¿Qué quiere la generación del milenio?

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En el mercado laboral estadounidense hoy hay más trabajadores pertenecientes a la generación Y que a la de Babyboomers. Entender qué quieren es la clave para atraerlos y mantenerlos en una empresa.

<p>&nbsp;No es el mejor momento hist&oacute;rico para ser joven. Aunque hoy la fuerza de trabajo est&aacute; representada en 80 millones por la generaci&oacute;n X, una parte importante de la poblaci&oacute;n menor a 30 a&ntilde;os sufre como ning&uacute;n otro grupo etario las consecuencias de la crisis. Esta generaci&oacute;n tiene, por lo tanto, una mirada particular sobre la din&aacute;mica laboral.</p>
<p>Esta perspectiva particular no sirve de mucho si son los babyboomers quienes todav&iacute;a tienen las llaves del negocio. Sin embargo, si &eacute;stos quieren atraer y mantener a la nueva y m&aacute;s innovadora generaci&oacute;n, deben, primero, entenderlos. &iquest;Qu&eacute; quiere la generaci&oacute;n del milenio?</p>
<p><strong>Gratificaci&oacute;n instant&aacute;nea, acceso a la &uacute;ltima tecnolog&iacute;a, buenos mentores y necesidad de feedback.</strong></p>
<p>La generaci&oacute;n Y ha sido criada bajo el concepto de que la colaboraci&oacute;n es buena. Han trabajo en grupos desde primer grado y entienden, gracias a las redes sociales, que esa colaboraci&oacute;n puede ser r&aacute;pida y eficiente. Por eso necesitan tanto la retroalimentaci&oacute;n de buenos jefes. Al contrario de los babyboomers, que prefieren que les den una tarea y los dejen ejecutarla tranquilos, 80% de los chicos del milenio prefieren feedback y 75% dice necesitan mentores. Quieren saber qu&eacute; hacer hoy, no dentro de seis meses cuando el trabajo est&eacute; completo. Para los gerentes esto plantea nuevos desaf&iacute;os.</p>
<p><strong>C&oacute;digo de vestimenta. </strong><br />
79% de los chicos del milenio piensan que deber&iacute;a estar permitido usar jeans al menos alguna vez por semana, comparado con 60% de los babyboomers. 93%, de hecho, dijo que tener la libertad de vestirse c&oacute;mo les da la gana los pone m&aacute;s c&oacute;modos. Las l&iacute;neas entre el trabajo y la vida personal est&aacute;n comenzando a borrarse y entonces la necesidad de vestirse de manera casual aumenta.</p>
<p><strong>El dinero no es todo.</strong></p>
<p>Para muchos integrantes de esta generaci&oacute;n el dinero no es todo. Aunque es innegable que el estimulo monetario contribuye a estimular a muchos, trabajar en un lugar que produzca m&aacute;s satisfacci&oacute;n a nivel moral o personal es m&aacute;s importante.</p>
<p><strong>La importancia de la transparencia </strong><br />
La forma de organizaci&oacute;n jer&aacute;rquica no va bien con la generaci&oacute;n Y, que tiende a ser m&aacute;s horizontalista. Es dif&iacute;cil de digerir para los jefes pero pronto deber&aacute;n entender que una nueva forma de pensar los v&iacute;nculos laborales se aproxima: para 2025 tres de cada cuatro empleados ser&aacute;n de la generaci&oacute;n del milenio. En una econom&iacute;a que demanda innovaci&oacute;n para sobrevivir, dar &oacute;rdenes no es la soluci&oacute;n de nada. Es importante tener una fuerza de trabajo que se haga cargo de sus contribuciones en t&eacute;rminos de metas corporativas. Para lograrlo, no hay mejor herramienta que la transparencia.</p>
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