(EFE).- La fusión de las acerías Nippon Kokan (NKK) y Kawasaki Steel, segunda y tercera mayores de Japón, hace presagiar posteriores alianzas en ese sector presionado por las fuertes reducciones de precios realizadas por la industria del motor.
Las dos empresas, con una producción combinada de 32 millones de toneladas anuales, que las acercará al líder japonés del sector Nippon Steel, anunciaron el pasado viernes que en la primera parte de 2002 se unirán través de una sociedad de cartera.
NKK, aliada de la siderúrgica argentina Siderca y de Tubos de Acero de México (TAMSA), ambas miembros del grupo argentino Techint, lleva a cabo desde el año pasado un plan de recorte de 4.000 puestos de trabajo en Japón, 13% de su plantilla.
La alianza es la primera que tiene lugar entre grandes firmas del sector en Japón desde la formación en 1970 de Nippon Steel -por la fusión de las siderúrgicas Yawata y Fuji-, y debido a sus conexiones multinacionales hace prever la reorganización de un sector dominado por firmas japonesas y europeas, dicen los expertos.
En enero de este año, Nippon Steel, la segunda mayor de siderurgia en el mundo, firmó un acuerdo estratégico con la francesa Usinor, la primera del ramo en Europa, para el suministro mutuo de láminas de acero utilizadas en la fabricación de automóviles, el desarrollo de productos y la creación de filiales en terceros países.
Mientras la francesa busca afianzar su posición en Asia, Nippon Steel espera aumentar su presencia en Europa, en donde fabricantes del motor como Toyota, Nissan y Mazda expanden sus respectivas producciones.
La producción europea de las empresas japonesas del motor en 1999 ascendió a 799.105 unidades, que sobre un total de 16.978.400 de vehículos contrasta con cuotas dominantes como la de Volskwagen, con 3.163.605 automóviles, y Peugeot, con 2.384.469.
Nippon Steel tiene un acuerdo de cooperación con la siderurgia surcoreana Pohang, la mayor del mundo, mientras que Usinor anunció una posterior fusión con Arbed de Luxemburgo y Aceralia de España, lo que situará la producción total en unos 100 millones de toneladas, según el diario económico local Nihon Keizai.
Fuentes del sector aseguran que NKK negocia una posible alianza con una siderúrgica alemana y ha consolidado ya un pacto con la estadounidense National Steel.
Kawasaki Steel, por su parte, busca aliarse con AK Steel Holding, también de Estados Unidos y, de materializarse sendos acuerdos, su producción combinada se elevaría a 60 millones toneladas.
Los beneficios de las acerías en el mundo se han visto reducidos por la reestructuración de los fabricantes del motor, que en el caso de Nissan significó un fuerte recorte de proveedores, y que se suma como factor a la ralentización de la economía estadounidense, el mayor mercado mundial del acero.
Nippon Steel, Sumitomo Metal y Kawasaki Steel rebajaron sus previsiones de beneficios netos consolidados para el año fiscal 2000, que terminó el 31 de marzo pasado.
Nippon Steel rebajó 12% su previsión hasta los US$ 183 millones, Sumitomo Metal bajó 33,3%, alcanzando US$ 25 millones y Kawasaki espera pérdidas netas consolidadas de US$ 158 millones.
Los expertos del sector consideran que en medio del estancamiento económico que atraviesa Japón y debido a la fuerte competencia originada por los fabricantes del motor, la industria siderúrgica local ha pasado de una época de rivalidad a una de cooperación.
(EFE).- La fusión de las acerías Nippon Kokan (NKK) y Kawasaki Steel, segunda y tercera mayores de Japón, hace presagiar posteriores alianzas en ese sector presionado por las fuertes reducciones de precios realizadas por la industria del motor.
Las dos empresas, con una producción combinada de 32 millones de toneladas anuales, que las acercará al líder japonés del sector Nippon Steel, anunciaron el pasado viernes que en la primera parte de 2002 se unirán través de una sociedad de cartera.
NKK, aliada de la siderúrgica argentina Siderca y de Tubos de Acero de México (TAMSA), ambas miembros del grupo argentino Techint, lleva a cabo desde el año pasado un plan de recorte de 4.000 puestos de trabajo en Japón, 13% de su plantilla.
La alianza es la primera que tiene lugar entre grandes firmas del sector en Japón desde la formación en 1970 de Nippon Steel -por la fusión de las siderúrgicas Yawata y Fuji-, y debido a sus conexiones multinacionales hace prever la reorganización de un sector dominado por firmas japonesas y europeas, dicen los expertos.
En enero de este año, Nippon Steel, la segunda mayor de siderurgia en el mundo, firmó un acuerdo estratégico con la francesa Usinor, la primera del ramo en Europa, para el suministro mutuo de láminas de acero utilizadas en la fabricación de automóviles, el desarrollo de productos y la creación de filiales en terceros países.
Mientras la francesa busca afianzar su posición en Asia, Nippon Steel espera aumentar su presencia en Europa, en donde fabricantes del motor como Toyota, Nissan y Mazda expanden sus respectivas producciones.
La producción europea de las empresas japonesas del motor en 1999 ascendió a 799.105 unidades, que sobre un total de 16.978.400 de vehículos contrasta con cuotas dominantes como la de Volskwagen, con 3.163.605 automóviles, y Peugeot, con 2.384.469.
Nippon Steel tiene un acuerdo de cooperación con la siderurgia surcoreana Pohang, la mayor del mundo, mientras que Usinor anunció una posterior fusión con Arbed de Luxemburgo y Aceralia de España, lo que situará la producción total en unos 100 millones de toneladas, según el diario económico local Nihon Keizai.
Fuentes del sector aseguran que NKK negocia una posible alianza con una siderúrgica alemana y ha consolidado ya un pacto con la estadounidense National Steel.
Kawasaki Steel, por su parte, busca aliarse con AK Steel Holding, también de Estados Unidos y, de materializarse sendos acuerdos, su producción combinada se elevaría a 60 millones toneladas.
Los beneficios de las acerías en el mundo se han visto reducidos por la reestructuración de los fabricantes del motor, que en el caso de Nissan significó un fuerte recorte de proveedores, y que se suma como factor a la ralentización de la economía estadounidense, el mayor mercado mundial del acero.
Nippon Steel, Sumitomo Metal y Kawasaki Steel rebajaron sus previsiones de beneficios netos consolidados para el año fiscal 2000, que terminó el 31 de marzo pasado.
Nippon Steel rebajó 12% su previsión hasta los US$ 183 millones, Sumitomo Metal bajó 33,3%, alcanzando US$ 25 millones y Kawasaki espera pérdidas netas consolidadas de US$ 158 millones.
Los expertos del sector consideran que en medio del estancamiento económico que atraviesa Japón y debido a la fuerte competencia originada por los fabricantes del motor, la industria siderúrgica local ha pasado de una época de rivalidad a una de cooperación.