El Ministerio del Interior respondió afirmativamente al pedido del juez federal Carlos Soto Dávila y envió anoche 350 efectivos de la Gendarmería Nacional a Corrientes para garantizar el desalojo de la Legislatura provincial, tomada desde el miércoles por un grupo de militantes del oficialista Partido Nuevo, y para restablecer el orden en la ciudad. Antes, trabajadores estatales -que reclaman desde hace varios días el pago de haberes atrasados- y manifestantes del oficialismo que se disponían a dejar la Legislatura protagonizaron serios incidentes. Los estatales, acompañados por un grupo de estudiantes, reclamaban la renuncia del intendente de la ciudad de Corrientes, Raúl Romero Feris, cuando chocaron con el grupo de “defensores” del ex gobernador. Hubo desde piedras hasta disparos de balas de goma y gases lacrimógenos por parte de la Policía. Dos personas resultaron heridas, una de ellas de arma blanca en una pierna.
El Ministerio del Interior respondió afirmativamente al pedido del juez federal Carlos Soto Dávila y envió anoche 350 efectivos de la Gendarmería Nacional a Corrientes para garantizar el desalojo de la Legislatura provincial, tomada desde el miércoles por un grupo de militantes del oficialista Partido Nuevo, y para restablecer el orden en la ciudad. Antes, trabajadores estatales -que reclaman desde hace varios días el pago de haberes atrasados- y manifestantes del oficialismo que se disponían a dejar la Legislatura protagonizaron serios incidentes. Los estatales, acompañados por un grupo de estudiantes, reclamaban la renuncia del intendente de la ciudad de Corrientes, Raúl Romero Feris, cuando chocaron con el grupo de “defensores” del ex gobernador. Hubo desde piedras hasta disparos de balas de goma y gases lacrimógenos por parte de la Policía. Dos personas resultaron heridas, una de ellas de arma blanca en una pierna.