<p>Pero eso no siempre es así, según la nueva investigación sobre liderazgo y dinámica de grupo del profesor de management de Wharton Adam Grant y dos colegas, quienes desafían el supuesto de que la mayoría de los líderes eficaces son extrovertidos. <br />
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En realidad, los líderes introvertidos pueden ser más eficaces que los extrovertidos en ciertas circunstancias. El factor determinante es a quién están dirigiendo los líderes, según Grant y sus coautores Francesca Gino de Harvard Business School y David Hofmann de la Escuela de negocios Kenan-Flagler de la Universidad de North Carolina. El trabajo que presentaron se titula "Reversing the Extraverted Leadership Advantage: The Role of Employee Proactivity."<br />
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Liderazgo extrovertido implica demandar el centro de la atención: ser sociable, expansivo, audaz, hablador y dominante. Esto ofrece las ventajas de brindar una clara estructura de autoridad y dirección. Sin embargo, combinar un líder extrovertido con empleados que toman iniciativa y dicen lo que piensan puede llevar a fricciones, mientras que combinar el mismo grupo de empleados con un líder introvertido puede ser el camino al éxito, advierten los investigadores. Esto tiene consecuencias para líderes y gerentes en todos los niveles que quieren mejorar sus estilos de liderazgo. <br />
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Grant pensaba que la idea tan difundida del líder extrovertido y fuerte como dominante era incompleta. De modo que él y sus colaboradores comenzaron a mirar el tema a través de un negocio en el cual pudieran fácilmente seguirle la pista a la productividad y al trabajo en equipo: las franquicias de pizza a domicilio. Un negocio donde podían ver diferencias en desempeño y donde la gente hacía, por lo general, el mismo trabajo. . Si hay variación en la rentabilidad de una franquicia, como resultado de quién la dirige y quiénes son los empleados, eso podía ser un elemento poderoso sobre el verdadero impacto de un líder. <br />
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<strong>Amenazados por la proactividad<br />
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Los investigadores obtuvieron datos de una compañía nacional de entrega de pizza a domicilio. Enviaron cuestionarios a 130 negocios y recibieron respuestas completas de 57. Lo que descubrieron fue una relación inversa: cuando los empleados son proactivos, logran más ganancias si los dirige un gerente introvertido. Cuando los empleados no son proactivos, con un gerente proactivo van a generar más ganancias. <br />
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Los conflictos de personalidad pueden conducir a luchas de poder dentro de una organización y ponen frente a frente a gerentes y empleados. Esto es especialmente así en organizaciones con jerarquías chatas, por ejemplo, si los líderes fueron promovidos recientemente del nivel de par, o si no queda bien establecida la competencia y las habilidades del nuevo líder. <br />
Tales situaciones pueden conducir a que los empleados desafíen al líder y a esto que se sienta amenazado, una situación conocida como “incertidumbre de estatus”, según Grant.<br />
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No siempre conviene un líder extrovertido
La sabiduría convencional nos dice que los líderes son hombres y mujeres que se destacan, se hacen oír, dan órdenes, hacen planes y generalmente son la gente más dominante y más sociable en un grupo.