Tras la operación, intermediada por Merrill Lynch, BSCH retiene apenas 2,6% del RBSG. Las entidades involucradas terminarán con directorios cruzados, si en efecto cuaja la toma de Abbey por parte de Santander (controlado por una familia, detalle que no cae bien en la City).
Entretanto, el BSCH continúa en pos de la autorización de la Comisión Europea, inevitable dado el monto en juego, US$ 15.490 millones. Surgen en este punto dos facetas. Una es que nadie sabe si el Banco Central Europeo emitirá opinión ante la CE: España está en la Eurozona, pero no Gran Bretaña, economia y plaza financiera mucho más relevantes que sus contrapartes hispánicas.
La otra es más complejo. Sucede que la cuarta entidad registrada en Londres, la Hongkong & Shanghai Banking Corporation, HSBC, abriga intenciones de cerrarle el paso a Emilio Botín. En otras palabras, estudia formular una oferta hostil.
También hay factores de otro orden. Así, el distanciamiento entre Santander y el RBCG pone fin a una sociedad que ha manejado proyectos de riesgo y cofinanciado fusiones. De hecho, Botín y un gerente suyo figuran en el directorio de la entidad escocesa, en tanto su presidente, George Mattheson, está en la junta del BSCH.
Tras la operación, intermediada por Merrill Lynch, BSCH retiene apenas 2,6% del RBSG. Las entidades involucradas terminarán con directorios cruzados, si en efecto cuaja la toma de Abbey por parte de Santander (controlado por una familia, detalle que no cae bien en la City).
Entretanto, el BSCH continúa en pos de la autorización de la Comisión Europea, inevitable dado el monto en juego, US$ 15.490 millones. Surgen en este punto dos facetas. Una es que nadie sabe si el Banco Central Europeo emitirá opinión ante la CE: España está en la Eurozona, pero no Gran Bretaña, economia y plaza financiera mucho más relevantes que sus contrapartes hispánicas.
La otra es más complejo. Sucede que la cuarta entidad registrada en Londres, la Hongkong & Shanghai Banking Corporation, HSBC, abriga intenciones de cerrarle el paso a Emilio Botín. En otras palabras, estudia formular una oferta hostil.
También hay factores de otro orden. Así, el distanciamiento entre Santander y el RBCG pone fin a una sociedad que ha manejado proyectos de riesgo y cofinanciado fusiones. De hecho, Botín y un gerente suyo figuran en el directorio de la entidad escocesa, en tanto su presidente, George Mattheson, está en la junta del BSCH.