Las crisis explotó el viernes, cuando Piech dijo al Spiegel Online que había perdido la confianza en Winkerton y que en este momento está distanciado del CEO. Esa opinión, se supo en seguida, no es compartida por su primo Wolfgang Porsche, presidente de Porsche SE, la holding que controla 50,7% de VW.
Winterkorn, que rápidamente contó con el apoyo de accionistas y empleados de la compañía, declaró públicamente que no tiene intención de renunciar, al menos por ahora.
Como ocurre siemp0re con las compañías cuando hay crisis de liderazgo que generan incertidumbre, las acciones cayeron 1,5% el lunes.
Los muchos que defienden al CEO dicen que bajo su mandato crecieron las ventas y las ganancias y se creó una fábrica global que está en condiciones y lista para superar a Toyota Motor y General Motors como el grupo automotor más grande del mundo por ventas.
Pero todo indica que Piech, el patriarca familiar de 77 años se va a salir con la suya una vez más y terminará por reemplazar a Winterkorn. Por ahora, sin embargo, está solo y aislado en la crisis de liderazgo que inició el viernes.
