Todo esto empezó con la muerte accidental de un camionero, en 2002. Ello ocurrió, según investigaciones oficiales, por fallas del vehículo, atribuibles a negligencias de control en planta. El problema fue ocultado por la fábrica de camiones y ómnibus, con complicidad del grupo MMC.
Los técnicos policiales detectaron, en efecto, fallas “congénitas” en el sistema de embrague. Luego se descubrió que MMC las conocía y estaban al tanto de sus riesgos desde 1996. Pero no se retiraron las unidades afectadas para repararlas o reemplazar los embragues.
Peor aún, Mitsubishi siguió ocultando el asunto mientras reparaba en secreto algunos camiones. No termina ahí la cosa. A raíz de un escándalo anterior con vehículos (hubo que retirar una partida entera en 2000), la firma falseó informes elevados al entonces ministerio de Transportes.
A diferencia de Kawasoe y otros cuatro ex ejecutivos, Usami ya había sido procesado por violaciones a la ley sobre vehículos comerciales, en relación con defectos en ruedas de camiones. En 2002, una taza saltó y mató a una mujer e hirió a sus dos hijos.
El problema básico de los embragues era que, al no ser lo bastante resistentes, podían quebrarse y trabar los frenos.
Todo esto empezó con la muerte accidental de un camionero, en 2002. Ello ocurrió, según investigaciones oficiales, por fallas del vehículo, atribuibles a negligencias de control en planta. El problema fue ocultado por la fábrica de camiones y ómnibus, con complicidad del grupo MMC.
Los técnicos policiales detectaron, en efecto, fallas “congénitas” en el sistema de embrague. Luego se descubrió que MMC las conocía y estaban al tanto de sus riesgos desde 1996. Pero no se retiraron las unidades afectadas para repararlas o reemplazar los embragues.
Peor aún, Mitsubishi siguió ocultando el asunto mientras reparaba en secreto algunos camiones. No termina ahí la cosa. A raíz de un escándalo anterior con vehículos (hubo que retirar una partida entera en 2000), la firma falseó informes elevados al entonces ministerio de Transportes.
A diferencia de Kawasoe y otros cuatro ex ejecutivos, Usami ya había sido procesado por violaciones a la ley sobre vehículos comerciales, en relación con defectos en ruedas de camiones. En 2002, una taza saltó y mató a una mujer e hirió a sus dos hijos.
El problema básico de los embragues era que, al no ser lo bastante resistentes, podían quebrarse y trabar los frenos.