Con el nombre de Street 500 y Street 750 son totalmente negras, austeras y carentes de la aparatosidad en metal que ha hecho famosas a sus tradicionales motos.
La empresa las saca pensando en las mujeres, muchas de las cuales ya están manejando una Harley.
Llas mujeres representaron el año pasado 12% de las ventas de motos pesadas en Estados Unidos, según el Motorcycle Industry Council. Eso equivale a un aumento de 30% en la participación de mercado con respecto a la última década.
, si bien no publica el número de unidades vendidas a mujeres, dice que tiene 62% del mercado. Si esa cifra es correcta, alrededor de 7% de las motos hareley van a manos femeninas.
Efraim Levy, analista de S&P Capital IQ cree que Harley tiene una ventaja sobre sus competidores por el gran reconocimiento que tiene su marca. “Aunque una mujer no ande en moto, sabe lo que es una Harley”, dice.
El cambio de estrategia no ha sido fácil. Harley viene trabajando desde hace mucho para cultivar la preferencia del público femenino. Hace casi ocho años comenzó a organizar “fiestas de garaje, del tipo de aquellas organizadas por Tupperware en los 70 donde las mujeres se reunían para aprender algunas habilidades necesarias: cómo arrancar el motor y cómo levantar la moto si se cae. Más recientemente, los concesionarios comenzaron a dar instrucciones de manejo. La compañía tiene unas 10.000 mujeres en esos programas