La solución encontrada se llama Visa Direct Exchange, un instrumento que permite transformar los sistemas de computación actuales en sistemas capaces de soportar el crecimiento en volumen y complejidad del nuevo mundo de pagos electrónicos.
Accenture y Visa trabajaron con 10 socios estratégicos para diseñar, construir y lanzar Direct Exchange sin interrumpir los servicios existentes. El nuevo sistema, — uno de los más grandes del mundo en su tipo — tiene capacidad para manejar 20.000 transacciones por segundo y puede crecer hasta soportar más de 40.000 millones de transacciones por año. Además de manejar esos volúmenes, Visa Direct Exchange permite ofrecer a compradores y vendedores mejor información y mayor seguridad.
La solución encontrada se llama Visa Direct Exchange, un instrumento que permite transformar los sistemas de computación actuales en sistemas capaces de soportar el crecimiento en volumen y complejidad del nuevo mundo de pagos electrónicos.
Accenture y Visa trabajaron con 10 socios estratégicos para diseñar, construir y lanzar Direct Exchange sin interrumpir los servicios existentes. El nuevo sistema, — uno de los más grandes del mundo en su tipo — tiene capacidad para manejar 20.000 transacciones por segundo y puede crecer hasta soportar más de 40.000 millones de transacciones por año. Además de manejar esos volúmenes, Visa Direct Exchange permite ofrecer a compradores y vendedores mejor información y mayor seguridad.
