La cruzada por reducir la huella ambiental

<p>Ya sea que se trate de administraci&oacute;n del agua o de reducci&oacute;n de emisiones, es dif&iacute;cil encontrar marcas que hoy no proclamen metas ambientalistas. Con el concepto de negocio sustentable ya bien instalado, muchas empresas dicen estar trabajando para reducir su impacto en el planeta mientras desarrollan productos y servicios m&aacute;s sustentables. <br />
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El gasto en negocios sustentables va a aumentar. Pero no hay que olvidar que la sustentabilidad tambi&eacute;n puede ser un catalizador para mejoramiento de productos. Cuando Johnson, la fabricante de productos de limpieza, reformul&oacute; uno de sus productos usando un sistema que eval&uacute;a el impacto de sus ingredientes en ambiente y salud, elimin&oacute; tambi&eacute;n gran parte de compuestos org&aacute;nicos vol&aacute;tiles. Al mismo tiempo, aument&oacute; 30% el poder limpiador del producto.<br />
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Las firmas de capital privado comienzan a advertir la promesa que significa encontrar este tipo de eficiencias en las operaciones de las compa&ntilde;&iacute;as que compran. Los inversionistas est&aacute;n cada vez m&aacute;s interesados en el desempe&ntilde;o ambiental de las compa&ntilde;&iacute;as donde ponen su dinero. En nombre de los inversores institucionales que hjhhjjknmjmanejan activos combinados de m&aacute;s de US$ 78 mil millones, el Carbon Dis&not;closure Project recibe informes sobre las emisiones de gas de invernadero y estrategias de cambio clim&aacute;tico de miles de organizaciones y ha lanzado un proyecto similar para comprender los riesgos que amenazan a las empresas. <br />
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Por su parte, los grandes fabricantes y minoristas est&aacute;n usando su poder de compra para obligar a sus proveedores a adoptar pr&aacute;cticas m&aacute;s proambientales. Procter &amp; Gamble, el gigante de productos para el consumo, tiene un sistema de medici&oacute;n de sustentabilidad para evaluar el desempe&ntilde;o de sus proveedores en &aacute;reas como administraci&oacute;n de desperdicios, consumo de agua y emisi&oacute;n de gases de invernadero.</p>
<p><strong>Crece el impacto general</strong></p>
<p>Sin embargo, frente a todos estos desarrollos est&aacute; el hecho que se est&aacute; intensificando el impacto general de las actividades comerciales sobre el planeta. Las compa&ntilde;&iacute;as pueden estar actuando bien, pero la huella general sigue expandi&eacute;ndose r&aacute;pidamente para satisfacer las demandas de mayores m&aacute;rgenes de ganancias. <br />
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Para muchas compa&ntilde;&iacute;as, las iniciativas de sustentabilidad siguen ocupando un lugar relativamente peque&ntilde;o en las operaciones comerciales que est&aacute;n orientadas a satisfacer el crecimiento de la demanda de bienes baratos y las demandas de corto plazo de los mercados de capitales. <br />
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Mientras las grandes marcas est&aacute;n aumentando el gasto y fijando ambiciosas metas ambientales, muchas de las peque&ntilde;as dudan en poner la sustentabilidad en sus agendas porque creen que los esfuerzos por reducir su huella ambiental van a aumentar sus costos. Por su parte, los ambientalistas creen que el intento por poner las actividades comerciales y el consumo humano en sinton&iacute;a con los recursos del mundo es una batalla que se est&aacute; perdiendo.&nbsp;</p>

<p>Por ejemplo, las especies se están extinguiendo a una velocidad 1.000 veces mayor a los tiempos preindustriales. Sin embargo, pocas empresas analizaron su impacto sobre la biodiversidad. Los seres humanos ya dependen del equivalente a un planeta y medio para la provisión de los recursos que usan y absorber sus desperdicios, según Global Footprint Network. Esto, dice el informe, significa que a la tierra le lleva un año y medio regenerar lo que los humanos consumen en un año. <br />
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Algunas empresas creen que es posible crecer y simultáneamente mantener o reducir su huella ambiental. Unilever, el grupo anglo-holandés de productos para el consumo, dice que proyecta duplicar el tamaño de la compañía y simultáneamente reducir a la mitad su huella ambiental y abastecer sustentablemente la totalidad de sus productos agrícolas. <br />
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Otras dicen que el capitalismo necesita estar gobernado por mejores leyes. En este sentido, van apareciendo algunas señales de cambio. En Estados Unidos, siete estados adoptaron una nueva forma de legislación empresarial que exige a las empresas registradas que generen retornos positivos para la sociedad y el ambiente además de ganancias. Hay también otros estados estudiando la posibilidad de introducir legislación de ese tipo.</p>
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