El índice de actividad para el sector textil acumuló una contracción de 5,5% interanual entre enero y mayo de este año, siendo los segmentos más afectados el de fibras sintéticas y artificiales, que retrocedió 25,9% en el mismo período. En tejidos, la caída fue menos acentuada (-7,2%), mientras que hilados de algodón mostró una variación interanual positiva (2,0%), gracias a la recuperación registrada a partir de abril.
A partir de ese mes se produjo cierto repunte en el uso de la capacidad instalada del sector, que en los últimos meses volvió a ubicarse por encima del 70%, puntualiza el último informe sectorial elaborado por abeceb.com. Esta merma en la producción es un reflejo del menor dinamismo presentado por la demanda en los primeros meses de 2013.
En shoppings, las ventas de indumentaria sufrieron una caída de 4,6% a precios constantes en el primer cuatrimestre.
Mientras que según los datos de CAME las ventas minoristas de productos textiles registraron una baja promedio de -2,2% entre enero y mayo.
En el sector calzado las ventas muestran una importante volatilidad en los últimos meses, aunque predominan las variaciones interanuales negativas. Así, la mejora registrada en ventas de calzado en junio (de 1,2% según datos de CAME) no resultó suficiente para lograr un resultado positivo en el primer semestre del año, que terminó con un retroceso promedio de 2,8%.
A pesar de esto, las importaciones de calzado aumentaron un 28,4% interanual en los primeros cinco meses del año, dada la fuerte caída registrada del año pasado y los problemas de competitividad de la industria local. Las novedades en el sector estás dadas por el lanzamiento de la marca NyP bajo la iniciativa del gobierno y por anuncios de inversión en calzados, aunque aún no se advierten efectos identificables sobre la producción y las ventas.
En mayo el gobierno anunció el lanzamiento al mercado de prendas de vestir a precios populares bajo la marca NyP.
El anuncio se da en el marco de un acuerdo de precios entre la Secretaría de Comercio y el eslabón final de la cadena.
Sin embargo, hasta el momento no se observa un cambio importante en la actividad productiva ni en las ventas del sector.
En calzados, por su parte, New Balance anunció su vuelta al país con una inversión de $45 millones. La misma implicaría una ampliación de la planta actual donde se producen calzados de la marca Kappa y la apertura de nuevos locales. Con todo, si bien se prevé cierta recuperación para lo que resta del año, 2013 cerraría con un resultado negativo, tanto en materia de producción como de consumo.
En el caso del sector de insumos textiles, dado que la merma en la producción es cada vez menor y que en los últimos meses se registra un mayor uso de la capacidad instalada, es esperable que se observe cierta recuperación en el corto plazo de la producción.
De todas formas, la mejora no alcanzaría para reflejar una suba al cierre del año. En el caso del calzado, la actividad productiva se sostiene de la mano de las barreras comerciales como las DJAI y el proceso de sustitución de importaciones donde se van incorporando modelos de calzado y marcas internacionales a la producción local.
Sin embargo, se observan signos de pérdida de competitividad, lo que lo vuelve más vulnerable a la competencia y más dependiente de las medidas de protección comercial.
Por el lado del consumo, en ambos casos puede preverse un repunte para lo que queda del año, gracias al efecto de la actualización de los salarios y de la prolongación de los descuentos sobre las ventas con tarjeta de crédito.
Pero teniendo en cuenta que la recuperación sería leve, y dada la caída registrada en los primeros meses de 2013, tampoco es esperable que la demanda finalice el año en terreno positivo.
