McDonalds se suma a la cruzada por la salud

Ante la fuerte presión social por hacer sus menúes menos dañinos para la salud, McDonalds acaba de anunciar que desde octubre, reducirá la cantidad de grasas saturadas y ácidos transgrasos en todos los productos fritos de su carta de opciones.

5 septiembre, 2002

Desde octubre, los 13.000 locales que tiene en todo el territorio de Estados Unidos, usarán una nueva variedad de aceite que reduce notablemente las grasas saturadas y ácidos transgrasos, ambos responsables (según la ciencia actual) de gran número de enfermedades cardíacas.

Mike Roberts, presidente de McDonald´s de Estados Unidos, aseguró a la prensa que el cambio no afectará el sabor ni el número de calorías en la comida. McDonald’s espera que al alterar el aceite para freír, podrá reducir a la mitad los ácidos transgrasos y casi 16% de las grasas saturadas. En cambio, en la nueva variedad de aceite será mucho más alto el índice de grasas poliinsaturadas, las que bajan los niveles de colesterol en sangre. Se usará no sólo para las famosas papas fritas sino también para preparar Chicken McNuggets, Filet-O-Fish y Hash Browns.

Expertos en salud y nutrición aplaudieron el anuncio puesto que, dicen, “ayudará a reducir el riesgo de padecer enfermedades cardíacas entre los clientes”. Las autoridades sanitarias creen que el liderazgo que ejerce McDonald’s en el negocio de las comidas rápidas hará que su ejemplo sea imitado por otras cadenas y fabricantes.

Los ácidos transgrasos se encuentran en las margarinas vegetales, las galletitas dulces y saladas, los diferentes tipos de snacks (papitas fritas y toda la gama de variedades de “ingredientes” para copetín.)

Las grasas no se deben eliminar del todo

El Instituto de Medicina de Estados Unidos acaba de publicar los resultados de un estudio reciente, con una serie de indicaciones para adoptar una dieta saludable, con el adecuado equilibrio entre grasas y carbohidratos.

El Instituto modifica sus recomendaciones anteriores, según las cuales 50% o más de la ingesta de calorías debía provenir de carbohidratos y 30% o menos, de productos grasos.

El Instituto, un brazo de la Academia Nacional de Ciencias, dice que puesto que grasas, carbohidratos y proteínas son todas importantew fuentes de energía pueden, hasta cierto punto, sustituirse unas a otras en el aporte de calorías.

Los nuevos lineamientos recomiendan obtener de 45% a 65% de las calorías necesarias de los carbohidratos, de 20% a 35% de grasas y de 10% a 35%, de proteínas. La recomendación de proteínas no varió.

Las conclusiones del estudio muestran que cuando la gente come muy poca grasa y muchos carbohidratos, el llamado colesterol bueno baja. El colesterol bueno reduce la posibilidad de sufrir ataques cardíacos.

Por otra parte, las dietas ricas en grasas pueden provocar obesidad y todos sus peligros. Pero la grasa es una importante fuente de energía en la dieta.

McDonald´s agradecido.

Desde octubre, los 13.000 locales que tiene en todo el territorio de Estados Unidos, usarán una nueva variedad de aceite que reduce notablemente las grasas saturadas y ácidos transgrasos, ambos responsables (según la ciencia actual) de gran número de enfermedades cardíacas.

Mike Roberts, presidente de McDonald´s de Estados Unidos, aseguró a la prensa que el cambio no afectará el sabor ni el número de calorías en la comida. McDonald’s espera que al alterar el aceite para freír, podrá reducir a la mitad los ácidos transgrasos y casi 16% de las grasas saturadas. En cambio, en la nueva variedad de aceite será mucho más alto el índice de grasas poliinsaturadas, las que bajan los niveles de colesterol en sangre. Se usará no sólo para las famosas papas fritas sino también para preparar Chicken McNuggets, Filet-O-Fish y Hash Browns.

Expertos en salud y nutrición aplaudieron el anuncio puesto que, dicen, “ayudará a reducir el riesgo de padecer enfermedades cardíacas entre los clientes”. Las autoridades sanitarias creen que el liderazgo que ejerce McDonald’s en el negocio de las comidas rápidas hará que su ejemplo sea imitado por otras cadenas y fabricantes.

Los ácidos transgrasos se encuentran en las margarinas vegetales, las galletitas dulces y saladas, los diferentes tipos de snacks (papitas fritas y toda la gama de variedades de “ingredientes” para copetín.)

Las grasas no se deben eliminar del todo

El Instituto de Medicina de Estados Unidos acaba de publicar los resultados de un estudio reciente, con una serie de indicaciones para adoptar una dieta saludable, con el adecuado equilibrio entre grasas y carbohidratos.

El Instituto modifica sus recomendaciones anteriores, según las cuales 50% o más de la ingesta de calorías debía provenir de carbohidratos y 30% o menos, de productos grasos.

El Instituto, un brazo de la Academia Nacional de Ciencias, dice que puesto que grasas, carbohidratos y proteínas son todas importantew fuentes de energía pueden, hasta cierto punto, sustituirse unas a otras en el aporte de calorías.

Los nuevos lineamientos recomiendan obtener de 45% a 65% de las calorías necesarias de los carbohidratos, de 20% a 35% de grasas y de 10% a 35%, de proteínas. La recomendación de proteínas no varió.

Las conclusiones del estudio muestran que cuando la gente come muy poca grasa y muchos carbohidratos, el llamado colesterol bueno baja. El colesterol bueno reduce la posibilidad de sufrir ataques cardíacos.

Por otra parte, las dietas ricas en grasas pueden provocar obesidad y todos sus peligros. Pero la grasa es una importante fuente de energía en la dieta.

McDonald´s agradecido.

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