“Es por ello que ofrecemos capacitaciones, comunicaciones internas y charlas para asegurar que todos nuestros colaboradores comprendan y participen en nuestros esfuerzos por adoptar prácticas más responsables”, sostiene Verónica Rosales. “La sostenibilidad es una prioridad en los nuevos proyectos, y es tenida en cuenta desde el inicio, siendo un factor que consideramos como determinante a la hora de avanzar o no con una innovación o renovación de productos, por ejemplo. Por otro lado, generamos colaboraciones y alianzas con los proveedores y las partes interesadas que comparten nuestra visión para desarrollar soluciones innovadoras y sostenibles, y promovemos la educación y conciencia sobre la sostenibilidad dentro de la industria”.
El desafío del cambio climático
Considerando el futuro, ¿cuáles son los mayores retos y oportunidades en términos de la evolución de las prácticas ESG y la sustentabilidad?
En términos de ESG, sin dudas, hay grandes desafíos por delante. Es un tema en constante evolución, del que se aprende y se obtiene más conocimiento científico cada día. En líneas generales, uno de los mayores desafíos como sociedad es el cambio climático. También es uno de los mayores riesgos para el futuro de nuestro negocio, la industria alimenticia. El cambio climático impacta directamente en la producción de alimentos que, a su vez, es responsable de un tercio de las emisiones de gases de efecto invernadero a escala global. En línea con esto, en Nestlé asumimos el compromiso de lograr cero emisiones netas de gases de efecto invernadero para 2050. Una de las principales iniciativas de la compañía es fomentar prácticas de agricultura regenerativa para la obtención de nuestros ingredientes.
Otro de los grandes desafíos está vinculado a la transición hacia envases más sostenibles. Sabemos que el packaging ayuda a proteger los alimentos y bebidas, a garantizar su calidad y seguridad, a comunicar la información nutricional y evitar su desperdicio. Sin embargo, estos requisitos esenciales no deberían ir en detrimento del planeta. En este sentido, en Nestlé tenemos otro gran compromiso: tener más de 95% de nuestros envases plásticos diseñados para ser reciclados para 2025, con el objetivo de llegar al 100% en un futuro.
Un abordaje transversal
¿Cómo se concreta la articulación entre las distintas partes interesadas, de manera tal que se asegura la alineación entre el negocio y los objetivos de sustentabilidad? ¿Qué es lo más complejo de resolver?
Es importante que las grandes compañías como la nuestra tengan objetivos a largo plazo para poder definir una estrategia y alinear la organización hacia ella. En el caso de Nestlé, no solo tenemos los compromisos, sino que también tenemos distintos hitos intermedios que nos aseguran de que estamos yendo en el camino correcto.
Nuestros compromisos se traducen en alrededor de 200 proyectos, localmente. Si bien contamos con un equipo a cargo de su seguimiento, la sustentabilidad es un eje que atraviesa a toda la organización. Tenemos grupos de trabajo específicos en diferentes áreas de la compañía. Para la gestión de proyectos, tenemos definida una gobernanza que nos permite dar seguimiento a cada actividad y asegurar avances firmes.
Además, para alcanzar los objetivos es importante que todos estemos alineados respecto a la urgencia de trabajar en esto hoy. La transición hacia prácticas más sostenibles puede implicar desafíos significativos en términos de costos, tecnología y cambios en la cadena de valor. Coordinar y mantener el compromiso entre diversos actores, que pueden tener diferentes prioridades y capacidades, añade un nivel adicional de complejidad.
Desde Nestlé buscamos alinear el negocio y nuestros objetivos de sustentabilidad a través de la articulación entre diferentes actores de la cadena utilizando diversos enfoques estratégicos. Trabajamos estrechamente con nuestros proveedores y partes interesadas para promover prácticas sostenibles y desarrollar soluciones innovadoras, lo cual ayuda a asegurar que los esfuerzos de sustentabilidad sean coherentes a lo largo de toda la cadena de valor.
