Ver a un líder experimentado hacer preguntas, dice Paul Brown en Forbes, es como mirar a un gran músico o atleta que sabe qué nota tocar o qué juego pedir. Esa rara habilidad es, según él, el arte de los negocios.
Para Brown, muchas de las mejores preguntas giran alrededor de los siguientes temas:
¿Es esto urgente o esencial?
Los temas urgentes tienen la mala costumbre de ponerse en el camino de lo esencial. Hay una escuela de pensamiento que dice que si uno comienza cada día atendiendo una o dos de las cosas esenciales del día antes de que las urgentes obstruyan el camino, uno va a tener éxito. Como líder, trazar un contexto alrededor de lo que es súper importante y no y no de lo que parece importante en el momento es algo muy importante para preguntarse.
¿Qué debería dejar de hacer?
Para tener tiempo de enfocarnos en lo esencial, debemos eliminar las actividades menos importantes que ocupan nuestro tiempo. Conviene tener una lista de todas las cosas que se podrían dejar de hacer. La lista puede ser personal, pero también puede redactarse para todo el equipo de trabajo. Así todos tendrán tiempo para dedicarse a la lista de cosas “para hacer”
¿Cómo hago para sentirme más fuerte?
Los grandes líderes saben lo que no les gusta hacer, saben cómo encontrar socios en quienes delegar esas tareas y así tener tiempo y energía para enfocarse en lo que más saben hacer. Nadie es bueno en todo, por eso es útil conocer nuestras debilidades y aceptarlas con humildad. De lo contrario va a ser más difícil lucirnos con lo que sí sabemos hacer bien.
¿Qué podría estar faltando?
Siempre hay algo que falta, y los grandes líderes lo saben. Es importante preguntar al equipo qué creen que puede estar faltando. Eso demuestra, otra vez, humildad y apertura a esa posibilidad. En toda cultura innovadora se encuentran líderes que hacen esa pregunta.
