La combinación de inteligencia artificial con las nuevas tecnologías va a cambiar la fuerza laboral para siempre. Aunque todavía no se ve con claridad la magnitud del impacto, los analistas anticipan que muchos de los empleos que actualmente realizan seres humanos pasarán a ser responsabilidad de robots en el futuro cercano al mismpo tiempo que se crean nuevos empleos con el avance de la tecnología.
Esos próximos cambios tienen importantes implicancias en el campo de la educación. Los colegios secundarios deben preparar a los estudiantes para que mantengan competitividad en el mercado laboral y las instituciones post secundarias deben dar a los estudiantes y a los trabajadores desplazados educación relevante y oportunidades de re-capacitación. También este proceso será ayudado por innovaciones en tecnología, que crearán nuevas herramientas para educadores, etudiantes y todos los que busquemre-capacitación y empleo.
Los principales desafíos de la educación
Los empleos que corren menos riesgo de ser reemplazados por la automatización son aquellos que necesitan resolver problemas, pensamiento crítico, creatividad y trabajo en equipo. En este campo la educación no va a ver una gran caída en la demanda de empleados dada la naturaleza del trabajo. The education profession is unlikely to see a dramatic drop in demand for employees given the nature of work in this field.
El gran desafío, entonces, para políticos, colegios y educadores será preparar a los estudiantes para los cambios en el mercado laboral. Todos deberán adaptar los 12 años de educación básica (llamada en inglés K-12 para abreviar) para ayudar a los estudiantes a desarrollar las habilidades mencionadas arriba, que son las que les garantizarán demanda permanente de trabajo (a veces llamadas las habilidades del siglo 21).
La educación K-12 education debería dar prioridad al pensamiento crítico, a la resolución de problemas y la capacidad para trabajar en equipo en todas las áreas temáticas. Enseñar a los estudiantes a convertirse en pensadores analíticos, en solucionadores de problemas y en buenos miembros de equipo les permitirá mantenerse competitivos en el mercado laboral dada la naturaleza de los cambios en el trabajo. Igualmente importante, esas habilidades forman una base sólida para el pensamiento independiente que servirá a los estudiantes en cualquier tipo de carrera que decidan elegir en la vida.
Además, la creciente demanda de trabajadores con habilidades técnicas significa que una buena educación en ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas (STEM, según siglas inglesas) puede posicionar a los estudiantes para ser competitivos en la fuerza laboral. La educación en materias STEM debe ser una prioridad en la educación presente para el trabajo futuro.