Según el estudio de PwC “Global Entertainment & Media Outlook 2020–2024”, la pandemia ha acelerado y amplificado los constantes cambios visibles en el comportamiento de los consumidores, promoviendo la disrupción digital y generando, en algunos casos, puntos de inflexión que no se hubieran alcanzado por muchos años.
La digitalización, una de las fuerzas dominantes en todas las industrias, se ha visto acentuada por el distanciamiento social y las restricciones de movilidad impuestos en 2020 y como resultado, la actividad de medios y entretenimientos se ha vuelto más remota, virtual, con mayor contenido de “streaming”, más personal y, al menos por ahora, con mayor foco en el hogar que lo anticipado a principios de año.
El crecimiento se contrajo
En medio de una recesión mundial, 2020 será testigo de la mayor caída en los ingresos globales de la industria de Entretenimientos y Medios en 21 años del informe de PwC, con una disminución del 5,6% con respecto a 2019 y más de US$ 120 mil millones en términos absolutos. En 2009, el último año en que la economía mundial se contrajo, el gasto total mundial en esta actividad sólo cayó un 3%.
Ariel Vidán, socio de PwC Argentina líder de la industria de Medios y Entretenimientos comenta, “mientras la caída observada en 2020 continuará afectando la economía mundial, las proyecciones muestran que la tendencia a largo plazo en este sector sigue siendo de un sólido crecimiento. En los últimos años, a medida que los medios fueron tomando posiciones de mayor relevancia en nuestras vidas, el crecimiento global de la industria ha superado al PIB” y continuó, “en 2021, el gasto en Entretenimientos y Medios se estima crecerá 6,4%. Si observamos el período de proyección de cinco años, de 2019 a 2024, la tasa anual compuesta de crecimiento de los ingresos (TCAC) se estima será de 2,8%”.
Al igual que en la economía, los problemas en la industria de Entretenimientos y Medios no se distribuyen de manera equitativa en los distintos segmentos, resultando más profundos en aquellos que, debido a COVID-19, literalmente cerraron. Tal es el caso de la música en vivo, cine y ferias comerciales. De igual manera, el segmento de publicidad se estima sufrirá una contracción del 13,4% y la prolongada transición de los periódicos del formato impreso al digital se ha adelantado varios años, recortando de manera significativa los ingresos de impresión.
Otra de las consecuencias de la pandemia es que algunos segmentos han adelantado significativamente los cambios previstos. Un ejemplo de ello está dado por la taquilla de cine y su evolución frente al modelo de suscripción de video bajo demanda (SVOD).
En 2015, la recaudación de cine triplicaba el sistema SVOD, mientras que este año los ingresos de este último superarán los de taquilla y se prevé que aumenten en los próximos cinco años hasta duplicarlos en 2024. Observamos en el mismo sentido un aumento significativo del volumen de datos consumidos en teléfonos inteligentes en comparación con los datos de banda ancha fija. Dicha tendencia se profundizará en los próximos años y llevará al teléfono inteligente a constituirse en el dispositivo de preferencia utilizado por los consumidores para acceder a internet.
Vencedores y vencidos … ¿De qué forma se materializan los cambios acelerados por la pandemia en diferentes segmentos de la industria?
Con una gran cantidad de gente que permanece en sus hogares, los ingresos por servicios de video (OTT) han crecido 26% en 2020, y se espera que mantengan la misma tendencia en los próximos años, casi duplicando los ingresos observados en 2019 (US$ 46.400 millones) para llegar a US$ 86.800 millones en 2024 según las estimaciones. El lanzamiento del servicio de transmisión de Disney + a finales de 2019 no podría haber llegado en mejor momento: con una proyección entre 60 millones y 90 millones de abonados para 2024, esta plataforma alcanzó los 60,5 millones a principios de agosto de 2020.
Como era de esperar, el incremento de los servicios de “streaming” hizo que el consumo global de datos sea otro de los segmentos beneficiados por la aceleración digital disparada por la pandemia. El mismo verá un aumento de 33,8% en 2020 y duplicará su valor actual en 2024.
En el otro extremo están los segmentos que se han visto negativamente afectados. Dado el cierre de las salas de cine y la postergación de los estrenos, se prevé que los ingresos por taquilla se desplomarán por encima del 60% este año, y es posible que el terreno perdido no se recupere en el mediano plazo. Para 2024, la proyección muestra que los ingresos globales estarán por debajo del nivel de 2019 fuertemente influenciados por la evolución en Estados Unidos y Europa.
Otro impacto notable es la disminución del consumo de diarios y revistas con una caída de los ingresos totales de más del 14%. En este rubro la alternativa digital presenta un lado brillante: en 2023 los ingresos globales por publicidad digital superarán a los de publicidad impresa. Otros sectores significativos de la industria también enfrentarán dificultades para recuperar el crecimiento que no tuvieron en 2019. Por ejemplo, no se espera que el sector publicitario global, cuyos ingresos se reducirán 13,4% en 2020, vuelva a su nivel de 2019 antes de 2022.
Reconfiguración de la industria
Quizás de manera contraria a las expectativas, algunos medios de comunicación “tradicionales” se han mantenido firmes durante la pandemia y la aceleración digital impulsada por esta última. En medio de reportes que dan cuenta del auge de las ventas de libros durante la cuarentena, se prevé que los ingresos totales de libros de consumo a nivel mundial continúen en ascenso a una tasa compuesta anual de 1,4% entre 2019 y 2024, para llegar a US$ 64.700 millones.
Asimismo, la tecnología mantiene un papel importante en este aspecto. El uso cada vez más frecuente de teléfonos y altavoces inteligentes fomenta la venta de audiolibros y acceder a ellos de manera remota y en situaciones que antes no resultaban posibles.
“El segmento de eventos en vivo es otro de los que busca adaptarse a la realidad de un mundo más digitalizado. Con salas de conciertos, centros de exposiciones y estadios cerrados durante gran parte del año, algunos eventos utilizan plataformas digitales para mantenerse conectados con su público. En el Reino Unido, el Wireless Festival de Londres se asoció con el equipo de tecnología “MelodyVR” a mediados de 2020 para ofrecer espectáculos grabados de realidad virtual de artistas. Más de 130.000 personas de 34 países asistieron de forma virtual”, comenta el socio de PwC Argentina.
Aunque 2020 está resultando un año por demás desafiante y disruptivo para la mayoría de las industrias, incluida la de Entretenimientos y Medios, es evidente que la demanda de los consumidores por la variedad y las opciones de contenido continúa creciendo.
Si bien los ingresos del presente año para los diversos segmentos de la industria reflejan la recesión económica y la aceleración digital, las perspectivas a largo plazo para la industria de Entretenimientos y Medios siguen siendo prometedoras en su conjunto. Por otro lado, también está claro que a medida que se asiente la “nueva” normalidad, seguirá habiendo vencedores y vencidos.
“Es evidente que la pandemia de COVID-19 ha acelerado la transición al consumo digital, generando cambios disruptivos, positivos y negativos, en el espectro de los medios de comunicación. Sin embargo, también es claro que la resiliencia subyacente de la industria de Entretenimientos y Medios y el atractivo para los consumidores siguen siendo tan fuertes como siempre. Si bien existen importantes desafíos por delante, a medida que transitemos el camino hacia una probable “nueva normalidad”, la migración digital también generará oportunidades en todos los segmentos y no sólo en aquellos que se han beneficiado hasta el momento” concluyó Ariel Vidán.
