Todos los años hay un juguete preferido; el que más vende.
Pero para desgracia de los fabricantes de juguetes los chicos hoy no prefieren
a la nueva Barbie sino al nuevo iPad. Los analistas así lo predijeron antes de
la navidad: en 2012 habrá más Kindle Fires abajo del arbolito que nuevos
autitos.
Malas noticias para Mattel y Hasbro, los dos fabricantes más
grandes de juguetes del mundo. Aunque el panorama es aterrador desde ambas
empresas se defienden diciendo que, desde hace tiempo, han estado preparándose para el cambio, adaptando sus juguetes a las nuevas tecnologías. Por ejemplo,
Mattel –que es la mayor fabricante por volumen- vendió más fundas para celular
de plástico que cualquier otra cosa.
¿Será el fin para los autitos Hot Wheels o la muñeca Barbie,
dos pesos pesados de la marca? Las expectativas de ganancias para la compañía
de juguetes en 2012, por lo pronto, son bastante bajas: US$ 1.400 millones para
Hasbro, US$ 2.290 para Mattel.
El problema no es solo que la compra de juguetes ha bajado
sino que la cantidad de tiempo que los chicos invierten en jugar con sus
juguetes ha bajado, relegados a segundo plano por los juegos de computadora y
otros dispositivos electrónicos. Pueden mirar e interactuar con contenido gratuito online por horas y
horas.
A medida que los padres reemplazan sus dispositivos por
nuevas versiones, ¿pasarán sus no-tan-viejas tabletas a sus hijos? Para muchas
personas, las tabletas son quienes mejor cuidan y atienden a sus hijos.
La realidad es que las compañías de juguetes no pueden
competir contra la rapidez de actualización de las compañías de tecnología,
como Zynga. El mayor intento de reinventarse para Hasbro fue Furby, que esta
vez viene con una aplicación móvil para comunicarse con el pequeño juguete robot.
