(EFE).- La empresa japonesa Honda anunció hoy (miércoles 11), que más de 113.000 automóviles y furgonetas ligeras tienen un problema de motor, que en el peor de los casos puede producir incendios, informó la firma.
Honda reparará unos 88.600 vehículos con ese defecto vendidos en Japón, pero se atendrá a lo que estipulen las regulaciones locales para otros 25.000 autos comercializados en Europa, 20.900 de ellos en Alemania.
Según la empresa automovilística, el fallo afecta a un total de cinco modelos, entre los que están el Integra y el Civic, y subsanarlo tendrá un costo de unos 750 millones de yenes (US$ 6 millones).
Los modelos afectados fueron fabricados entre junio de 1993 y diciembre de 1995 y hasta el momento no ha habido accidentes relacionados con el problema, asegura la empresa.
Honda anunció que realizaría estas reparaciones después de que sus acciones registraran un fuerte avance de 4,2% en la sesión bursátil de hoy gracias a las positivas perspectivas que se abren para las empresas japonesas orientadas a la exportación a causa de la debilidad del yen.
(EFE).- La empresa japonesa Honda anunció hoy (miércoles 11), que más de 113.000 automóviles y furgonetas ligeras tienen un problema de motor, que en el peor de los casos puede producir incendios, informó la firma.
Honda reparará unos 88.600 vehículos con ese defecto vendidos en Japón, pero se atendrá a lo que estipulen las regulaciones locales para otros 25.000 autos comercializados en Europa, 20.900 de ellos en Alemania.
Según la empresa automovilística, el fallo afecta a un total de cinco modelos, entre los que están el Integra y el Civic, y subsanarlo tendrá un costo de unos 750 millones de yenes (US$ 6 millones).
Los modelos afectados fueron fabricados entre junio de 1993 y diciembre de 1995 y hasta el momento no ha habido accidentes relacionados con el problema, asegura la empresa.
Honda anunció que realizaría estas reparaciones después de que sus acciones registraran un fuerte avance de 4,2% en la sesión bursátil de hoy gracias a las positivas perspectivas que se abren para las empresas japonesas orientadas a la exportación a causa de la debilidad del yen.