Cambiar para que nada cambie. Después de 16 años de control sueco –y con varios escándalos en las espaldas- Perez Companc volverá a ser dueña de Skanska metiendose devuelta en el negocio de los servicios petroleros.
La operación, según difundieron varios medios ayer, se pactó en $900 millones. Citibank actuó como agente de venta. Parece mucho pero si se tieen en cuenta la cotización el dólar en el país son menos de US$ 100 millones para una empresa que supera los $3.000 millones en ventas anuales.
¿Por qué la venta? Es claro que el caso de corrupción sacudió a la compañía en 2005 y ahora, salpicada también por el escándalo de Petrobras, busca desprenderse de su negocio. Desde agosto la filial de Skanska pasará a llamarse Pecom Servicios Energía.