La mayoría de los CEO está desperdiciando esa oportunidad. De acuerdo con un estudio reciente realizado por Domo y CEO.com, sólo 4% de los CEO están tuiteando y casi siete de cada 10 no tienen ningún tipo de presencia social en la web. Ni siquiera en LinkedIn, la red social más popular para los CEO.
La explicación más probable de por qué los CEO no tuitean, según explica Mike Maddock en Forbes, es porque no comprenden lo que se pierden o por qué importa tanto para sus negocios.
Para superar esa resistencia, deberían olvidarse – dice — de la palabra red y recordar sólo la palabra social. La gente siempre fue social y siempre lo será. La tecnología ahora está permitiéndonos conectarnos, comunicarnos, compartir, crear, inventar y hasta conspirar y celebrar en formas nuevas. Mientras la tecnología puede cambiar, la necesidad de socializar no cambia.
Entonces, visto de esa manera, los líderes no deberían ser antisociales. El líder que da la espalda a lo social no sabe lo que sus consumidores quieren. O, dicho de otra forma, si no conversa, nunca podrá escuchar. Participar en Twitter es una manera bastante simple de evitar caer en la trampa de hablar sólo con la gente que piensa lo mismo sobre un tema.
