Los esfuerzos de Estados Unidos para contener el alza del precio del petróleo comenzó a rendir sus frutos, ya que el domingo, y luego de reunirse con el secretario de energía estadounidense, la ministra de Petróleo y Energía noruega, Marit Arnstad declaró su “preocupación con la posibilidad de que una reducción de la oferta alimente la inflación y desacelere el crecimiento de la economía”.
Sin embargo, siguiendo los ejemplos de México, Kuwait y Arabia Saudita, Noruega (el segundo mayor productor de crudo del mundo), anunció que sólo tomará una decisión respecto a sus límites de producción a fines de marzo.
Los esfuerzos estadounidenses para que los países productores amplíen su oferta se vieron intensificados luego de que el ministro iraquí de Petróleo, Mohamed Rachid, anunciara en Bagdad una reducción adicional de 300 mil barriles diarios, y amenzara con ampliarla aún más si la ONU no levanta las sanciones económicas al país.
Los esfuerzos de Estados Unidos para contener el alza del precio del petróleo comenzó a rendir sus frutos, ya que el domingo, y luego de reunirse con el secretario de energía estadounidense, la ministra de Petróleo y Energía noruega, Marit Arnstad declaró su “preocupación con la posibilidad de que una reducción de la oferta alimente la inflación y desacelere el crecimiento de la economía”.
Sin embargo, siguiendo los ejemplos de México, Kuwait y Arabia Saudita, Noruega (el segundo mayor productor de crudo del mundo), anunció que sólo tomará una decisión respecto a sus límites de producción a fines de marzo.
Los esfuerzos estadounidenses para que los países productores amplíen su oferta se vieron intensificados luego de que el ministro iraquí de Petróleo, Mohamed Rachid, anunciara en Bagdad una reducción adicional de 300 mil barriles diarios, y amenzara con ampliarla aún más si la ONU no levanta las sanciones económicas al país.