Son todavía preliminares las conversaciones entre Allergan, fabricante del famoso Botox, y Pfizer, según informa esta mañana la edición americana de El País. Pero es el segundo intento de Pfizer de comprar un competidor europeo luego de fallar con AstraZeneca el año pasado luego de tres meses de negociaciones.
La combinación Pfizer-Allergan pasaría por delante de la hasta ahora empresas de salud más grande del mundo: Johnson & Johnson, que tiene una capitalización de mercado de UUS$ 277.000 millones.
La compra de Allergan permitiría a Pfizer reducir su abultada carga impositiva en Estados Unidos Allergan está domiciliada en Irlanda y paga anualmente impuestos equivalentes a 4,8% de sus ingresos. Pfizer, en Estados Unidos, paga 25m5%. Esa es una de las razones más poderosas detrás del intento de la norteamericana de comprar una rival europea.
Según comentarios que circulan entre los más allegados a las conversaciones, anexar Allergan no generaría tanto rechazo político en Estados Unidos como la adquisición de la británica GlaxoSmithKline, pues Alleran, a pesar de estar afincada en irlanda, es percibida todavía como norteamericana.
