<p><strong>La importancia de la perseverancia</strong><br />
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Hay muchos líderes que se esfuerzan por ser buenos, por hacer un trabajo que signifique algo en momentos en que reina la burocracia y las soluciones que fracasan. Todos trabajan más, y en la mayoría de los casos, en mayor aislamiento. El actual ritmo en el trabajo y en la vida, junto con más miedo y más ansiedad, hace que sea más difícil tener la energía y el entusiasmo para seguir adelante. Años de buenos esfuerzos fueron barridos por acontecimientos que no controla nadie, como la crisis económica o los desastres naturales de la última década. Decisiones tomadas por políticos y altos ejecutivos han dañado esos esfuerzos de largo plazo: caprichosamente eliminar o retiran ahorros para programas y procesos que han demostrado ser exitosos. Tiempos difíciles para líderes innovadores.<br />
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“Cuando les pregunto cuánto tiempo dedican a pensar junto a sus colegas, reflexionando sobre lo que han aprendido de sus propios esfuerzos recientes, me miran como no entendiendo. Les resulta difícil recordar cómo era gestionar reflexionando, tomarse tiempo para descubrir cosas juntos a aprender de la experiencia. En el vertiginoso ritmo que vivimos, nos gritamos unos a otros (muchas veces provocados y enojados recíprocamente) entonces perdemos el único recurso capaz de hacernos superar los malos tiempos: la comunidad. Para mí la comunidad, gente trabajando junta y sabiendo los demás están allí para ayudarlos, es un recurso importante aunque invisible. En la mayoría de las situaciones, la comunidad es la única cosa que nos saca adelante. Y en un momento co éste, de angustias emocionales y económicas, toda organización necesita líderes que pueden ayudar a la gente a recuperar su capacidad, energía y deseo de contribuir. Y esto sólo se puede3 lograr cuando la gente trabaja junta en forma comunitaria, no en aislamiento.”</p>
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<p>Meg Wheatley, experta en liderazgo innovador, escribió dos libros de management. Con el primero—Leadership and the New Science: Learning about Organization from an Orderly Universe –comenzó a desarrollar una línea de trabajo relacionada con la relación entre aprendizaje organizacional, liderazgo innovador y cosas como teoría del caos, física cuántica y neurociencia. Simultáneamente cofundaba el Berkana Institute, una ONG estadounidense dedicada a realizar experimentos para crear comunidades saludables en todo el mundo, a menudo en áreas muy pobres con muchos problemas serios. Durante los 15 años siguientes, sus opiniones sobre las comunidades y su experiencia con la práctica innovadora del management la convirtieron en una figura central en una amplia red de pioneros en aprendizaje organizacional y cambio. <br />
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Luego, desde mediados de la década del 2000 y la llegada de la crisis económica de 2008, Wheatley advirtió un nuevo nivel de ansiedad entre sus amigos, clientes y relaciones empresariales. Vio que hasta los líderes más innovadores cedían ante la presión de la competencia global y terminaban por dejar a un lado la modalidad de management participativo, casi siempre a expensas de la rentabilidad y crecimiento. <br />
Wheatley escribió dos libros en un período de 15 meses. El primero, Perseverance (Berrett-Koehler, 2010), es una meditación sobre tenacidad frente a la adversidad. Está escrito para gente dedicada al cambio organizacional, que de pronto descubre que su trabajo es mucho más difícil y está buscando maneras de sostener su esfuerzo y su tranquilidad. <br />
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Walk Out Walk On, es el otro, publicado junto a Deborah Frieze (ex copresidenta del Berkana Institute), cuyo subtítulo reza: A Learning Journey into Communities Daring to Live the Future Now (un viaje de aprendizaje hacia las comunidades que se animan a vivir el futuro hoy). Describe allí siete iniciativas de liderazgo y creación de comunidades: una universidad que auto-organizada en una villa de México donde los estudiantes crean tecnologías en pequeña escala; un instituto brasileño que fija “juegos de 30 días” en los que los jugadores se reúnen para mejorar las condiciones en barrios pobres; una villa de Zimbabwe dedicada a la agricultura de autosubsistencia en medio de una hambruna creada por malas políticas; una increíble red de personas transformando la salud, educación y servicios sociales en Columbus, Ohio; e iniciativas similares en Sudáfrica, India y Grecia. Los organizadores de todos esos esfuerzos se salieron de modos de pensamiento restrictivos y Wheatley dice que cualquiera puede hacer lo mismo, lo que podría significar cambiar de trabajo en algunos casos pero que siempre significa cambiar la perspectiva dentro de la propia situación actual. <br />
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