El Fondo Monetario Internacional advirtió que los buenos tiempos en la economía global esconden riesgos de largo plazo, como una deuda equivalente a US$ 135 billones en las naciones del G20 cuyo servicio ya resulta difícil para empresas y consumidores.
Un día después de elevar el pronóstico de crecimiento global para este año y el próximo, el FMI recordó que las buenas condiciones estaban generando un gusto por el riesgo que, sumado a la respuesta de los bancos centrales a la crisis global de 2008, parece estar preparando el terreno para una nueva crisis financiera.
“Los buenos tiempos están generando complacencia y generando excesos financieros”, dijo Tobías Adrian, el vigilante de las estabilidad financiera del FMI.
Si estas condiciones se mantienen, dice el FMI en su informe de estabilidad, podrían conducirnos a una crisis en la que los activos caigan 15% y las propiedades 9%.