Así resulta del último informe del Centro de Estudios de la Educación Argentina (CEA) de la Universidad de Belgrano, que dirige Alieto Guadagni, en base a los datos del Anuario Estadístico Educativo 2018 elaborado por el Ministerio de Educación.
De esta manera, el sistema educativo de la Argentina no logra dar el paso necesario hacia la meta de calidad educativa con inclusión social. Pero además, incumple la Ley 26.075 de Financiamiento Educativo, sancionada en diciembre de 2005, que en su artículo 2º exige “lograr que, como mínimo, el 30% de los alumnos de educación básica tenga acceso a escuelas de jornada extendida o completa, priorizando los sectores sociales y las zonas geográficas más desfavorecidas”.
También hace lo propio con la Ley de Educación Nacional, de diciembre de 2006, que en su artículo 26º dispone: “Las escuelas primarias serán de jornada extendida o completa con la finalidad de asegurar el logro de los objetivos fijados para este nivel por la presente ley”.
Aun con estos pobres porcentajes, la escuela primaria de gestión estatal logra una mayor cobertura de la cantidad extendida de horas de clase que la de gestión privada, si bien la diferencia es ínfima: 14% en las primeras versus 13,7% en las segundas. De hecho, 493.227 alumnos de primarias estatales se benefician con la jornada extendida, sobre un total de 3.511.308. Mientras tanto, sólo 178.800 estudiantes de primarias de gestión privada -para más datos, 4.000 menos que en 2015- acceden a lo que marca la ley, sobre 1.309.054 que concurren a esos colegios.
La situación, además, no es para nada homogénea a lo largo y ancho del país. Mientras en Tierra del Fuego el 78,2% de los alumnos de primarias estatales accede a jornada extendida y en la provincia de Córdoba y la ciudad de Buenos Aires lo hacen el 49,5 y el 48,3%, respectivamente, en el Conurbano bonaerense apenas el 6,3% concurre al colegio bajo esta modalidad, en Corrientes lo hace el 3,9% y en Neuquén, sólo el 2,5%.
En la gestión privada, también se destacan Tierra del Fuego y la ciudad de Buenos Aires, con 79,5 y 41,1% de alumnos con jornada extendida, respectivamente. Por el contrario, en el Conurbano bonaerense la cifra desciende al 8,5%, en Santa Fe a 3,1% y en Formosa a 0,8%.
Otro aspecto notable, de acuerdo con el informe del CEA de la Universidad de Belgrano, es que no existe correlación alguna entre la cantidad de cargos docentes y el cumplimiento de la ley que establece la Jornada Completa o Extendida. Por ejemplo, en las escuelas primarias estatales de Tierra del Fuego hay 9 alumnos por cargo docente, igual que en Entre Ríos, La Rioja y San Luis. Sin embargo, en la provincia más austral, el 78,2 por ciento de los alumnos primarios estatales asiste a escuelas con jornada extendida, mientras que en Entre Ríos esta relación cae a un 17,8 por ciento; en La Rioja, a un 13,4%, y en San Luis, a un 4,7%.
Lo propio ocurre en las escuelas de gestión privada. En Tierra del Fuego, hay 13 alumnos primarios por cargo docente en este tipo de colegios, del mismo modo que en San Juan, Chaco y Formosa. Sin embargo, en el distrito patagónico el 79,5% de los alumnos se beneficia con la jornada extendida, en tanto que lo hace el 20,9 en la provincia cuyana y sólo el 3,9% en Chaco y el 0,8% en Formosa.
“El nivel educativo de nuestros niños de la escuela primaria es bajo, como lo indican desde hace ya varios años nuestras propias evaluaciones y también las de carácter internacional. Además, es evidente, al comparar con otros países del mundo y en particular de América latina, que nuestro calendario escolar es muy corto. Esto significa que los niños argentinos tienen muy pocas horas de enseñanza en las escuelas primarias”, indica Alieto Guadagni, director del Centro de Estudios de la Educación Argentina (CEA) de la Universidad de Belgrano.
“Mejorar la calidad educativa de nuestras escuelas primarias no será una tarea fácil y exigirá avanzar rápidamente hacia la extensión de la jornada extendida. Este avance deberá ser más acelerado en las escuelas a las que acuden los niños más pobres, fortaleciendo así la igualdad de oportunidades”, concluye el especialista.
Cuadro.
Alumnos que asistían a escuelas primarias con jornada escolar extendida o completa en 2018
Fuente: Elaboración propia en base al Anuario Estadístico Educativo 2018.