Gazprom firmó un acuerdo con la Corporación nacional de gas y petróleo de China donde se definen las condiciones del suministro del gas ruso a este país por el “camino oriental”.
China busca asegurarse su demanda energética en aumento con nuevos acuerdos en Rusia y Asia Central. El nuevo presidente, Xi Jinping, estuvo presente este jueves en San Petersburgo junto a su homólogo, Vladímir Putin, en la firma de un memorándum largamente pospuesto con el gigante ruso Gazprom, que debe asegurarle un suministro de 68 millones de metros cúbicos de gas al año a través de dos vías diferentes. La firma se hizo entre los responsables de Gazprom y la compañía pública china CNPC.
El día antes, el propio Xi Jinping y la dirección de CNPChabían inaugurado un complejo de refinerías de gas en Turkmenistán construido entre ambos países. De aquí a 2020, Turkmenistán debe triplicar sus exportaciones a China hasta situarse en 65 millones de metros cúbicos anuales. Esta ex república soviética ya envía más metros cúbicos a China que a Rusia, en una competencia cada vez mayor con Moscú para aprovechar sus enormes reservas gasísticas.