pizarro, coordinadora académica de Eidos Global.
El Plan Azurduy capacitó a 56 mamás, de las cuales 50% ya consiguió trabajo como testers (probadoras de software) en empresas de tecnología. Además, las egresadas aseguran que gracias a esta iniciativa desarrollaron la escucha activa y su capacidad para hacer una devolución. Esto mejoró su autoconfianza y su capacidad para superar obstáculos o para aprender de ellos.
Las empresas, una pieza clave para el Plan Azurduy
Gracias al apoyo de compañías como Wolox, Accenture, Gire, Grupo Núcleo, Red Hat, Uber, Coder House, Microsoft, Danone y Argencon, la Fundación Eidos puede desarrollar este programa de capacitación que es totalmente gratuito.
“Las empresas juegan un papel muy importante en el Plan Azurduy. Este es un programa que funciona gracias su colaboración”, explicó Fernando Carracedo, coordinador del proyecto en Eidos Global.
Esta edición contó con 35 clases, donde las participantes aprendieron los contenidos necesarios para ocupar el puesto de tester/QA. Esta posición es la encargada de investigar y evaluar el proceso de un producto de software para que le llegue de la mejor manera posible al usuario final.
“Nos sumamos al Plan Azurduy con el objetivo de que más mujeres, en este caso mamás, adquieran habilidades técnicas y socio emocionales. Esto incrementa sus posibilidades de inserción en el mundo laboral, contribuyendo a su autonomía económica. Y, también, aporta a cerrar la brecha de género que existe en el ámbito de la tecnología”, aseveró Cecilia Simari, líder de Comunicación Corporativa y Sustentabilidad de GIRE.
En la actualidad hay 500 mil puestos de trabajo sin ocupar en empresas de tecnología por falta de profesionales capacitados.