Hace ya varios días que se esperaba este desenlace luego de los resultados de una investigación sobre la cultura de la organización, que muestran un lugar hostil, con pocos sistemas que contrarresten el machismo, el acoso sexual y muchos desmadres gerenciales.
Como parte de la investigación, el ex fiscal general Eric Holder, uno de los socios de la firma, entrevistó a personas de dentro y fuera de la empresa sobre el número de incidentes que involucran a Michael, incluido una visita a un bar surcoreano de coperas. Preguntaron a esas personas quién sugirió la visita al bar, el nombre del lugar y cómo se sentaron las mujeres, que tenían números.
Los resultados de la investigación fueron analizados por el directorio y terminaron, para sorpresa de muchos, tumbando a un intocable de la compañía, amigo y confidente de Travis Kalanick. Pero, según voceros, el directorio reconoció la necesidad de una reestructuración total de su cultura y su liderazgo.
Ahora que se concretó el alejamiento de Michael, Uber se ha quedado sin jefe de negocios y prácticamente sin cuerpo gerencial. Para una compañía en crisis, la ausencia de gerenciamiento podría ser devastadora.