El gigante petrolero angloholandés y el líder aleman de la industria química negocian con Haldia Petrochemicals (Calcuta, Bengala occidental) la venta de Basell, una sociedad neerlandesa compartida cofundada por las dos primeras en 2000.
En realidad la operación involucraun trueque, por el cual los indios transferirán a Shell-Basf una firma que provee insumos para procesos de fabricación de artículos domésticos. En otro plano, Haldia cuenta con respalndo financiero de Purnendu Chatterji (del grupo homónimo) y el ruso Lyeonid Blavátnik (Access Industries).
Haldia superó ofertas rivales. En particular, una de la estatal iraní National Petrochemical. En su caso, pudo haber habido problemas políticos y diplomáticos, pues Estados Unidos prohíbe que Irán controle activos en su territorio y Basell tiene una planta de Luisiana.
No es para menos, tratándose del mayor productor mundial de polipropileno. Este material se emplea en fabricar botellas, envases para a alimentos y bebidas, juqguetes, bolsas y unas larga lista de rubros. En verdad, Washington logró que Baseel aceptase desprenderse de la unidad en Luisiana, aunque luego apareció el comprador indio.
Sea como fuere, persiste un manto se secretos. Así, se ignora aún el monto exacto de la transacción (todos lo estiman en alrededor de US$ 5.000 millones) ni los estados financieros de Basell. No obstante, la suma citada es consistene con una empresa que tiene más de 4.000 clientes en 120 países e ingresos (o ventas) anuales por US$ 8.600 millones.
El gigante petrolero angloholandés y el líder aleman de la industria química negocian con Haldia Petrochemicals (Calcuta, Bengala occidental) la venta de Basell, una sociedad neerlandesa compartida cofundada por las dos primeras en 2000.
En realidad la operación involucraun trueque, por el cual los indios transferirán a Shell-Basf una firma que provee insumos para procesos de fabricación de artículos domésticos. En otro plano, Haldia cuenta con respalndo financiero de Purnendu Chatterji (del grupo homónimo) y el ruso Lyeonid Blavátnik (Access Industries).
Haldia superó ofertas rivales. En particular, una de la estatal iraní National Petrochemical. En su caso, pudo haber habido problemas políticos y diplomáticos, pues Estados Unidos prohíbe que Irán controle activos en su territorio y Basell tiene una planta de Luisiana.
No es para menos, tratándose del mayor productor mundial de polipropileno. Este material se emplea en fabricar botellas, envases para a alimentos y bebidas, juqguetes, bolsas y unas larga lista de rubros. En verdad, Washington logró que Baseel aceptase desprenderse de la unidad en Luisiana, aunque luego apareció el comprador indio.
Sea como fuere, persiste un manto se secretos. Así, se ignora aún el monto exacto de la transacción (todos lo estiman en alrededor de US$ 5.000 millones) ni los estados financieros de Basell. No obstante, la suma citada es consistene con una empresa que tiene más de 4.000 clientes en 120 países e ingresos (o ventas) anuales por US$ 8.600 millones.
