Wall Street: inexplicable estallido, pero sin euforia
Tras saber que fueron detenidos miembros de la familia Rigas, responsables del escándalo Adelphia, los operadores neoyorquinos se lanzaron a comprar casi cualquier acción que pareciese barata.
En un par de horas, el índice Dow Jones industrial experimentó 6,35% de alza y quedó apenas sobre el nivel del viernes 19 (que entonces se consideraba catastrófico).
Con los gurúes en cauto silencio, algunos fondos admitían que la razón técnica residía en el Standard & Poor’s 500, la cartera más influyente en escala global. Ocurre que, con este indicador en el piso de cinco años (cierre del martes), virtualmente todas las cotizantes de los otros paneles eran bicocas. Salvo ese 40% de empresas que venía salvándose del largo descarrilamiento sufrido este año.
“Quien compre ahora y aguante un año, tal vez quede gratamente sorprendido a mediados de 2003”, llegó a opinar un analista de Crédit Suisse Asset Management, una cartera de US$ 57.000 millones. “Aunque quede bastante por recobrar de lo perdido en 2002 –prosiguió-, los valores reales o constantes están a niveles de hace veinte años. Por tanto, hay amplio margen de avance”.
El S&P 500 subió 5,73% (valor al día 19, también). El Nasdaq compuesto, 4,98%,o sea al nivel del lunes. Esta madrugada, todos los ojos estaban puestos en Europa occidental, donde ayer Londres perdió 2,1% pero Fráncfort ganó 3,30%.
Además del arresto múltiple en el caso Adelphia, hubo acuerdo parlamentario para aumentar penas por fraudes y abusos de confianza en el sector privado, Esto hace suponer al mercado que, quizá, la brutal ola de revelaciones y escándalos esté por terminar. No así, empero, sus efectos jurídicos, económicos y políticos.
En un par de horas, el índice Dow Jones industrial experimentó 6,35% de alza y quedó apenas sobre el nivel del viernes 19 (que entonces se consideraba catastrófico).
Con los gurúes en cauto silencio, algunos fondos admitían que la razón técnica residía en el Standard & Poor’s 500, la cartera más influyente en escala global. Ocurre que, con este indicador en el piso de cinco años (cierre del martes), virtualmente todas las cotizantes de los otros paneles eran bicocas. Salvo ese 40% de empresas que venía salvándose del largo descarrilamiento sufrido este año.
“Quien compre ahora y aguante un año, tal vez quede gratamente sorprendido a mediados de 2003”, llegó a opinar un analista de Crédit Suisse Asset Management, una cartera de US$ 57.000 millones. “Aunque quede bastante por recobrar de lo perdido en 2002 –prosiguió-, los valores reales o constantes están a niveles de hace veinte años. Por tanto, hay amplio margen de avance”.
El S&P 500 subió 5,73% (valor al día 19, también). El Nasdaq compuesto, 4,98%,o sea al nivel del lunes. Esta madrugada, todos los ojos estaban puestos en Europa occidental, donde ayer Londres perdió 2,1% pero Fráncfort ganó 3,30%.
Además del arresto múltiple en el caso Adelphia, hubo acuerdo parlamentario para aumentar penas por fraudes y abusos de confianza en el sector privado, Esto hace suponer al mercado que, quizá, la brutal ola de revelaciones y escándalos esté por terminar. No así, empero, sus efectos jurídicos, económicos y políticos.
