La “generación de la red”: tecnología interactiva
Otros que se han colocado primeros en nuestros tiempos: los niños, que se han convertido en autoridades en un tema de central importancia para la sociedad.
¿Sabrán las empresas cómo acrecentar las habilidades de los niños que usan tecnologías relacionadas con la red –interactividad, inmediacidad– para asegurárselos como consumidores adultos del siglo 21? Más aún, ¿sabrán cómo conquistarlos a ellos y a sus familias y a todos los demás bajo su influencia?
La tecnología es la segunda naturaleza para la juventud de hoy. Crecieron con ella, no le temen, saben cómo aprovecharla. Los chicos familiarizados con la Red darán nueva forma al modo de interactuar entre empresas y consumidores. Las marcas solas no bastarán. ¿Qué hará falta? Opciones, valor, customización y la posibilidad de probar antes de comprar.
Ya está ocurriendo. En Growing Up Digital, el autor Don Tapscott dice que la “Generación N” (la generación de la Net) –los que tienen entre 2 y 22 años de edad– usan la Internet para comunicarse, para divertirse, para aprender, para comprar, para manejar sus finanzas personales, para explorar. Esta generación, que será de 88 millones en Estados Unidos en este año 2000, tiene miles de millones de dólares propios para gastar e influye sobre los gastos familiares por valor de cientos de miles de millones.
Los miembros de la Generación N “tienen mayor poder en los hogares debido a su dominio de los nuevos medios, y por lo general tienen mejor acceso a información sobre productos comparativos en la Red”, dice Tapscott en su libro.
La compra de un nuevo auto por parte de la familia o de un veraneo puede depender de la decisión de la hija de 13 años, quien instruye a su “agente personal” que le busque información pertinente. ¿Por qué no? Ella está en muchas mejores condiciones de hacer que la red funcione para ella, y tiene mucho más tiempo libre para dedicarle a la tarea.
Cada vez son más las empresas que comienzan a poner en Internet información pensada para la Generación N. J.C. Penney invita a los navegantes de la Web a revisar sus productos, cliqueando sobre lo que les gusta y sobre lo que no les gusta. La red de almacenes Peapod deja que los compradores miren todos sus productos en cualquier categoría, clasificados según criterios de costo, contenido graso o valor nutricional. Realtors permite a los posibles compradores a hacer “recorridos virtuales ” por las casas que vende. Federal Express deja que sus clientes rastreen la situación en que están los paquetes que enviaron.
Estas y otras empresas inteligentes han visto el futuro de los hábitos de consumo. Es interactivo, y es el consumidor el que aprieta los botones.
La “generación de la red”: tecnología interactiva
Otros que se han colocado primeros en nuestros tiempos: los niños, que se han convertido en autoridades en un tema de central importancia para la sociedad.
¿Sabrán las empresas cómo acrecentar las habilidades de los niños que usan tecnologías relacionadas con la red –interactividad, inmediacidad– para asegurárselos como consumidores adultos del siglo 21? Más aún, ¿sabrán cómo conquistarlos a ellos y a sus familias y a todos los demás bajo su influencia?
La tecnología es la segunda naturaleza para la juventud de hoy. Crecieron con ella, no le temen, saben cómo aprovecharla. Los chicos familiarizados con la Red darán nueva forma al modo de interactuar entre empresas y consumidores. Las marcas solas no bastarán. ¿Qué hará falta? Opciones, valor, customización y la posibilidad de probar antes de comprar.
Ya está ocurriendo. En Growing Up Digital, el autor Don Tapscott dice que la “Generación N” (la generación de la Net) –los que tienen entre 2 y 22 años de edad– usan la Internet para comunicarse, para divertirse, para aprender, para comprar, para manejar sus finanzas personales, para explorar. Esta generación, que será de 88 millones en Estados Unidos en este año 2000, tiene miles de millones de dólares propios para gastar e influye sobre los gastos familiares por valor de cientos de miles de millones.
Los miembros de la Generación N “tienen mayor poder en los hogares debido a su dominio de los nuevos medios, y por lo general tienen mejor acceso a información sobre productos comparativos en la Red”, dice Tapscott en su libro.
La compra de un nuevo auto por parte de la familia o de un veraneo puede depender de la decisión de la hija de 13 años, quien instruye a su “agente personal” que le busque información pertinente. ¿Por qué no? Ella está en muchas mejores condiciones de hacer que la red funcione para ella, y tiene mucho más tiempo libre para dedicarle a la tarea.
Cada vez son más las empresas que comienzan a poner en Internet información pensada para la Generación N. J.C. Penney invita a los navegantes de la Web a revisar sus productos, cliqueando sobre lo que les gusta y sobre lo que no les gusta. La red de almacenes Peapod deja que los compradores miren todos sus productos en cualquier categoría, clasificados según criterios de costo, contenido graso o valor nutricional. Realtors permite a los posibles compradores a hacer “recorridos virtuales ” por las casas que vende. Federal Express deja que sus clientes rastreen la situación en que están los paquetes que enviaron.
Estas y otras empresas inteligentes han visto el futuro de los hábitos de consumo. Es interactivo, y es el consumidor el que aprieta los botones.