Tras una primera mitad de año de altos niveles de producción, acumulando una expansión del 18,9% en relación al mismo período de 2012, la mayoría de las terminales –principalmente las más expuestas a Brasil, que dinamizaron la expansión de la actividad en el primer semestre- ya están moderando sus planes de producción para adaptarse a un escenario de demanda menor, señala en su último informe el coordinador de Sector Automotor de abeceb.com, Gonzalo Dalmasso.
La principal contribución al crecimiento en el transcurso del año había venido desde el rebote de la demanda brasileña, conforme a lo esperado, con un aporte incremental de 59.118 unidades. Le siguieron las ventas mayoristas de vehículos nacionales al mercado interno, con 20.356 unidades adicionales.
El resto de los mercados tuvieron hasta ahora una contribución negativa (-9.142 unidades), pero –como fuera señalado- concluirán el año demandando niveles similares a los de 2012.
El crecimiento de la producción y las exportaciones nacionales tuvo el impulso de algunos nuevos modelos de la segunda mitad de 2012, como el Nuevo Fiat Palio, la Nueva Ford Ranger, el Clio Mio, la Nueva Sprinter y la expansión del Honda City basada en Brasil.
Pero pese a este gran primer semestre, el deterioro del mercado brasileño obligó a realizar un leve ajuste a la baja de la producción para 2013 (del 10,5% anterior, al 10,1% actual). Se prevé que el año 2013 cerrará con una cifra en torno de los 840 mil vehículos fabricados en las terminales argentinas.
El ajuste de las proyecciones no es de gran magnitud debido a que ya se esperaba un descenso en el ritmo de exportaciones a Brasil hacia la segunda parte del año, aunque el freno del mercado está siendo más abrupto que se preveía. Y a esto se suma el pobre comportamiento de otros mercados relevantes, como Colombia y Venezuela.
Esto implica un segundo semestre con un crecimiento mucho menor al primero. Lo que explicaría el porqué de que la actividad de las terminales mantenga la cadencia de junio, que es más moderada que en los primeros meses y similar al ritmo del período julio-diciembre de 2011 y 2012.
En julio, en particular, el nivel de producción diaria mostraría una caída debido a los problemas de algunas terminales para importar autopartes de Brasil ante la huelga de transportistas en ese país, que obligaron a suspender algunas jornadas.
De hecho, la mayoría de las terminales –principalmente las más expuestas a Brasil, que son las que dinamizaron la expansión de la actividad en el primer semestre- ya están moderando sus planes de producción, adaptándose a un escenario de demanda de menor dinamismo.