En 2024, la balanza bilateral con Brasil terminó con un rojo de US$ 308 millones, que marca una mejora sustancial si se lo compara con el déficit de US$ 4,714 millones acumulado en 2023. Por su parte, en diciembre, Argentina registró un leve déficit con Brasil de US$ 52 millones, la sexta cifra negativa en el año.
La reducción del déficit se explica principalmente por una caída de los valores importados en US$ 2,821 millones a US$ 13,891 millones (-16,9% vs 2023), mientras que las exportaciones contribuyeron con una suba de US$ 1,585 millones (+13,2%). Cabe destacar que en la caída de las importaciones por US$ 2,821 millones, más de la mitad estuvo explicado por la merma en las importaciones de soja (US$ 1.938 M) tras la normalización post sequía, en tanto US$ 265 millones tuvieron que ver con la reducción de las compras de energía eléctrica. En el resto de los rubros sin dudas incidió fundamentalmente la recesión argentina en la primera parte del año, aunque ya se observa una recuperación de los flujos de importación al compás del repunte del nivel de actividad.
De hecho, en diciembre, las importaciones desde Brasil totalizaron de US$ 1.295 millones marcando una suba de 55,5% contra igual mes de 2023, lo cual continúa la racha de crecimiento que arrancó en el mes de noviembre y acumulando así en los últimos cuatro meses del año una suba interanual de 31,7%.
En particular cabe destacar la fuerte tracción que proveyeron las importaciones automotrices ya que los principales componentes de este rubro mostraron fuertes subas: los vehículos de carretera crecieron un 290,5% anual en dicho mes, a US$ 45,9 millones, mientras que los vehículos automotores para transporte de mercancías aumentaron un 264,1% a US$ 87,0 millones, y los vehículos automotores de pasajeros crecieron de USD 87,7 M en dic-23 a US$ 243,8 millones en el último mes del año pasado (un 178,1%). En menor medida, las importaciones de partes y accesorios de vehículos automotores crecieron un 25,2% anual (a US$ 125,4 millones). Estos movimientos, en su agregado, reflejan la recuperación del comercio bilateral entre ambos países tras fuertes restricciones a las importaciones en el último trimestre de 2023, lo cual puede verse en el fuerte rebote de estos rubros en el acumulado anual: vehículos utilitarios crecieron un 61,0%, vehículos de pasajeros un 54,0% acumulado, y vehículos de carretera un 59,8% entre enero y diciembre de 2024.
En cuanto a las exportaciones argentinas a Brasil las mismas alcanzaron los US$ 1.243 millones en el último mes del año, mostrando una suba del 40,0% anual y cerrando siete meses de subas consecutivas. Con todo el año 2024 registró un alza de las exportaciones totales de la Argentina a Brasil de 13,2% contra el año previo.
Entre los productos de mayor participación en el total, la dinámica fue heterogénea:
- Primero, el sector automotriz también mostró una suba significativa en sus ventas durante el último mes del año, con expansiones significativas en vehículos automotores de pasajeros (+132,6% interanual), llegando a US$ 331,7 millones, un 27% de las exportaciones totales, así como en vehículos automotores para transporte de mercancías que creció un 15,2% anual (US$ 255,5 millones). En el acumulado del año, las exportaciones automotrices mostraron un buen dinamismo, con una suba de 25,3% en vehículos de transporte de mercancías (US$ +620 millones), y de 7,0% en vehículos de pasajeros (US$ +111 millones).
- En tanto, el sector energético mostró también un buen desempeño, con una suba de 3.869,7% en las exportaciones de energía eléctrica, que totalizaron US$ 14,9 millones (un 1,2% del total, versus casi un 0% en 2023).
- Finalmente, el agro mostró un desempeño generalmente firme, aunque con segmentos específicos menos dinámicos: las ventas de trigo y centeno sin moler a Brasil crecieron un 17,8% en diciembre (US$ 93,8 millones), cerrando el año con una suba de 39,4% anual y aportando US$ 1.050 M a las ventas totales (US$ +297 vs. 2023). Por el contrario, el rubro de leche y lácteos mostró una baja de 3,9% anual, totalizando US$ 34,4 millones en dic-24.
Perspectivas 2025
Para 2025 se espera que el déficit bilateral se amplifique significativamente y que supere los US$ 3,000 millones con importaciones que difícilmente crezcan menos del 30% (a US$ 18.500 millones como piso) y exportaciones subiendo, pero menos (+12% a cerca de US$ 15.500 millones).
Sin dudas la recuperación de la actividad, el consumo y la inversión en la Argentina será un factor crucial en el aumento del déficit comercial bilateral en un contexto en que siempre estructuralmente somos deficitarios con Brasil, y es de esperar un rebote importante de las importaciones en general y del país vecino en particular, en un contexto de eliminación del impuesto baja del impuesto país y un peso argentino que se ha apreciado significativamente frente al real brasileño.
De hecho, las tensiones de origen fiscal en Brasil que están llevando a un fuerte debilitamiento de la moneda brasileña podría exacerbar aún más el aumento del déficit comercial bilateral. Es que la depreciación del real brasileño juega a favor de un saldo comercial más favorable a Brasil al aumentar la competitividad brasileña.
Además, si la demanda interna de Brasil se debilita más de la cuenta (en reacción por ejemplo a una suba de la tasa Selic mayor a la esperada para controlar la inflación, lo cual no puede descartarse), la reacción será tratar de colocar saldos excedentes en el exterior, lo cual se le podría ver facilitado a Brasil en 2025 considerando que las expectativas de crecimiento para la Argentina se arriman al 5% y encima el peso se fortalece frente al dólar (lo que significa que el peso se fortalece aún más contra el real).
Sin dudas, que el nivel de actividad en Brasil no sufra más de la cuenta es la variable que más preocupa por cuanto la actividad económica termina siendo siempre la variable más determinante (más que el tipo de cambio y los precios en el corto plazo) al momento de explicar los flujos de comercio intra-Mercosur.
