El emprendimiento conjunto está integrado por Metro-Goldwyn-Mayer, Paramount Pictures, Sony Pictures Entertainment, Universal Studios y Warner BROS.
Las empresas darán a conocer mayores detalles -como nombre de la empresa y fecha de lanzamiento- más adelante.
Matt Bailey, analista de Webnoize, firma dedicada a controlar las industrias de entretenimiento digital, definió esta iniciativa como “ambiciosa” y afirmó que los estudios se preparan para el futuro.
“El mercado de video a pedido (VOD) resulta un atractivo popular entre los consumidores y es, además, un factor motivador para los estudios cinematográficos”, indicó el analista. “Se realizaron varias pruebas exitosas de VOD con suscriptores de televisión por cable. A la gente le gusta tener la posibilidad de mirar una película cuando quiere, y no tener que ir al video ni pagar recargos por devoluciones atrasadas. Actualmente, el mercado de alquiler de videos está valuado en US$ 8.000 millones al año, y el VOD formará parte de este mercado.”
“Los estudios piensan con anticipación en la distribución por Internet, lo cual resulta bastante ambicioso”, subraya.
Según cifras dadas a conocer por los estudios cinematográficos, hay más de 10 millones de hogares equipados con banda ancha y casi 35 millones de computadoras con banda ancha, incluyendo colegios y empresas. Estas cifras demuestran que el mercado de acceso a Internet de alta velocidad hoy es lo suficientemente grande como para soportar la distribución digital de películas, explicaron las empresas. Bailey advirtió que el futuro todavía no está preparado.
“Si bien citaron algunas cifras de banda ancha sorprendentes, la mayoría se refería a lugares de trabajo, y la gente no podrá mirar películas en el trabajo”, expresó. “Otro problema a tener en cuenta es que el costo de distribución es alto, casi US$ 1,30 por película por consumidor. Lo bueno, anticipa Webnoize, es que, a medida que caigan los precios de banda ancha, este costo descenderá 70% para fines del año 2002 hasta alcanzar apenas 40 centavos.”
Según un sondeo de Yankee Group, firma de asesoría estratégica e investigadora tecnológica, se estima que 31 millones de hogares estadounidenses contarán con acceso de banda ancha a fines de 2005. Estos 31 millones de hogares representarán 39% de todas las conexiones hogareñas, comparado con apenas 9% a fines de 2000.
De concretarse el incremento de acceso de alta velocidad, los estudios cinematográficos saldrán beneficiados, señaló el analista.
“Con una mejor penetración hogareña de banda ancha, esta joint venture puede ser un gran éxito. Los estudios cinematográficos se preparan para un mercado que será enorme en los próximos dos o tres años”, concluyó.
El emprendimiento conjunto está integrado por Metro-Goldwyn-Mayer, Paramount Pictures, Sony Pictures Entertainment, Universal Studios y Warner BROS.
Las empresas darán a conocer mayores detalles -como nombre de la empresa y fecha de lanzamiento- más adelante.
Matt Bailey, analista de Webnoize, firma dedicada a controlar las industrias de entretenimiento digital, definió esta iniciativa como “ambiciosa” y afirmó que los estudios se preparan para el futuro.
“El mercado de video a pedido (VOD) resulta un atractivo popular entre los consumidores y es, además, un factor motivador para los estudios cinematográficos”, indicó el analista. “Se realizaron varias pruebas exitosas de VOD con suscriptores de televisión por cable. A la gente le gusta tener la posibilidad de mirar una película cuando quiere, y no tener que ir al video ni pagar recargos por devoluciones atrasadas. Actualmente, el mercado de alquiler de videos está valuado en US$ 8.000 millones al año, y el VOD formará parte de este mercado.”
“Los estudios piensan con anticipación en la distribución por Internet, lo cual resulta bastante ambicioso”, subraya.
Según cifras dadas a conocer por los estudios cinematográficos, hay más de 10 millones de hogares equipados con banda ancha y casi 35 millones de computadoras con banda ancha, incluyendo colegios y empresas. Estas cifras demuestran que el mercado de acceso a Internet de alta velocidad hoy es lo suficientemente grande como para soportar la distribución digital de películas, explicaron las empresas. Bailey advirtió que el futuro todavía no está preparado.
“Si bien citaron algunas cifras de banda ancha sorprendentes, la mayoría se refería a lugares de trabajo, y la gente no podrá mirar películas en el trabajo”, expresó. “Otro problema a tener en cuenta es que el costo de distribución es alto, casi US$ 1,30 por película por consumidor. Lo bueno, anticipa Webnoize, es que, a medida que caigan los precios de banda ancha, este costo descenderá 70% para fines del año 2002 hasta alcanzar apenas 40 centavos.”
Según un sondeo de Yankee Group, firma de asesoría estratégica e investigadora tecnológica, se estima que 31 millones de hogares estadounidenses contarán con acceso de banda ancha a fines de 2005. Estos 31 millones de hogares representarán 39% de todas las conexiones hogareñas, comparado con apenas 9% a fines de 2000.
De concretarse el incremento de acceso de alta velocidad, los estudios cinematográficos saldrán beneficiados, señaló el analista.
“Con una mejor penetración hogareña de banda ancha, esta joint venture puede ser un gran éxito. Los estudios cinematográficos se preparan para un mercado que será enorme en los próximos dos o tres años”, concluyó.