(EFE).- La ambición de Tailandia de convertirse en el centro estratégico de la fabricación de automóviles destinados al futuro mercado común del sudeste de Asia, la “Detroit” de la región, adquiere forma con la llegada de los mayores fabricantes internacionales.
Con la vista puesta en ese futuro y cuando remonta la crisis financiera que estalló a mediados de 1997, Tailandia retoma sus planes para la industria del automóvil abriendo su mercado y ofreciendo incentivos a los mayores fabricantes para que construyan plantas en el país.
“La meta es hacer de Tailandia la Detroit del sudeste de Asia”, señaló Saporn Kavitanon, secretario general de la Oficina Nacional de Inversiones, organismo encargado de aprobar los proyectos y que decide cuales recibirán incentivos “especiales”.
Durante el pasado año, General Motors y su inmediato competidor Ford Motor comenzaron a producir vehículos en Tailandia y a exportarlos a diferentes partes del mundo.
En su factoría de Rayong, situada al este de Bangkok y en cuya construcción empleó US$ 643 millones, General Motors fabrica al año 40.000 vehículos del modelo “Zafira”, de los que destina 85% a la exportación, principalmente a los mercados de Europa y Australia.
Por su parte, Ford Motor ha invertido US$ 500 millones de dólares en la construcción de la planta donde ensambla turismos y un modelo de furgoneta de una tonelada, que en su mayor parte son exportados a América y Asia.
El fabricante alemán BMW inyectó el pasado año US$ 25 millones en la ampliación de sus instalaciones en Tailandia, donde anualmente fabrica 10.000 unidades de tres modelos de la serie 3, mientras compite con su eterno rival, Mercedes Benz.
En cuanto a la firma francesa Renault, propietaria de 38% de Nissan, ultima los preparativos para producir este mismo año en Tailandia, de donde se retiró en 1994, el modelo “Scenic”.
La española Seat, que a finales de la pasada década exploró la posibilidad de fabricar en Indonesia, comercializa en el país algunos de sus modelos a través de un distribuidor tailandés.
Las pioneras de la industria de la automoción en Tailandia fueron, sin embargo, las compañías japonesas, llegadas a partir de 1964.
Toyota, Honda, Nissan, Mitsubishi e Isuzu disponen de enormes fábricas y su radicación en Tailandia fue suficientemente atractiva para cientos de empresas niponas de componentes, que abrieron fábricas al lado de sus mayores clientes.
Los fabricantes japoneses amplían en la actualidad su capacidad de producción para prepararse de cara al mercado común que la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN) planea poner en marcha a partir de 2003.
La Asociación de la Industria de la Automoción de Tailandia calcula que en 2003 el país fabricará anualmente 800.000 vehículos y anticipa que al año siguiente la producción será de 1.155.000 unidades.
Las ventas de vehículos en los mercados de la ASEAN crecieron 44% durante el año 2000, o hasta un total de 1.091.296 unidades, según datos oficiales.
El país donde se registró un mayor índice de crecimiento en la venta de automóviles durante ese año fue Indonesia, con 298.633 unidades, que supusieron un aumento de 218% con relación a 1999.
Medido en porcentajes, siguieron la ciudad-Estado de Singapur, en el que se vendieron 84.889 vehículos de motor, con un alza de las ventas de 58%; y Tailandia, donde las 262.189 unidades vendidas marcaron un incremento de las ventas de 20% con respecto al año anterior.
En Malasia, las ventas aumentaron hasta las 343.173 unidades, 19% mas; y en Filipinas alcanzaron las 83.949 unidades, lo que supuso una suba de 13%.
Por el contrario, en Vietnam, con 13.957 unidades vendidas, se registró un descenso de 38%, mientras que en Brunei las ventas declinaron 3%, hasta los 5.133 vehículos.
General Motors, según recoge el estudio elaborado por “Concepto Este”, firma dedicada al asesoramiento de empresas españolas en Asia, calcula que en el año 2008, 29% de las ventas mundiales se realizaran en Asia, por encima de América del Norte y Europa juntas.
(EFE).- La ambición de Tailandia de convertirse en el centro estratégico de la fabricación de automóviles destinados al futuro mercado común del sudeste de Asia, la “Detroit” de la región, adquiere forma con la llegada de los mayores fabricantes internacionales.
Con la vista puesta en ese futuro y cuando remonta la crisis financiera que estalló a mediados de 1997, Tailandia retoma sus planes para la industria del automóvil abriendo su mercado y ofreciendo incentivos a los mayores fabricantes para que construyan plantas en el país.
“La meta es hacer de Tailandia la Detroit del sudeste de Asia”, señaló Saporn Kavitanon, secretario general de la Oficina Nacional de Inversiones, organismo encargado de aprobar los proyectos y que decide cuales recibirán incentivos “especiales”.
Durante el pasado año, General Motors y su inmediato competidor Ford Motor comenzaron a producir vehículos en Tailandia y a exportarlos a diferentes partes del mundo.
En su factoría de Rayong, situada al este de Bangkok y en cuya construcción empleó US$ 643 millones, General Motors fabrica al año 40.000 vehículos del modelo “Zafira”, de los que destina 85% a la exportación, principalmente a los mercados de Europa y Australia.
Por su parte, Ford Motor ha invertido US$ 500 millones de dólares en la construcción de la planta donde ensambla turismos y un modelo de furgoneta de una tonelada, que en su mayor parte son exportados a América y Asia.
El fabricante alemán BMW inyectó el pasado año US$ 25 millones en la ampliación de sus instalaciones en Tailandia, donde anualmente fabrica 10.000 unidades de tres modelos de la serie 3, mientras compite con su eterno rival, Mercedes Benz.
En cuanto a la firma francesa Renault, propietaria de 38% de Nissan, ultima los preparativos para producir este mismo año en Tailandia, de donde se retiró en 1994, el modelo “Scenic”.
La española Seat, que a finales de la pasada década exploró la posibilidad de fabricar en Indonesia, comercializa en el país algunos de sus modelos a través de un distribuidor tailandés.
Las pioneras de la industria de la automoción en Tailandia fueron, sin embargo, las compañías japonesas, llegadas a partir de 1964.
Toyota, Honda, Nissan, Mitsubishi e Isuzu disponen de enormes fábricas y su radicación en Tailandia fue suficientemente atractiva para cientos de empresas niponas de componentes, que abrieron fábricas al lado de sus mayores clientes.
Los fabricantes japoneses amplían en la actualidad su capacidad de producción para prepararse de cara al mercado común que la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN) planea poner en marcha a partir de 2003.
La Asociación de la Industria de la Automoción de Tailandia calcula que en 2003 el país fabricará anualmente 800.000 vehículos y anticipa que al año siguiente la producción será de 1.155.000 unidades.
Las ventas de vehículos en los mercados de la ASEAN crecieron 44% durante el año 2000, o hasta un total de 1.091.296 unidades, según datos oficiales.
El país donde se registró un mayor índice de crecimiento en la venta de automóviles durante ese año fue Indonesia, con 298.633 unidades, que supusieron un aumento de 218% con relación a 1999.
Medido en porcentajes, siguieron la ciudad-Estado de Singapur, en el que se vendieron 84.889 vehículos de motor, con un alza de las ventas de 58%; y Tailandia, donde las 262.189 unidades vendidas marcaron un incremento de las ventas de 20% con respecto al año anterior.
En Malasia, las ventas aumentaron hasta las 343.173 unidades, 19% mas; y en Filipinas alcanzaron las 83.949 unidades, lo que supuso una suba de 13%.
Por el contrario, en Vietnam, con 13.957 unidades vendidas, se registró un descenso de 38%, mientras que en Brunei las ventas declinaron 3%, hasta los 5.133 vehículos.
General Motors, según recoge el estudio elaborado por “Concepto Este”, firma dedicada al asesoramiento de empresas españolas en Asia, calcula que en el año 2008, 29% de las ventas mundiales se realizaran en Asia, por encima de América del Norte y Europa juntas.