La Comisión Europea consideró el martes que no es necesaria una nueva subida de los tipos de interés a pesar de la evolución desfavorable que registra la inflación en la Eurozona.
Según reconoció el portavoz del comisario europeo de Economía, Pedro Solbes, la última tasa de inflación proporcionada por Eurostat “no es muy positiva”, pero no justifica, añadió, un cambio en la política monetaria del Banco Central Europeo (BCE).
La tasa de inflación interanual en la zona euro (once países de la moneda única) aumentó hasta 1,6% en el mes de noviembre, el doble que hace un año, según la Oficina de estadística de la Unión Europea (Eurostat).
Irlanda, con 3,0%; España y Dinamarca, con 2,7% cada uno, son los países que presentan una tasa más alta.
Según Bruselas, este empeoramiento era previsible debido al aumento de los precios del petróleo.
El BCE ha mantenido desde el 4 de noviembre, en 3%, 4% y 2% los tipos de interés aplicables a las operaciones de refinanciación, la facilidad marginal de crédito y la facilidad de depósito, respectivamente.
La Comisión Europea consideró el martes que no es necesaria una nueva subida de los tipos de interés a pesar de la evolución desfavorable que registra la inflación en la Eurozona.
Según reconoció el portavoz del comisario europeo de Economía, Pedro Solbes, la última tasa de inflación proporcionada por Eurostat “no es muy positiva”, pero no justifica, añadió, un cambio en la política monetaria del Banco Central Europeo (BCE).
La tasa de inflación interanual en la zona euro (once países de la moneda única) aumentó hasta 1,6% en el mes de noviembre, el doble que hace un año, según la Oficina de estadística de la Unión Europea (Eurostat).
Irlanda, con 3,0%; España y Dinamarca, con 2,7% cada uno, son los países que presentan una tasa más alta.
Según Bruselas, este empeoramiento era previsible debido al aumento de los precios del petróleo.
El BCE ha mantenido desde el 4 de noviembre, en 3%, 4% y 2% los tipos de interés aplicables a las operaciones de refinanciación, la facilidad marginal de crédito y la facilidad de depósito, respectivamente.
