jueves, 21 de noviembre de 2024

En la carrera por encontrar “la vacuna” participan contendientes de todo el mundo

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Miles de investigadores en más de 12 países están trabajando en más de 130 programas de desarrollo de vacunas. Pero no se sabe si alguno de esos proyectos dará frutos.

Alemania ya tiene su “candidata”. Así la llaman en la compañía biofarmacéutica Curevac porque su nombre científico es impronunciable: CvnCoV. La candidata fue creada en un laboratorio robóticamente automatizado dentro de un aparato no más grande que una heladera. Ya hay millones de dosis listas para iniciar la primera fase de pruebas clínicas. Según informa Der Spiegel Internacional. Berlín invertirá 300 millones de euros en Curevac y decidió que 23% de la compañía sea controlada por el gobierno.

Una vez que haya una vacuna funcionando, o varias, que sean aprobadas en todo el mundo, harán falta unos 6.000 millones de dosis. O el doble de eso si hacen falta refuerzos para lograr inmunidad.

Eso significa, dice el equipo que desarrolla este tema en Der Spiegel, que no va a ser posible satisfacer inmediatamente esa demanda. En el mejor de los casos, puede llevar años producir y repartir la cantidad necesaria de vacunas. Entonces hay que hacerse tres preguntas: cuándo va a estar lista, quién la recibe primero y quién decide.

El problema se pone en evidencia, dicen, con el misterioso ascenso de Moderna, la compañía de biotecnología estadounidense. La pequeña compañía con sede en Boston, no ha lanzado un solo producto en sus casis 10 años de existencia, pero actualmente tiene un valor bursátil de US$ 23.000 millones. Cuando hace muy poco anunció el éxito inicial de su vacuna experimental mRNA-1273 en solamente ocho voluntarios el precio de sus acciones se disparó y subió casi 4% en el índice Dow Jones.

Según los autores de la nota, el futuro de la economía global se está decidiendo en los laboratorios de los fabricantes de vacunas, donde también se decidirá quién participa de la riqueza y quién no.

El enfrentamiento EE.UU.- China

En ambos países laboratorios rivales corren una carrera multimillonaria para desarrollar la primera vacuna. Tanto Trump como Xi Jinping saben muy bien que quien lo logre primero también será el primero en salir de la crisis, tal vez más fuerte que antes.

Trump sabe muy bien que cuenta con poderosos batallones para mandar a la batalla por la vacuna. Tiene los mejores y más poderosos laboratorios de la industria farmacéutica. Tiene a Pfizer, Johnson&Johnson y Merck, todos con ingresos de más de US$ 40.000 millones en 2019.

Pero también sabe que solo podrá derrotar el coronavirus con ayuda de China, porque los ingredientes básicos para cualquier droga se fabrican casi en su totalidad en China y en India desde hace diez años.

Nadie está preparado para los conflictos que van a surgir sobre distribución y justicia, internacionales y dentro de cada país, por la escasez de la vacuna. Es de suponer que los ricos, los poderosos y los egoístas van a imponerse, como siempre. A menos que todas las partes involucradas decidan de antemano las reglas básicas sobre quién tiene acceso a la vacuna, cuándo y por qué.

Miles de investigadores en más de 12 países están trabajando en más de 130 programas de desarrollo de vacunas. Hay más de 10 compañías farmacéuticas e instituciones gubernamentales que ya están haciendo pruebas con humanos en Estados Unidos, China, pero también Gran Bretaña, Australia y Alemania. Nunca antes se había logrado tanto en tan poco tiempo. Hace apenas 8 meses este virus no se conocía. Pero no se sabe aun si alguno de esos proyectos dará frutos.

El desarrollo de vacunas siempre fue muy largo , muy caro y muy riesgoso. Si aunaran esfuerzos los países podrían minimizar el riesgo, pero hay una dificultad crónica para trabajar en conjunto. Cuando las cosas se ponen mal, hasta los estados amigos se vuelven egoístas. Desaparece la solidaridad global y el respeto por los contratos existentes o las cadenas de suministro. No hay razón para creer que los países vayan a actuar de manera diferente en lo que respecta a la vacuna.

 

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