Demos marcha atrás sobre la peligrosidad de la carne roja. El anuncio realizado a principios de noviembre por la Organización Mundial de la Salud según el cual el consumo de carnes rojas y carnes procesadas implicaba serios riesgos de contraer cáncer generó pánico en el mundo entero.
Hacer esa afirmación citando bases científicas hizo un gran daño a la población mundial, dice hoy el Financial Times. Se han realizado dos grandes pruebas sobre la conexión de la carne y el cáncer, y la OMS los ignoró a ambos. Los dos estudios analizaron y testearon una dieta baja en grasas y alta en frutas y vegetales con reducido consumo de carne en más de 50.000 personas.
En el primero los investigadores no pudieron descubrir ningún erecto de recurrencia de cáncer colo-rectal y en el segundo no hubo efectos en ningún tipo de cáncer. Puede ser que no hayan durado lo suficiente pero son la mejor fuente de información con que se cuenta hasta ahora.
El anuncio de la OMS hizo mucho daño. Decir, con la autoridad que se le concede a esa organización, que el jamón, la panceta, los fiambres, la carne, los chorizos etc., producen cáncer es muy fuerte y asustó mucho a los miles de millones de personas en el mundo que no son vegetarianos.
