Tras demoras iniciales, se suponía que las autoridades reguladores darían por registrada la acción a las cuatro de la tarde, el miércoles, en los paneles Nasdaq. Luego, la empresa definiría el precio de corte y, el jueves, se iniciaría la compraventa normal.
Ahora, la OPI debiera reunir US$ 1.900 millones, mucho menos que los 3.500 millones esperados al principio. En ese momento, Google estimaba un espectro de US$ 108 a 135 por acción. Ayer, los bajó y lo achicó a US$ 85-95. Todo esto embarra la cancha, crear dudas y genera resquemores.
Tras demoras iniciales, se suponía que las autoridades reguladores darían por registrada la acción a las cuatro de la tarde, el miércoles, en los paneles Nasdaq. Luego, la empresa definiría el precio de corte y, el jueves, se iniciaría la compraventa normal.
Ahora, la OPI debiera reunir US$ 1.900 millones, mucho menos que los 3.500 millones esperados al principio. En ese momento, Google estimaba un espectro de US$ 108 a 135 por acción. Ayer, los bajó y lo achicó a US$ 85-95. Todo esto embarra la cancha, crear dudas y genera resquemores.