La Iglesia continuó ayer con su serie crítica sobre la situación que vive actualmente la Argentina. Esta vez le tocó el turno a la Acción Católica Argentina (ACA), entidad de laicos de la Iglesia, que advirtió sobre el “peligro” de la desintegración “latente” en la sociedad, como consecuencia de la existencia de grupos “cada vez mayores” de excluidos del mundo del trabajo, la educación y privados de acceso a condiciones dignas de vida. La ACA lanzó su alerta en la jornada de clausura de la multitudinaria asamblea que realizó el fin de semana largo en San Juan. Anteanoche, el arzobispo sanjuanino Italo Di Stéfano, había aludido en público, desde un altar, a la posibilidad de que las carencias sociales eleven al máximo los choques violentos y aumenten la delincuencia. Mientras tanto, la ACA aprovechó el cierre de las deliberaciones en San Juan para pronunciarse en contra del aborto y para remarcar que las próximas elecciones presidenciales serán la oportunidad para “expresar con nuestro voto la necesidad de tener gobernantes que respeten la vida humana en toda su dimensión, desde la concepción y hasta la muerte natural”.
(La Prensa, Clarín)
La Iglesia continuó ayer con su serie crítica sobre la situación que vive actualmente la Argentina. Esta vez le tocó el turno a la Acción Católica Argentina (ACA), entidad de laicos de la Iglesia, que advirtió sobre el “peligro” de la desintegración “latente” en la sociedad, como consecuencia de la existencia de grupos “cada vez mayores” de excluidos del mundo del trabajo, la educación y privados de acceso a condiciones dignas de vida. La ACA lanzó su alerta en la jornada de clausura de la multitudinaria asamblea que realizó el fin de semana largo en San Juan. Anteanoche, el arzobispo sanjuanino Italo Di Stéfano, había aludido en público, desde un altar, a la posibilidad de que las carencias sociales eleven al máximo los choques violentos y aumenten la delincuencia. Mientras tanto, la ACA aprovechó el cierre de las deliberaciones en San Juan para pronunciarse en contra del aborto y para remarcar que las próximas elecciones presidenciales serán la oportunidad para “expresar con nuestro voto la necesidad de tener gobernantes que respeten la vida humana en toda su dimensión, desde la concepción y hasta la muerte natural”.
(La Prensa, Clarín)
