<p>El gesto resalta hasta qué punto naftas a US$ 1,05 el litro pesan en la campaña electoral norteamericana. No es casual que un creciente número de legisladores republicanos –ligados al cabildeo de las petroleras- coincida con el presidente y su vice, Richard Cheney. <br />
<br />
Fiel al jefe, pese a que su imagen depende de distanciarse, el senador John McCain, candidato oficialista eligió Houston –nada menos- para revertir su antigua posición y declararse en favor de las perforaciones “off shore”. Esto irrita a los ambientalistas, que lo consideraban un aliado. <br />
<br />
Aun antes de trascender la decisión presidencial, el tema protagonizaba un encendido debate. McCain intentó lo imposible, puentear la brecha entre los ecologistas y el negocio petrolero, mientras soporta acusaciones de su oponente, el senador Barack Obama. Éste sostiene que su rival ha capitulado ante un “lobby” poderoso, manejado por Cheney. <br />
<br />
En realidad, Bush y Cheney vienen abogando desde hace tiempo por liberar la mayor reserva nacional de vida silvestre (Alaska) a ese tipo de perforaciones. En 2006, el mandatario firmó –con apoyo de su colega azteca- una ley que amplía las explotaciones en el golfo de México. Curiosamente, el tópico divide a la familia. Por ejemplo, en 1990 George W.H.Bush suscribió una moratoria ejecutiva a las perforaciones costeras. <br />
<br />
Con los crudos tejanos ligeros sobre los US$ 130 el barril y sin techo para el precio de la nafta. Bush, un empresario petrolero que saltó a la gobernación de Tejas y de ahí a la Casa Blanca (merced a un fraude armado en Florida por su hermano Jeb) atado al sector, no quiere dejar el gobierno en medio de una crisis de hidrocarburos. Parece demasiado pedir. <br />
Nadie sabe exactamente cuánto crudo y gas natural hay en las zonas vedadas. Según el departamento federal de energia y combustibles, la cifra oscila alrededor de los 16.000 millones de barriles; o sea, la mitad de los nuevos hallazgos brasileños. <br />
Bush tercia de pronto en la campaña electoral, apoyando a McCain, el converso. Pero eso deja al senador expuesto al argumento favorito de los demócratas: si gana, será un Bush redivivo y Bush es el presidente de menor prestigio desde Richard M.Nixon. Verbigracia, Henry Reid –líder opositor del senado-, identifica a Bush y McCain como “clones de Cheney, un viejo obsedido con las perforaciones costeras. Pero no hay en el país hidrocarburos suficientes para cubrir nuestras necesidades”. <br />
<br />
La primera moratoria “off shore” la dictó el congreso en 1982 y viene renovándose año a año. Prohíbe perforar en casi toda la plataforma epicontinental, de tres a 200 millas de las costas estadounidenses. Desde 1990, se complementa con una orden ejecutiva. En 1998, William J.Clinton prorrogò ambas vedas hasta 2012. Obviamente, Bush no puede esperar cuatro años. </p>
<p><br />
</p>
Bush planea un regalo de despedida a las petroleras: el off shore
George W.Bush busca dar vuelta políticas de hace veintiséis años y pedirá al congreso eliminar la veda federal a perforaciones en la plataforma epicontinental. Sugestivo apuro, a apenas siete meses de marcharse.