Como carta de presentación, Abastia tiene algunas. Puede ostentar, por ejemplo, una inversión inicial de US$ 1 millón (y una proyección de ventas de alrededor de US$ 50 millones durante el 2015) o su premio como ganadores de la última edición de Startup Chile. Pero sus fundadores no quieren darle aire a estas variables que, de por si, son importantes: lo que importa, dicen, es el proyecto. Y la propuesta, de cara el cliente, es bastante simple: quieren hacerlo gastar menos eliminando intermediarios.
Con algo de ayuda de mis amigos
¿Qué significa esto de matar al intermediario? Abastia pretende resolver la gestión de compra de empresas y negocios en todo el país con entrega en más de 1.500 destinos a nivel nacional, informando en tiempo real el estado del envío. Se vale de un catalogo bastante impresionante, de más de 10.000 artículos que van desde los certíficados de firma hasta la medicina laboral, pasando por servicios de limpieza y hasta servicios no productivos como el soporte informático.
Si como dice el refrán, el que mucho agarra poco aprieta, Abastia quiere salirse de este chaleco de fuerza con algo de ayuda de sus socios estratégicos que son pesos pesados como Andreani, Deloitte, Adecco y BSA Group.
En palabras de Guillermo Morro, su CEO y fundador: “Abastia elimina la intermediación en la cadena de abastecimiento indirecto solucionando los vicios estructurales arraigados a nivel global que impiden a las empresas comprar pequeñas cantidades de productos a precio de fábrica. Abastia resuelve este problema bajando sustancialmente los precios,mediante la agregación de las órdenes de compra y negociando con las fábricas los mejores precios para sus clientes. Garantiza la total transparencia de la operatoria al exhibir los precios de compra en fábrica, mediante un modelo de facturación eficiente.”
“Este servicio es único en el sentido que nuestro modelo es un blend de soluciones que resuelve distintos problemas. Por un lado el outosourcing de compra, que ya existe, y por otro lado la compra asociativa. Lo que hacemos nosotros es ser la tercera parte que hasta ahora la compra asociativa no tenía. Nosotros hacemos que las empresas, sin que tenga que tener una relación entre sí, puedan comprar a precio de fabrica a través de Abastia al sumar nosotros los pedidos y aumentar el volúmen de compra”, agrega el CEO.
Desde la compañía explican que la transparencia se logra mediante la facturación del tipo liquído-producto, que permite garantizarle al cliente que el precio de fábrica al que se compra la mercadería es el mismo que recibe el comerciante. La empresa cobra una comisión sobre el ahorro del cual se beneficia el cliente. “Nosotros tomamos como referencia la lista de precios del cliente, por ejemplo, paga X cantidad de pesos por ésta canasta y lo comparamos contra nuestros precios que intentamos que sean mejores gracias a nuestros negociadores. Luego a partir de esa diferencia cobramos una comisión”, explica Guillermo Morro. “Construimos una relación de confianza basada en un modelo ganar-ganar, donde nuestra compañía gana sólo si nuestro cliente gana” explica y agrega que “hay que seguir evangelizando a los empresarios para que mejoren su cultura estratégica de compra” porque “la desintermediación es un fenómeno global y creemos que ya le llegó la hora al abastecimiento indirecto” concluye.
El servicio funciona mediante la realización de pedios bajo la modalidades canasta de compras, luego se recibe una cotización dentro de las 72 horas hábiles y los productos dentro de los siguientes 30 días, mediante una entrega consolidada, puerta a puerta, en todo el país a través de Andreani. Además, el servicio no contempla obligaciones contractuales, ni membresías y no tiene pagos por adelantado, evitando los costos ocultos, pudiendo así realizarse una venta recurrente o spot eventual.