¿Otro milagro gestado por la crisis sistémica en el tambaleante negocio automotor? Algo impensable hasta días atrás asoma en el horizonte: un acuerdo entre la ex socia de Chrysler, Daimler, y BMW. Sería otra vuelta de tuerca en una compañía cuya sigla, otrora, significaba también “British Motor Works”. <br />
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Estimulada por el caso Opel, la firma de Stuttgart avanza hacia su competidora muniquesa. Según medios alemanes, solo faltaría un comunicado formal conjunto, Pero, en Londres y París –donde Peugeot y Renault ya no duermen en paz-, creen que falta un tiempo para ese paso definitivo. <br />
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La clave del esquema es tecnológica, como sucede en el caso Fiat-Chrysler. Partiendo del canje de partes y componentes, en vigencia desde hace tres años, ambas empresas se encaminan a una alianza más amplia. En rigor, partirá de un convenio para fabricar vehículos ecológicos, tanto de precio normal (utilitarios Mercedes Benz) como de semi-lujo y en ambas marcas. <br />
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Dieter Zetsche –el mismo director ejecutivo que manejó la frustránea venta apalancada de Chrysler a Cerberus Capital Management- formulará el primer anuncio concreto, la semana entrante. Con un matiz de cautela: BMW y Daimler seguirán siendo sociedades autónomas en las primeras fases. <br />
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Parece que Daimler se acerca a BMW
Por un lado, la futura alianza Fiat-Chrysler no se contentará con tomar dos fragmentos de General Motors (Opel, Suzuki). Por otro, Daimler o sea Mercedes Benz- pone los ojos sobre su rival en el segmento de alto precio, Bayerische MotorWerke.
